(Sintonía animada)

¿Podemos estar a la moda sin comprar?

(ALUMNA) Sí,

porque si tienes unos vaqueros

y a la moda son rotos, si quieres estar a la moda,

los puedes rajar un poco.

-Creo que es difícil estar a la moda sin comprar en tiendas que se llevan.

-Es más importante tener un estilo propio.

Se producen muchas prendas

y eso genera repercusiones en el medioambiente

y en las personas que hacen esta ropa.

(ALUMNA) Por ejemplo, tengo 32 camisetas.

¡32 camisetas!

(Sintonía animada)

(Conversaciones animadas)

"Clanners", os saludamos desde el Joaquín Blume

en Torrejón de Ardoz, un centro con un baúl muy especial

de la ropa perdida,

donde guardan prendas perdidas en el cole.

Y si no las reclaman, las donan.

Torrejón de Ardoz es una localidad de Madrid.

Nuestros protagonistas recomiendan visitar el parque Europa

y todas sus atracciones,

venir en carnaval porque les encanta

y celebran su comienzo con el Día de la Tortilla,

un concurso brutal en el que gana la tortilla más divertida.

¡Hay que probarlo!

¿Y ahora estáis listas y listos para zambullirnos

en un lugar oscuro y apretado?

Bucearemos en los armarios.

¿Cuánta ropa necesitamos? ¿Nueva o de segunda mano?

¿Podemos estar a la moda sin comprar ni dañar el medioambiente?

Antes veremos cómo eligen la ropa de diario

nuestros protagonistas de hoy.

Yo elijo mi ropa, depende del día y las actividades que tenga

y de si me gusta una u otra.

-La ropa que me pongo yo la elijo yo.

Y el día antes por la noche,

depende del horario, me pongo chándal o vaqueros.

-Yo elijo mi ropa. Abro el armario cada día

y lo que más me llama la atención

y depende si tengo Educación Física o no,

eso me pongo.

(Sintonía animada)

Aquí están nuestros protagonistas de hoy.

La mayoría elige el verano como estación favorita

y la media tarde como momento preferido.

¿Será que no hay cole?

Con honestidad, reconocen tener mucha ropa.

En algunos casos, hasta 30 camisetas,

18 pantalones o 10 pares de zapatillas,

algo en lo que no coincidirán con nuestra invitada,

Brenda Chávez,

periodista e investigadora especializada en consumo,

sostenibilidad y cultura.

Buenos días, chicos, ¿listos para el debate?

(TODOS) Sí. ¿Estáis nerviosos?

(TODOS) Sí. Hoy hablaremos sobre la moda,

lo que llevamos puesto, cómo elegimos la ropa,

cuánta necesitamos tener.

¿Podemos estar a la moda y cuidar el medioambiente?

Hoy contamos con Brenda.

Muchísimas gracias por venir.

Sabemos que eres especialista en sostenibilidad y consumo.

¿Estás nervosa tú también? Un poquillo.

Brenda nos ha traído un objeto muy especial para ella.

Efectivamente.

Os he traído esto. ¿Por qué creéis que es especial?

Creo que es de alguien importante para ti.

(ALUMNO) Te lo has puesto mucho y le tienes cariño.

¿Por qué es tan especial para ti?

Tiene una historia especial

que tiene que ver con cosas que habéis dicho

que contaré más adelante.

Bueno, nos deja con la intriga.

Creo que esta camisa

habrá que colgarla con el resto de ropa.

Vaya armario vamos a tener montado.

Yo creo que ya es hora, chicos, de comenzar el debate.

(TODOS) ¡Sí! Empezamos.

Os hemos visto entrar con prendas de ropa.

Os hemos puesto un reto previo al debate.

Os dividimos en dos grupos: el de quinto y el de sexto.

Cada grupo formaba un "outfit"

con un máximo de cinco prendas esenciales.

Y aquí están. A ver, el representante de quinto,

que se acerque al burro.

Los de quinto hemos traído una chaqueta, unos calzoncillos,

un pantalón, una camiseta de manga larga,

zapatillas.

