Bagnaia gana en Motegui y aprieta más la lucha con Jorge Martín por el título de MotoGP
- El italiano controló toda la carrera desde la 1ª posición, calculando las presiones del español
- 'Martineitor' aguanta el liderato a sólo 10 puntos de Bagnaia
Francesco ‘Pecco’ Bagnaia ha vuelto a comprimir la distancia con Jorge Martín por el título de MotoGP. Se le ha dado bien al italiano el circuito de Motegui, donde ha pasado de 21 puntos a 10 de diferencia tras su victoria número 8 este domingo para comprimir aún más la lucha por el título a falta de 3 grandes premios para el final de temporada. El podio lo completó Marc Márquez, con un nuevo 3º puesto bien defendido ante el acoso de Bastianini.
Las ganas de recortar los 15 puntos que le separaban de Martín se le notaron desde el principio a Bagnaia, que se colocó primero desde la salida para controlar toda la carrera desde la cabeza. Un inicio sin problemas hasta que llegaron las primeras vueltas, donde Joan Mir y Álex Márquez en un incidente compartido no pudieron rodar más allá de la primera vuelta.
Pedro Acosta sufrió el mismo destino en la curva 14 de la 4ª, cuando rodaba en segunda posición.
‘Calculeitor’ vs ‘Martineitor’
La batalla estaba servida. Durante los incidentes, Jorge Martín pasó del 11º puesto al 2º, para controlar la estela del italiano y Márquez hizo lo propio hasta alcanzar el 3º puesto, que ya firmó en el sprint de este sábado.
‘Martineitor’ preionaba, buscando un último ataque en las 5 vueltas finales, arriesgando con la caída, pero la calculadora del italiano funcionaba a la perfección. Sólo le pudo recortar milésimas por parcial. El piloto de Ducati iba a ganar, pero el español quería hacerle sudar para ello.
La acción se contagió juso detrás, con un Márquez acosado por Bastianini por la tercera plaza. De la misma manera, esta vez era el español el que se sentía cómodo a la defensa, dejando al italiano con la miel del podio en los labios.
El español Manuel González logra su primera victoria como gran estratega
El español Manuel González (Kalex) logró su primera victoria en el campeonato del mundo de motociclismo al vencer el Gran Premio de Japón de Moto2 en el circuito de Motegi demostrando ser un gran estratega al optar por montar neumáticos de seco cuando la lluvia interrumpió una vez la carrera.
Una tímida lluvia se convirtió en la gran protagonista de la carrera de Moto2, pues obligó a detener la misma y las distintas estrategias de equipos y pilotos acabaron marcando el ulterior desarrollo de la prueba.