Go Nagai: Mazinger Z pertenece a los sueños de los niños y no le cambiaría nada
A pesar de estar convaleciente de una operación, Nagai ha cumplido su compromiso con los organizadores del Salón de Cómic de Barcelona, para estar presente en este certamen, donde el aniversario de Mazinger Z es, sin duda, uno de los acontecimientos de esta edición en la que la robótica tiene un papel sobresaliente.
Rodeado de un séquito de personas que parecen controlar cada uno de sus gestos, vestido íntegramente de negro, Nagai explica, casi en susurros, que a pesar de la poca originalidad de las preguntas que los periodistas le formulan, no se cansa nunca de hablar de este robot gigante (de 18 metros de alto y 20 toneladas de peso) de aleación indestructible, ni tampoco de Koji Kabuto, su piloto, o del malvado Doctor Infierno y su acólito, el Baron Ashler.
Mazinger fue pionero en esa combinación, luego mil veces copiada: la de un robot gigante dirigido por un hombre desde su interior. Estos robots "mecha" siguieron ejerciendo influencia a otras sagas como Gundam o Evangelion.
Un fenómeno en todo el mundo
Aunque Nagoi es el padre de muchos personajes, Devilman, Violence Jack o Getter Robo, y de otros títulos de series de marcada carga erótica, con Mazinger, que apareció en 1972, supo enseguida que sería una obra que provocaría la reacción de los lectores, aunque pensó que se limitaría al mercado japonés.
Sin embargo, la serie de animación que se produjo a los pocos meses y que él mismo supervisó, se convirtió en un fenómeno tanto en su país de origen como en el resto del mundo (en España recaló un poco más tarde, en 1978).
"Nunca pensé que llegaría a tener la influencia que ha tenido en Europa ", señala este autor que desde adolescente soñaba con convertir a un robot en protagonista de un manga, como el Astroboy que tanto le había influido y porque "en Japón los robots están muy presentes porque reflejan el futuro".
La serie recibió algunas críticas por su violencia, considerada entonces poco apropiada para el público infantil, de hecho en aquella España de los 70 sólo se emitió un tercio de los 92 capítulos. Pero para Nagai, se trata únicamente de una lucha entre bestias mecánicas, entre el bien y el mal.
"Los robos se pelean para hacer realidad los sueños de un niño"
"No son seres humanos los que se pelean, sino robots. Es una lucha que tiene sentido en el marco de la historia y lo más importante: los robots se pelean para hacer realidad el sueño de un niño. Mazinger no anima a luchar, sino que enseña a los chicos que cuando se hagan mayores tendrán que hacerlo, no con violencia, pero deberán combatir en el mundo de los mayores", afirma.
No obstante, subraya que Mazinger no estaba diseñado como una simple arma. "Mazinger tiene una relación profunda con su piloto: Koji recibe el impacto de los golpes cuando los robots se enfrentan, pero a la vez Mazinger padece el dolor, es un robot muy humano hasta el punto que cuando le golpean o le dañan sale líquido como si fuera sangre", explica
El éxito fue tan enorme que el propio patrocinador (encargado del 'merchandising' que abarrotó el mercado de muñequitos, cromos, revistas...) fue quien curiosamente pidió a Nagai en 1974 que acabara con la serie y creara una secuela Great Mazinger, para poder sacar nuevos productos.
Sigue trabajando
"Yo hubiera continuado con el original más tiempo, pero el patrocinador tenía mucha fuerza", reconoce este autor que, a sus 68 años, sigue trabajando de forma "relajada" unas cinco o seis horas diarias de media.
Nagai tenía muchas ganas de visitar Barcelona, a donde ha viajado a pesar de que acaba de salir de una operación. Sin embargo, sus fans recibieron como una jarra de agua fría el anuncio de que sólo firmará 160 autógrafos a aquellos agraciados en un sorteo para el que además habrán tenido que pagar para poder participar.
"Es una cuestión de fuerza física, iba a tener muchas entrevistas y tenía miedo de encontrarme mal", se justifica Nagai, quien espera estar al cien por cien en su próxima visita.
Go Nagai que cuenta con un Memorial Hall dedicado a su figura en Wajima, su localidad de origen, está pensando retomar el personaje como novedad para este 40 aniversario, ya sea como película o de animación, y que aunque no se pueda llevar a cabo este año, al menos poder anunciarlo en 2012.
Con motivo de los 40 años de Mazinger, Norma Editorial ha reeditado el manga original en blanco y negro, cuyo primer volumen estará estos días en el salón, aunque a las librerías llegará el próximo 25 de mayo.