Creemos que es esencial porque lo necesitamos todos los días.

Buena respuesta y pedazo de armario.

A ver, representante de sexto.

Los chicos y chicas de sexto hemos traído zapatillas

para no andar descalzos,

una camiseta y pantalones vaqueros para ir formales,

unos calcetines de andar por casa para ir calentitos

y unos calzoncillos para tener higiene.

Viendo este armario que hemos montado aquí,

¿se parece a los vuestros? ¿Tenéis más cosas?

(ALUMNO) Yo sí tengo cosas,

pero tengo lo esencial, la ropa que para mí sea bonita,

que me vaya a poner.

¿Y las cantidades?

¿Cuántas son esenciales?

Para tener ropa esencial necesitamos dos de cada tipo.

Así podemos variar un poquito.

No llevamos lo mismo cada día.

¿Tú tienes dos de cada tipo o más?

Tengo más.

¿Hay alguien que tenga dos de cada tipo?

Tenéis más, ¿no? A ver.

¿Quién nos cuenta cuánto tiene?

Tendré alrededor de diez camisetas, diez pantalones.

También porque mucha gente que conozco,

familia y amigos,

cuando les queda pequeño, me los van dando.

(ALUMNA) Sinceramente, tengo mucha ropa.

Pero sí me hace falta.

Por ejemplo, tengo 32 camisetas.

¡32 camisetas! Sí.

15 pantalones.

Zapatos, creo que cinco pares.

¿Te pones toda la ropa y zapatos?

Sí.

Como María, somos muchas más personas

quienes tenemos un armario con muchísima ropa,

más de la que necesitamos.

¿Por qué tenemos tantísima?

(SAMUEL) Por la moda,

cada temporada va cambiando,

compramos para ser mejor vistos en la sociedad.

¿Nos definimos con parte de nuestro armario?

(ALUMNA) Sí, son nuestros gustos y podemos elegir nuestros gustos

según nuestra ropa y poniéndonos lo que nos gusta.

(PAULA) Hay veces

que tú compras algo y te lo pones aunque no estés cómodo

y no te guste, te lo pones para que los demás

te vean guay y eso.

¿Creéis que nos obligan a comprar o a llevar ciertas cosas?

A veces uso ropa que me encanta, me siento muy cómoda

y la gente se burla de mí por cualquier cosa,

nos les gusta, es ridículo, lo que sea.

Y tengo que cambiar mi forma de ser para que los demás no se burlen.

Brenda, rara vez estamos a gusto con lo que tenemos.

Siempre queremos más cosas o diferentes.

¿Por qué?

Lo habéis contado muy bien entre todas y todos.

Hay una maquinaria de dinero que nos estimula a comprar cosas.

Hay mucho dinero destinado a que queramos consumir

a través de personajes famosos, de las redes sociales,

recibimos muchos estímulos al día de compra.

Las decisiones que tomamos de compra no son libres y conscientes,

son decisiones compulsivas, lo habéis dicho antes.

"Porque me valoren, me aprecien".

Ese sentido de pertenencia al grupo.

Hay muchas decisiones que son emocionales.

Tiene razón Brenda.

La ropa que compramos tiene coste directo en el bolsillo.

Además, repercute en nuestro entorno.

¿Cuánto le cuesta nuestro armario al medioambiente?

Lo vemos.

La moda rápida se produce, se vente y desecha a gran ritmo.

Acceder a prendas y moda nunca fue tan barato.

Hoy compramos seis veces más ropa

que la que compraban nuestros padres y la usamos menos tiempo.

Cada año se producen

más de 150 000 millones de prendas nuevas.

Una de cada tres nunca llega a venderse.

En lo que dura esta animación,

se lanzaron al mar 60 camiones de basura

llenos de residuos textiles.

Pensemos sobre la moda rápida y su impacto.

Vemos que por lo general tenemos muchísima más ropa

de la que necesitamos.

Y todavía se fabrican y consumimos más y más.

Os pongo una situación.

Es el cumpleaños de vuestra mejor amiga o amigo

y os queréis poner esa chaqueta

que tantísimo os gusta. ¿Pero qué pasa?

