Marcelinho destrona a Pablo Laso como mejor asistente de la ACB

• El jugador brasileño ha superado las 2.896 asistencias de Pablo Laso
• Con un pase de alley-oop a Giorgi Shermadini, Huertas ha logrado su 4ª asistencia en el partido y la número 2897 de su carrera

Marcelinho Huertas a RTVE: "Es un orgullo formar parte de esta liga"

A sus 40 años, Marcelinho Huertas ha logrado un nuevo hito en su carrera deportiva. Ya venía avisando desde hace unas jornadas y finalmente ha sido este domingo cuando el base brasileño se convertía en el mejor asistente de la liga ACB. En el partido que disputaban Lenovo Tenerife - Dreamland Gran Canaria y con un pase de alley-oop a Giorgi Shermadini, Huertas ha logrado su cuarta asistencia en el encuentro y la número 2897 de su carrera. Le arrebata así un liderato histórico a Pablo Laso que ha ostentado el título durante 32 años. El exjugador del Real Madrid y actual entrenador del Bayern Múnich, se convirtió en el mejor asistente en la temporada de 1991-92 cuando superó a José Luis Llorente, después puso el récord en 2.896 asistencias y hasta hoy nadie lo había superado. Según el ranking de asistentes de la Liga Endesa, el jugador en activo más cercano al nuevo récord es Sergio Llul con 1.865 asistencias, más de mil por debajo de Marcelinho, por lo que su reinado puede seguir los pasos de Laso.

6,7 asistencias por partido

El promedio actual del jugador brasileño por partido se sitúa en las 6,7 asistencias por partido. Su segunda mejor cifra en toda su trayectoria profesional, nada más y nada menos que 20 años, únicamente superada por la media de 8 que firmó en la temporada 2019-20. "Hay una diferencia bastante grande de estilos entre el Marcelinho que llegaba hace 20 años y el de ahora. Buscaba más anotar que dirigir o pasar la pelota", decía el baloncestista a RTVE.

Tal es el nivel del base en el Lenovo Tenerife, que en octubre se convertía en el primer jugador en alcanzar las 900 asistencias en el club canario. Nadie antes había alcanzado estas cifras, ni tan siquiera habían llegado a alcanzar las 600.

Dos décadas en la liga ACB

Huertas empezó su andadura en liga ACB, o liga Endesa, en la temporada 2004-05 con el DKV Joventut, donde estuvo tres temporadas. Después, tras una temporada en el Bilbao Basket, vivió la que sería su primera etapa en el Baskonia (temporadas 2009-10 y 2010-11) y se marchó al FC Barcelona. Estuvo en el equipo de la Ciudad Condal hasta 2015 y entonces empezaría su segunda etapa en el club vasco. No fue hasta la temporada de 2019-20 que decidió cambiar su rumbo y fichó por su actual equipo, Lenovo Tenerife (entonces Iberostar Tenerife), y allí continúa cinco años después.

En total, el brasileño ha disputado 647 partidos en la liga española, con más de 14.200 minutos disputados y 6.194 puntos anotados. "Felicidad y orgullo por formar parte de esta liga durante tantos años y haber logrado cosas en mi carrera que jamás hubiese pensado", señalaba. Sobre si podremos disfrutar de él la temporada que viene en la ACB, el base da un escueto y rotundo "sí", y además su futura retirada sería en su actual club, "estoy muy contento aquí, seguiré más años. Muy difícil que termine mi carrera en otro lugar", aseguraba.

Huertas lo ha ganado casi todo, en su palmarés, figuran tres títulos de liga ACB, una Liga de Campeones en 2022, la Copa del Rey de 2013, una Supercopa de España en 2011 y la Eurocup de la FIBA en el año 2006. ¿Cuál es su espinita clavada? La Euroliga.

Su momento más especial

Con veinte años de trayectoria, son muchos los momentos que ha vivido Marcelinho en una cancha, pero hay uno que recuerda con especial cariño. Concretamente el 6 de junio de 2012, el primer partido entre el Barça Regal y el Real Madrid de la final de la liga Endesa. Apenas quedaban dos segundos y, con el marcador en contra (78-80), Marcelinho tiró un triple a la desesperada que acabó entrando y dando la primera victoria de la final al equipo azulgrana, que terminaría ganando la liga ese año.

No cabe duda de que a Marcelinho aún le queda pila para rato porque, como dice él, el secreto está en "la ilusión, el hambre y la pasión" y de eso, al brasileño parece sobrarle.