Alemania termina invicta y se corona campeona mundial de baloncesto
- Los germanos ganan por primera vez en su historia el Mundial de Baloncesto al imponerse 83-77 a Serbia en la final
- Dennis Schröder y Franz Wagner lideraron la reacción de su equipo, que vale un oro
Alemania es la nueva campeona del Mundo de baloncesto, al imponerse 83-77 a Serbia en la final de este domingo en el Mall of Asia Arena de Manila. Los germanos, único equipo invicto del torneo, ponen así el broche de oro a este Mundial llevándose el triunfo en su primera final mundialista ante una Serbia que, pese a comenzar mejor el choque, terminó cayendo en otra final.
Alemania sucede así a España como campeona mundial, mientras que Canadá se llevó el bronce en su partido frente a Estados Unidos, que se marchó de vacío.
Dennis Schröder, con 23 puntos y MVP del torneo, y Franz Wagner (19), fueron los líderes de una Alemania que comenzó perdiendo el primer cuarto (23-26) ante a una Serbia que arrancó muy segura. Los dos fueron los artífices de la reacción germana que llegó a partir del tercer cuarto.
Buen inicio de Serbia
Los de Pesic iniciaron el choque con un parcial de 5-0 para distanciarse en el marcador, pero los germanos supieron reaccionar y no les dejaron irse mucho más. Los serbios vieron además como Dobric se torció el tobillo y tuvo que abandonar el choque sin poder apoyar el pie.
Ese contratiempo no descentró a Serbia que no quería perder. Por entonces Schröder y Wagner eran los protagonistas por parte de Alemania y Bodanovic, por Serbia. Y el partido era un toma y daca que terminó con máxima igualdad al descanso (47-47).
Schröder toma el mando y Alemania reacciona
Fue tras el paso por vestuarios cuando los alemanes metieron la directa hacia el oro. Bajo el mando de Schröder los germanos comenzaron a tomar ventaja ante una Serbia que estaba desconcertada y que no sabía cómo reaccionar.
Así, y tras un parcial de 9-0, los germanos lograron su máxima diferencia del choque (+12) y terminaron el tercer cuarto con una ventaja de 69-57, tras haber conseguido frenar la anotación de los serbios (22-10 en este acto)
Aun así, la victoria pudo ser para cualquiera. Sobre todo tras el parcial de 5-0 con el que arrancaron los de Pesic el último cuarto comenzó. Eso hizo que Gordon Herbert pidiera un tiempo muerto para evitar que Alemania desperdiciara su ventaja.
Y es que, ante la desconexión de Bogdanovic, fue Avramovic quien tiró de los suyos, dejando la diferencia en solo tres puntos a falta de 40 segundos.
Después, un error de Guduric a falta de 13 segundos regaló la posesión e hizo que los alemanes aseguraran su victoria y se convirtieran por primera vez en su historia en campeones del mundo.