Que se rompe y no tenéis otra. ¿Qué hacéis?

¿Compráis una nueva o de segunda mano?

Yo compraría una de segunda mano porque te sale más barato

y así consigues ponértela una vez y devolverla.

(ALUMNO) Compraría ropa directamente de la tienda

porque si comprase de segunda mano,

es fácil que se vuelva a romper

y te acabas gastando el mismo dinero

comprándote dos de segunda mano porque la primera se ha roto

que una de calidad mejor.

(ALUMNO) Si compras de segunda mano, ayudas más al sistema

y si se rompe, la coses

sin que compres otra y ayudas más al calentamiento global

a que no suba.

¿Cuáles son las ventajas y desventajas

de comprar de primera mano y segunda mano?

La ventaja de primera mano es que te puede salir más rentable

porque te puede durar más.

Y la desventaja de primera mano

es que a veces gastas mucho dinero en la ropa.

-Algunas veces, aunque sea de primera mano,

también puede tener mala calidad y romperse muy fácil.

La ventaja de segunda mano es que viene más barata

y a lo mejor, si no te gusta ese precio,

puedes hablar con la persona y decir: "No quiero este precio, quiero otro".

Y la desventaja es que tiene peor calidad.

¿Cuántas y cuántos de vosotros utilizáis ropa de segunda mano?

(ALUMNA) Sí utilizo ropa de segunda mano

porque no solemos comprar mucha ropa porque al ser tres, sale muy cara.

¿Se rompe tan fácil como dicen tus compañeros?

No, no la utilizamos para tirarnos por una colina,

la utilizamos conscientemente.

(ALUMNA) He usado ropa de segunda mano

porque igual tengo una hermana y sale más caro.

Y la ropa de segunda mano tampoco se rompe tan fácil.

Depende de si está muy usada o poco usada.

(ALUMNA) Yo la mitad de mi armario la tengo comprada

y la otra de segunda mano porque tengo una prima

y se la pasa a mi hermana y mi hermana a mí.

Entonces, tenemos mitad comprada y mitad reutilizada.

¿Qué es mejor? ¿Comprar de segunda mano o heredar?

Es distinto porque tú puedes tener otros gustos diferentes

al de tu familiar o al que te haya dejado la ropa.

Entonces, puedes comprártela

y tú puedes comprártela a tu gusto.

Pero si te la dejan, a lo mejor no te gusta.

-Yo depende la ropa, algunas veces prefiero heredada

porque sé que la usó mi familia.

Sin embargo, las de segunda mano no sé quién la ha usado.

Chicas, chicos, también hablábamos antes

que no siempre hay que comprar.

Si la chaqueta se ha roto, se puede...

Se puede arreglar, coser. Os pongo un ejemplo primero.

A todos nos ha pasado que estábamos en el patio del colegio

y nos caemos

y se nos hace un agujero en el pantalón

que llegas a casa y tus padres te dicen:

"Mira, un parche para seguir, esa prenda todavía se utiliza".

¿Nos parece bien lo de arreglar prendas?

Yo antes lo cosía y me daba igual.

Pero ahora ya a veces no me da igual.

Pero normalmente, cuando me caigo, me dicen: "¿Le pongo un parche?"

Y sí, porque me gusta y quiero volver a utilizarlo.

A veces sí y a veces no.

¿Por qué creemos que nos gusta tanto estrenar ropa nueva?

Da la impresión de qué limpia está y lo bonita que es.

-Es una satisfacción de no siempre ponerte lo mismo

y por probar algo nuevo y mostrarle a tus amigos:

"Mira, ¿te gusta?" "Sí, me gusta".

Es lo que me gusta.

Causa como sensación.

¿Sentís algo diferente con ropa nueva?

Paula.

Te sientes bien porque te da gusto quitar la etiqueta

y huele bien, está todo limpio.

Sientes que estrenas algo que nadie se ha puesto

y tú eres la primera persona, preguntas a tus compañeros y amigos

qué tal te queda, si les gusta.

Te sientes bien.

¿Tan importante es lo que piensan los demás?

