Sindicatos y clubes siguen sin acuerdo a 48 horas del inicio de la Liga F
- La segunda jornada de negociaciones con mediadores no ha permitido desconvocar la huelga
- La principal discrepancia en este momento es por 3.000 euros anuales en el salario mínimo
Los clubes de la liga femenina de fútbol profesional (Liga F) y los sindicatos han concluido sin acuerdo una jornada más de largas negociaciones a solo 48 horas para el inicio de la competición, y ya parece difícil que empiece como estaba previsto por la convocatoria de huelga.
Después de 10 horas de reunión este miércoles, a pesar de la mediación institucional del SIMA por segundo día seguido, las partes han mantenido las discrepancias y no hay fecha para una nueva reunión, según han explicado fuentes de la negociación a RTVE.
El desacuerdo principal en este momento es por 3.000 euros anuales en el salario mínimo. Los sindicatos piden 23.000 y la patronal ofrece 20.000 con opción de llegar a la demanda de la parte social si hay beneficios.
Los sindicatos Futpro (con seis representantes en la mesa de negociación del convenio), AFE (cuatro), Futbolistas On (uno), CC.OO. (uno) y UGT (uno) anunciaron el pasado día 1 la convocatoria de una huelga para las dos primeras jornadas de la competición, que debe empezar este viernes 8 de septiembre con el partido Sevilla - Tenerife (21.00 horas), ante la falta de acuerdo con la patronal para la mejora del convenio colectivo en el aspectos como salario, parcialidad, maternidad, formación o protocolo de abusos.
El fútbol femenino español ya ha vivido varias huelgas, la primera en noviembre de 2019 cuando las jugadoras reclamaban entonces el primer convenio colectivo. Tuvo un seguimiento unánime y se llegó a un preacuerdo antes de la firma, meses después, del texto definitivo que fijó en 16.000 euros brutos anuales el sueldo mínimo, recuerda Efe.
El fútbol femenino dio otro paso importante en España cuando las jugadoras lograron la profesionalización en 2022. La temporada pasada el inicio de la Liga F se encontró con otra convocatoria de huelga, en este caso por parte del colectivo arbitral.