España dice adiós a la Selva Negra, el lugar donde todo cambió
- La selección llegó a Donaueschingen con un perfil bajo y abandona su cuartel general para disputar la final
- Final de la Eurocopa 2024: España-Inglaterra, en directo desde el Estadio Olímpico de Berlín
Hace 35 días que España aterrizó en la Selva Negra. Donaueschingen, una localidad de nombre impronunciable, ya es un lugar de grato recuerdo para el fútbol español. Entre frondosos bosques y pintorescos pueblos, la selección abandona este sábado su cuartel general para poner rumbo a Berlín, donde el domingo jugará la gran final de la Eurocopa 2024.
España llegó a Alemania bajo una enorme tromba de agua. Un fuerte temporal azotaba el sur del país y la selección se refugió en su espectacular hotel de concentración, alejado de cualquier indicio de Eurocopa y a cientos de kilómetros de todos sus partidos. Un lugar elegido a conciencia, sin embargo, para trabajar sin presiones externas. Un mes después, la elección parece perfecta.
La tormenta de bienvenida no parecía un buen augurio para un equipo que ha roto todos los pronósticos. "Nosotros creíamos desde el primer día", aseguraba Luis de la Fuente a RTVE el pasado miércoles, tras conocer que Inglaterra sería su rival para conquistar una Eurocopa en la que nadie contaba con España.
Confianza ciega
Aunque parece un comentario ventajista visto lo visto, es un mantra que han repetido todos y cada uno de los integrantes de esta selección española a lo largo de su concentración, desde el capitán, Álvaro Morata, que alzó la voz para poner en su lugar al, en general, minusvalorado futbolista español.
El capitán de la Roja, de hecho, ya avisó de las intenciones de esta selección en Madrid, antes de partir a la Euro: "El objetivo es aspirar al máximo, y el máximo es ganar la Eurocopa". Sin embargo, ni prensa ni aficionados ni casas de apuestas creían en el desenlace de un torneo en el que España ha maravillado de principio a fin.
Lejos de sufrir por su presencia en el grupo de la muerte, España se clasificó primera tras ganar sus tres partidos a Croacia, Italia y Albania. La mejor fase de grupos de su historia. El éxito continuó en las eliminatorias y, en cada regreso a la Selva Negra, buen ambiente, buen humor y mensajes de confianza. "Esto os sorprende más a vosotros que a nosotros", dijo De la Fuente.
Los cruces y las grandes selecciones fueron cayendo hasta alcanzar la final. Berlín, donde empezó todo el 15 de junio contra Croacia, será el lugar donde España buscará hacer historia con su cuarta Eurocopa. Historia de un equipo con el que nadie contaba y que, agazapado en la Selva Negra, ha ido devorando rivales y sumando fieles donde solo había desinterés.