Yo no es por los halagos.

Que sí, si les gusta o no les gusta, vale.

Pero si no les gusta, a mí me da igual.

A mí me importa lo que yo piense.

Si a mí me gusta, me lo quiero poner.

Brenda, el "upcycling", la reutilización de prendas

y la moda "vintage" ha tenido un resurgir últimamente.

¿Es solo una moda

o una tendencia de consumo que se mantendrá?

"Upcycling", para quien no lo sepa, no es reutilizar,

eso que habéis dicho de reparar y rehacer una prenda,

que puede ser muy creativo e interesante.

Cogemos la chaqueta que nos mola

y hacerla mejor, o a la temporada pasada,

añadirle algo que nos guste mucho más.

Eso es una tendencia, puede ser una expresión de nuestra creatividad

e identidad, forma de expresarnos con el mundo.

Pero también lo hacen las grandes marcas.

Las grandes marcas aprovechan la reparación,

la reutilización,

lo que ocurre en la industria de la moda

es que hay sobreproducción. ¿Qué quiere decir?

Se producen muchas prendas,

accesorios, más de los que se pueden consumir.

Eso genera repercusiones en el medioambiente

y también en las personas que hacen esa ropa.

Brenda, ¿tú cómo compras la ropa?

Como vosotras y vosotros.

Hay cosas que tengo de primera mano, de segunda mano,

cosas heredadas, consumo como vosotras y vosotros.

Ya que nos dices de dónde salen estas prendas,

cuéntanos ahora, la camisa del principio.

No sé si sabéis qué es un intercambiador de ropa.

Igual habéis visto los de dejar juguetes en Navidad

que están bien, no utilizas, los aprovecha alguien.

Eso lo hacen con ropa.

Unas compañeras hicieron un intercambiador de ropa

y cada uno llevábamos tres prendas.

Esa camisa que veis ahí es de una de mis mejores amigas.

Yo no sabía que dio ropa

y cuando decidimos nosotras qué ropa escogíamos,

me llevé una de sus camisas favoritas,

que ahora es una de mis camisas favoritas.

Menuda historia la de la camisa.

Comprar de primera mano, de segunda mano, heredar,

arreglar o incluso alquilar,

tenemos muchas formas de hacernos con nuestras prendas.

Ahora queremos saber qué hacéis con esa ropa

que no utilizáis vosotras y vosotros.

Mi ropa cuando ya no me vale, me queda pequeña o no me gusta,

yo depende de la ropa y de los gustos,

se la doy a mi hermana pequeña o la dono.

-La ropa de mi hermano, cuando se le queda pequeña,

a lo mejor me la pasa a mí.

Si me gusta, me la quedo.

-En casa cuando la ropa no me vale,

lo que hacemos es pasársela a mis primos pequeños

o donarla en un contendor en frente de casa.

(Sintonía animada)

Seguimos hablando de ropa, sin lo que no podemos vivir.

Pero muchas veces no le damos importancia

y otras le damos más de la que realmente tiene.

Ahora queremos saber cuánto sabéis vosotros

de vuestra propia ropa.

Y lo sabremos con un juego que no pasa de moda.

"Verdadero o falso: Ropa".

Vamos a hacer dos equipos: el Equipo A...

(ANIMAN)

Y el Equipo B.

(ANIMAN)

Bueno, yo os daré unos datos sobre ropa

y tendréis que decir si son verdaderos

o si nos los hemos inventado por la cara.

¿Estáis listos?

(TODOS) Sí. Más fuerte.

(TODOS) ¡Sí!

¡Empezamos! Primera pregunta.

¿Verdadero o falso? ¡Tiempo!

(Cronómetro)

(Varias conversaciones)

(Bocina)

¡Tiempo!

¡Chan, chan, chan! A ver qué dicen los equipos.

A ver la respuesta del Equipo A.

Pensamos que es falso

porque hay personas que no reutilizan.

Pasamos al Equipo B.

Creemos que es falso también

porque hay ropa que se recicla, pero hay ropa que no se recicla.

Pues es un dato...

¡Falso!

(TODOS) ¡Bien!

