Verstappen, a sentenciar en Las Vegas su cuarto Mundial de F1, pese a su mal rendimiento en los libres

• El piloto de Red Bull terminó 17º este viernes, pero cuenta con 62 puntos de ventaja sobre Norris
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El piloto de F1 Max Verstappen antes del GP de Las Vegas REUTERS

El Mundial de F1 2024 entra en su recta final y Max Verstappen (Red Bull), vigente campeón y líder del campeonato, espera poder sentenciarlo en el GP de Las Vegas, que arranca este viernes.

El piloto neerlandés llega a la vigesimosegunda prueba del calendario con 393 puntos en su haber. Una ventaja de 62 puntos respecto al británico Lando Norris (McLaren), por lo que está ante su primera oportunidad de ganar y levantar el que sería su cuarto título mundial. Norris, en cambio, casi necesita un milagro para evitar que Verstappen vuelva a revalidar el título. Ahora Verstappen será campeón si sale de Las Vegas con al menos 60 de colchón.

Para ello tiene que mejorar la actuación de este viernes en los libres, donde solo pudo ser 17º, mientras que Lewis Hamilton fue el más rápido de todos.

Hamilton el más rápido en unos libres nefastos para 'Mad Max'

El británico Lewis Hamilton (Mercedes) reivindicó de nuevo la fuerza de Mercedes en el GP de Las Vegas al volver a firmar el mejor tiempo de la segunda sesión de entrenamientos libres, con apenas once milésimas de ventaja sobre el británico Lando Norris (McLaren), que fue segundo.

En su antepenúltima carrera con Mercedes antes de despedirse y marcharse a Ferrari, el heptacampeón del mundo marcó un tiempo de 1:33.825, muy similar al de Norris, segundo, y que marcó quince posiciones de diferencia respecto al neerlandés Max Verstappen (Red Bull), que ni siquiera puso las gomas blandas.

Por su parte, el español Carlos Sainz (Ferrari) terminó cuarto, a casi tres décimas de Hamilton, mientras que el también español Fernando Alonso (Aston Martin) acabó décimo cuarto en una sesión en la que se volvieron a ver muchas bloqueadas de frenos, propiciadas, en gran medida por el asfalto de la ciudad del juego, todavía más frío que en la primera sesión.

Entre esa situación y el poco agarre, nadie se salvó de hacer una excursión a las escapatorias del circuito, sobre todo en la curva catorce, tras la gran recta, en la que muchos pilotos eran incapaces de controlar su monoplaza.

Tampoco pudo manejar su vehículo el tailandés Alexander Albol (Williams), que terminó último y sin poder salir a pista en los minutos finales de la sesión por un problema en un monoplaza que se paró en seco y que obligó a sacar una momentánea bandera roja a falta de veinte minutos de carrera.

Aunque Verstappen puede asegurar este mismo fin de semana el Mundial de pilotos a poco que gane a Norris, le empate o pierda sólo dos puntos respecto a este, la realidad es que ni siquiera probó las gomas blandas y se quedó a más de dos segundos de la cabeza de la sesión, una anomalía dentro de lo que es el gen competitivo de Verstappen.

Y es que la sesión estuvo dominada de principio a fin por Mercedes. Primero fue el británico George Russell (Mercedes), que marcó nada más comenzar el, hasta ese entonces, mejor tiempo del fin de semana, bajando de 1.35.

Mientras los ingenieros se afanaban en cambiar la configuración del Aston Martin de Alonso, con muchísimo rebote que había imposible la conducción, el monegasco Charles Leclerc (Ferrari) se ponía primero y Sainz, tercero, mostrando la fuerza que también tiene Ferrari en este circuito.

Pero Mercedes volvió a ponerse a tirar y, aunque Norris se coló en la segunda posición, nada pudo hacer para detener el ritmo del siete veces campeón del mundo, que con su tiempo de 1:33.825 lideró esta segunda sesión, la última de este viernes europeo disputada en la noche del jueves en Las Vegas.

A igualar a Prost y Vettel

Verstappen deberá mejorar en los libres y la clasificación de este sábado si quiere dejar sentenciado el Mundial este mismo fin de semana.

Lo que está claro es que el neerlandes llega con mucha confianza después de ganar en Brasil y romper una dinámica de diez carreras sin ganar. Además, es consciente de que su cuarta corona está muy cerca, y si la logra igualaría a dos leyendas como el francés Alain Prost (1985, 1986, 1989, 1993) y Sebastian Vettel (2010, 2011, 2012, 2013).