Francia logra su tercera corona mundial tras ganar en la gran final a Noruega
- La exhibición ofensiva en la primera mitad se torneó en dominio de las defensa en la segunda
- Francia es actualmente vigente campeona olímpica y mundial
Francia logra su tercera corona mundial (31-28) gracias a una sensacional primera parte en ataque y unos sólidos segundos 30 minutos en defensa, donde supieron mantener la calma ante los arreones noruegos. La primera parte, totalmente dominada por los ataque, finalizó con un altísimo parcial de 20-17 para las galas. En la segunda, el empuje de Oftedal y Mork llegó a poner a las nórdicas a solo un tanto (26-25, m.49), pero en Francia aparecieron Grandveau en ataque y Sako en la portería para asegurar un título más, siendo desde hoy mismo vigentes campeonas olímpicas y mundiales.
Noruega y Francia deleitaron al Jyske Arena con unos primeros 30 minutos para la historia. Los ataques vencieron a las defensas en un inicio de partido con un ritmo endiablado, donde cada golpe se respondía con rapidez en el lado contrario. La eficacia francesa en la primera parte fue digna de mencionar (20 goles en 30 minutos), un equipo que viene destacando por su defensa y que hoy, durante gran parte del choque, ha destacado por su gran juego en transición. Noruega sobrevivió gracias a su trio de primera línea. Mork, Reistad y Oftedal tomaron las riendas del ataque para poder seguir el ritmo galo, quien encontró a muchas anotadoras distintas en cada opción de ataque. Francia se marchaba con tres goles de ventaja a vestuarios, y la sensación que podían haber sido más (20-17).
Segunda parte de infarto con otro conato de remontada Noruega
Como ya sucediese en la final mundial de 2021 entre estos dos equipos, una gran primera parte gala no iba a echar por tierra las ilusiones noruegas. Un inicio loco de segunda mitad y Lunde, portera noruega, hicieron que la portería nórdica cada vez se hiciese más pequeña para Francia. Las nórdicas desde las manos de Oftedal conseguían ponerse a dos, pero Francia, de manos de sus extremos, conseguían contener la hemorragia. Noruega se vio en superioridad númerica y con la oportunidad de ponerse muy cerca de Francia, pero la aparición estelar de Sako, portera francesa, evitó con dos grandes paradas que Noruega anotara en la superioridad.
La locura anotadora dejó lugar a unos 30 minutos de nervios, donde en cada ataque se respiraba tensión, con muchos ataques precipitados por el aviso de pasivo y con las porteras subiendo sus porcentajes de atajadas. Lunde, portera de 43 años, se empezó a convertir en la esperanza noruega, deteniendo varios tiros, incluído un 7 metros a Boukitt que parecía ser el comienzo de un cambio de dinámica. Entrando en los 10 últimos minutos la ventaja era de únicamente un gol, pero Francia apretó los dientes para resistir con golazos al borde del pasivo.
Francia, desde ese momento, subió como la espuma. Dos pérdidas impropias de Noruega en ataque conllevaron dos goles de Grandveau, que devolvió la máxima de cuatro goles a Francia (29-25, m.53). Nora Mork, brillante durante todo el encuentro, perdió tres balones consecutivos en la circulación de balón, algo muy extraño en ella, haciendo que Noruega más que una remontada tuviese que recurrir a una epicidad. Pero Noruega tiene mil vidas y las epicidades las tiene al orden del día, como ya sucediera en semifinal ante Dinamarca. Redujo la desventaja a los dos goles (30-28, m.57), pero Grandveau se erigió en la heroína de los úlitmos minutos. Otro golazo en pasivo dio alas a Francia, que ya no vio peligrar su tercera corona.
Francia logra un campeonato histórico, por romper la mala racha ante Noruega, quien les había vencido en la final del Mundial 2021 y en la semi del Europeo 2022, logrando nueve victorias en los nueve partidos disputados, algo solo visto una vez en la historia, y con la sensación de que el balonmano galo puede soñar de cara a París 2024.