Super Amara Bera Bera conquista su octava Copa de la Reina de balonmano ante un Valladolid sin opciones
- Las guipuzcoanas revalidan el título conquistado en 2023 tras vencer por un contundente 32-24
- La brasileña Marianne Fernandes ha sido la máxima goleadora (5) y fue elegida 'MVP' del encuentro
El Super Amara Bera Bera se adjudicó su octava Copa de la Reina, segunda consecutiva, que otorga además pasaporte europeo tras otra exhibición defensiva y pleno acierto en ataque ante un Caja Rural Aula Valladolid que aguantó 25 minutos para ceder por un contundente 32-24 con la brasileña Marianne Fernandes elegida 'MVP' de la final.
Empezaron fuertes las donostiarras y parecía que, al amparo de sus miles de aficionados iba a tener un dominio claro del encuentro, sobre todo porque la estrella vallisoletana Prieto O'Mullony estaba contenida, de forma que enseguida las locales cogieron rápidamente cuatro goles de renta.
Un parcial de 1-5 para las pucelanas, sin embargo, permitió al equipo de Miguel Ángel Peñas empatar el encuentro y mandar a las anfitrionas el mensaje de que iban a pelear el triunfo y su favoritismo hasta el límite de sus fuerzas, ahora con O'Mullony volviendo a hacer daño con sus disparos y penetraciones.
Un tiempo muerto cuando las cosas se le complicaron a Bera Bera tuvo un resultado magnífico para sus intereses ya que, con otro parcial de 3-0, volvió a coger un timón de la final que no abandonaría y a estresar a un Aula Valladolid al que le costaba un mundo descifrar la defensa de las vascas.
El empuje final de Bera Bera, con Boada y la argentina Cavo plenas de inspiración, les permitiría llegar con una renta de cinco goles que era todo un tesoro que si las fuerzas no fallaban podría ser determinante.
Las guipuzcoanas siguieron firmes en la reanudación, la brasileña Mariane Fernandes era el desatascador con su poderoso lanzamiento y Valladolid se quedaba sin ideas y sin pilas para seguir el ritmo de las de Illunbe.
Miguel Ángel Peñas, que agota sus últimos días en el banquillo, se la jugó con un último tiempo muerto en el que pidió darlo todo a un equipo que caía ya por siete goles y que no llegaría a dar las prestaciones necesarias para meterse en una final que se llevó de calle el Bera Bera