Un autogol de Giménez da el triunfo al Betis y ahonda la crisis del Atlético de Madrid
- Los de Simeone no consiguieron remontar el tanto en propia puerta que se marcaron a los tres minutos
- Partido para olvidar de un Atlético que pierde su condición de invicto en Liga
El Real Betis ha asestado la primera derrota liguera al Atlético de Madrid al imponerse 1-0 gracias a un gol de Giménez en propia puerta. Una derrota que agudiza la crisis rojiblanca y pone de manifiesto el mal momento de los colchoneros que solo han ganado uno de sus últimos cinco partidos (1V, 2E, 2D).
El equipo de Simeone necesitaba dar un golpe de autoridad en la mesa. Demostrar que los desastres cosechados en los últimos partidos (ante la Real en Liga y ante Benfica y Lille en Champions) habían quedado atrás. Pero nada más lejos de la realidad.
Solo habían pasado tres minutos cuando los de Simeone ya perdían en el Villamarín gracias a un autogol de Giménez tras una internada de Abde. El balón fue tocado primero por Witsel y, después Giménez, en su intento de despeje, terminó de colarlo en la portería de Oblak.
Otro partido que el Atlético comenzaba perdiendo, como la pasada semana ante el Leganés, y en el que tocaba remontar. Sin embargo, la zaga colchonera era un mar de nervios. Un coladero en el que se sucedían las ocasiones a favor del Betis y esa remontada no llegó.
Ocasiones perdonadas por el Betis
Al cuarto de hora Abde pudo poner el 2-0 tras otra pérdida de balón de los rojiblancos, pero el delantero bético falló en el mano a mano con Oblak y el marcador no se movió. Diez minutos más tarde, Abde volvió a tener otra grandísima ocasión, pero entonces fue el poste el que evitó que llegara un nuevo tanto.
Esa fue la tónica general del primer tiempo. Un Betis como un ciclón que arrasó a un Atlético que no sabía cómo salir de esa vorágine. La única ocasión de los colchoneros en este acto fue un remate de Reinildo tras un saque de esquina en el que Rui Silva se lució con un paradón.
Aun así, la mejor noticia para los de Simeone era que solo se fueron perdiendo 1-0 al descanso cuando, perfectamente, podrían haberse ido perdiendo por dos o tres goles más de diferencia.
El Cholo trató de recomponer a su equipo con los cambios. Dejó a Reinildo y Gallagher en la caseta y apostó por Javi Galán y Sorloth como remplazo, pero las cosas empezaron igual. Con Abde poniendo en aprietos a Oblak bajo palos.
Poco después aparecieron por primera vez los delanteros rojiblancos. Primero Griezmann con un remate que se fue alto y después, Julián Álvarez que soltó un tremendo zapatazo desde la línea de la frontal que despejó Rui Silva.
Dos palos de Correa evitan el gol del Atlético
Pero estas dos ocasiones fueron un espejismo porque el Betis siguió atacando y protagonizando las oportunidades más claras. Como un nuevo tiro al poste de Fornals en el minuto 65. El segundo del partido. Pero lo más llamativo de esta jugada es que en el rechace Gil Manzano pitó penalti por una patada de Galán a Fornals. Sin embargo, el VAR llamó al colegiado extremeño y este lo anuló tras ver que el defensa rojiblanco tocó el balón y que Fornals bajó demasiado la cabeza para buscar el remate.
Pese a todo, los rojiblancos mejoraron un poco en este segundo tiempo y también dispusieron de ocasiones para empatar e incluso ganar el choque con dos disparos de Correa. Dos ocasiones casi consecutivas (min. 80 y 84) que acabaron estrellándose en el poste.
Posteriormente, Vitor Roque consiguió batir a Oblak en el 86 en una contra rapidísima, pero el tanto no subió al marcador por fuera de juego del delantero brasileño.
Al final, un 1-0 favorable al Betis que deja a la Liga sin ningún equipo invicto tras las derrotas de Atlético y Madrid en esta jornada. Un triunfo que sirve a los de Pellegrini para auparse al quinto puesto de la tabla y situarse a solo dos puntos de un Atlético sumido en una crisis de juego y resultados.