...Por Felipe Fernández.
Un problema ya crónico en el Real Madrid atropelló al chileno nada más comenzar su andadura en el club. A pesar de que el entrenador había manifestado su deseo de contar con Sneijder y Robben, ambos fueron traspasados al Inter de Milán y al Bayern de Múnich, respectivamente. La explicación era una cuestión económica, el club necesitaba sufragar parte del gran desembolso realizado en fichajes como el de Kaká o Cristiano.
En el Real Madrid existe una jerarquía: Florentino Pérez, Jorge Valdano, José Ángel Sánchez y después el entrenador de turno.
La venta de los dos holandeses fue el primer ejemplo de la 'Era Florentino II' que corroboró este sistema de mandos de la nave blanca. La autoridad de Pellegrini sería, desde ese momento, puesta en tela de juicio.
Durante toda la campaña el Real Madrid de Pellegrini ha carecido de un estilo de juego definido. El ataque madridista se ha basado en arreones, cuando el marcador así lo exigía, que se encargaban de resolver sus individualidades (casi siempre Cristiano Ronaldo e Higuaín). El grueso de las acciones se han llevado a cabo por el centro, causando en la mayoría de las ocasiones un atasco y un deslucido ataque en estático. Las bandas han estado desaprovechadas salvo ciertas ocasiones en las que los laterales se han sumado al ataque. Pellegrini ha asegurado que su mérito ha sido conseguir que el equipo juegue de tal forma que las virtudes de sus delanteros destaquen sobremanera: "Elaborando más el juego, difícil que el Madrid hiciera tantos goles. Ha sido mérito del equipo el haberse podido adaptar a las características de Cristiano".
Algo que ha contribuído a esta ausencia ha sido la variabilidad continua
del dibujo táctico y del once titular a lo largo de la temporada. Pellegrini quiso instaurar el modelo que le había funcionado en Villarreal hasta que se dio cuenta que, en el Real Madrid, ese dibujo obligaba a sentar a algunos de los 'cracks' fichados por el presidente (Kaká, Benzema o Cristiano). En un reducido número de partidos se ha repetido el once de inicio (las lesiones tampoco han ayudado), prueba de ello son los casos de Lass, Raúl, Gago, Granero, Van der Vaart o Guti. Jugadores que durante ciertas etapas han sido "titularísimos", del mismo modo que en otras fases del curso se han visto enclaustrados en el banquillo.
Otro de los frentes abiertos contra el chileno ha sido el de la cantera. Mientras la Masía es la abanderada de los éxitos culés, de La Fabrica sólo han podido llegar a debutar dos o tres canteranos con el primer equipo.
El Real Madrid cayó con estrépito en dieciseisavos de la Copa del Rey ante un equipo que milita en Segunda B. El Alcorcón le metió un repaso en el partido de ida (4-0) y en el de vuelta, los jugadores blancos sólo fueron capaces de anotar un gol (1-0).
Los jugadores, el entrenador y el Director Deportivo del Real Madrid, Jorge Valdano, hablaron de fracaso estrepitoso tras perder 4-0. La afición merengue, aspaventada por ciertos sectores de la prensa, señalaron al entrenador chileno como el principal y único culpable del fracaso blanco. Esta fue la primera losa con la que Pellegrini tuvo que convivir hasta el final de temporada.
La eliminación en Copa ante el Alcorcón, un Segunda B, volvió a traer aires de crisis en el Real Madrid. No era la primera vez que el equipo blanco se despedía de una competición que no gana desde 1993, pero el desembolso hecho en fichajes y el reciente triplete del Barça habían ilusionado al madridismo con la idea de ver como su equipo también era capaz de llevar a cabo una gesta similar y responder así a su archienemigo.
El Real Madrid se había marcado como mayor objetivo esta temporada la Champions por dos razones: ya eran seis años sin pasar de octavos y que la final se iba a disputar en el coliseo blanco, el Santiago Bernabéu. 56 millones de inversión, ocho fichajes (CR9, Kaká, Granero, Xabi Alonso, Garay, Albiol, Arbeloa y Benzema), nuevo entrenador (Pellegrini), nuevo Presidente (Florentino Pérez), nuevo director general (Jorge Valdano) nuevo director técnico (Pardeza) y mismos vicios. Un equipo hecho a base de cartera tampoco sirvió para remontar el vuelo en una competición que ha sido la fuente de inspiración del conjunto blanco a lo largo de sus 108 años de historia. La 'bestia negra' fue el Olympique de Lyon, equipo al que los de Pellegrini fueron incapaces de ganar, ni en Gerland, ni en el mismísimo Bernabéu. Tras el 1-0 de la ida, el equipo francés arrancó un 1-1 que echó a los madridistas de la máxima competición continental.
Si lo de Alcorcón afectó al entrenador, la eliminación europea posicionó a Pellegrini en un abismo del que sólo la buena marcha que el equipo llevaba en Liga le mantuvo en el puesto.
Bastante bien ha toreado Pellegrini el toro que representa el vestuario madridista, nunca ha salido de su boca una palabra más alta que otra hacia ningún jugador. Sin embargo, las contradicciones y los piques internos han trascendido a los medios de comunicación. La primera mancha en el currículum del chileno como gestor de la plantilla fue la cancelación de las concentraciones previas a los partidos. Las concentraciones habían sido instauradas por el técnico nada más llegar y eran, según él, "innegociables".
Con los jugadores también hubo lo suyo. Guti se pasó, casualmente después de su espantada del vestuario en Alcorcón, unas semanas en la nevera aquejado por unas presuntas molestias. Raúl pasó de ser un indiscutible en el once titular a titubear con el banquillo, en condición de "titularísimo" según Pellegrini, y de ahí a ser suplente fijo. Kaká por su parte, no tuvo un día menos indicado para dejar a su mujer experimentar en su Twitter que el día de la eliminación ante el Lyon. El brasileño tuvo que desmentir que no le sentó nada bien ser sustituido durante el choque. CR9 no se ha cortado nunca en expresar su malestar con la actitud del equipo, todo eso con el pique goleador particular con Higuaín siempre de fondo.
Para más inri, la temporada del Madrid ha coincidido con la inmejorable temporada del triplete del Inter de Milán. Un equipo éste entrenado por uno de los que sonaron como posibles antes incluso de que se fichara a Manuel Pellegrini el pasado verano.
Además, ciertos sectores de la prensa no han echado precisamente un capote al ingeniero chileno. A las primeras de cambio exigieron su cabeza y la eliminación del Barça de la Champions a manos del Inter fue la excusa perfecta para justificar el recambio de Pellegrini por Mourinho. 'Mou' tiene el aval de ser el "enemigo número uno del Barça".
El Real Madrid de Pellegrini ha sido el mejor Real Madrid de la historia en Liga. Ha marcado 102 goles en el campeonato, una media de 2,7 goles por jornada. Es el segundo mejor equipo, según sus números, de la historia de la Liga. Pero, desgraciadamente para el técnico chileno, ha topado con el Barça de Guardiola que es el mejor equipo de la historia liguera.
En número de goles, tan sólo el Madrid de la Quinta del Buitre 89-90 metió más (107) que el equipo de Pellegrini. Es la segunda vez, desde que la Liga la disputan 20 equipos, que un equipo que pasa de la centena de goles no se hace con el título (la primera fue el Barça de Robson en la 96-97 con 102).
Las dos derrotas en los enfrentamientos directos contra el FC Barcelona (1-0 en el Camp Nou y 0-2 en el Bernabéu) decidieron la Liga.