Muy bien. Algunas prendas pueden reciclarse.

La mayoría se quema.

Otras van a vertederos y mucha termina en el mar.

La industria de la moda es de las más contaminantes.

Segunda pregunta.

¿Verdadero o falso? ¡Tiempo!

(Cronómetro)

(ALUMNO) Verdadero.

(ALUMNA) Son toneladas, no kilos.

(Bocina)

Hay consenso. ¡Tiempo!

Equipo A, su respuesta.

Creemos que es falso.

¿Eso por qué?

Porque creemos que por una persona es poco.

(ASIENTE) Vale.

Vemos la respuesta del Equipo B.

No creemos que es verdadero, pero nos equivocamos al ponerlo.

Al principio, pensamos que sí,

pero hemos visto que para una persona es mucho.

Entonces, nos hemos equivocado, creo.

La respuesta era...

(TODOS ANIMAN)

Verdadera. ¡Te lo he dicho!

¡Uy!

Es de media,

porque a lo mejor una persona gasta 0,

a lo mejor desecha 0, y otra, por ejemplo, desecha 20.

-Eso es verdad.

Bueno, chicos, es verdadero.

Aunque una pequeña parte se recicla,

se dona o se vende, la mayoría, el 87 %,

termina en vertederos o incinerada.

Pasamos a la tercera pregunta.

¿Verdadero o falso? ¡Tiempo!

(Cronómetro)

Esta sí la aciertan.

(ALUMNO) Verdadero.

(Bocina)

¡Tiempo!

Vamos a ver esas respuestas.

Equipo A.

Verdadero porque hay más dinero e industria

y más variedad de ropa.

Tenemos la respuesta del Equipo A. Pasamos a la del Equipo B.

Nosotros creemos que es verdadero porque ahora hay más variedad de ropa

y muchísimas más tiendas que antes.

Vamos a ver, es un dato...

¡Verdadero!

(TODOS) ¡Bien!

Cada vez compramos más.

Por supuesto, también tiramos más ropa,

con lo que eso implica para nuestro entorno.

Parece que hay dos preguntas que han acertado ambos equipos

y una que no ha acertado ninguno. ¿Cómo queda el juego?

(TODOS) ¡Empate!

Empate, dos a dos, muy bien.

Hemos visto que los residuos textiles

contaminan muchísimo.

Se siguen fabricando y seguimos comprando más

y tirando más ropa.

La pregunta es inevitable.

¿De quién son responsabilidad estos residuos?

¿Es cosa nuestra asegurarnos

de que la ropa no acaba en un vertedero?

Yo creo que sí porque es nuestra decisión

al tomar esa decisión

de "la tiro o la reutilizo

o la vuelvo a hacer de una forma que me guste

o que pueda volver a utilizarla".

(MARIO) Es culpa de las industrias

porque ellos obligan a los trabajadores

a hacer lo que creen que hay que hacer

y si dicen que los tiren a los vertederos,

es culpa de ellos.

-También podrían poner más contenedores o cubos

donde echas ropa que no quieres

y esa ropa, con ella, hacer más ropa que se pueda utilizar.

También podemos producir menos y consumir menos.

Y producir lo que realmente necesitamos

y consumir lo que necesitamos. Algún capricho,

no nos vamos a amargar.

¿Cómo podemos hacer circular la ropa?

¿Qué alternativas tenemos para deshacernos de ropa

que ya no utilizamos de forma sostenible?

Muchas alternativas ya las habéis planteado,

pasarla a gente que conoces, donarla.

Antes de reciclar, seguro que os han enseñado

que hay otras dos R, la de reutilizar y reparar.

Antes de eso,

lo importante es qué vamos a consumir,

si lo necesitamos, si no,

y comprar bien, como os dicen vuestros padres y madres

que compréis seguramente.

¿Quién nos ayudará para que la industria

sea más sostenible? Ellos.

Un árbol y una piña.

El "lyocell" es una fibra 100 % biodegradable

de la madera de eucaliptos.

Las prendas fabricadas con este producto

no absorben olores tan rápido como otros tejidos,

consiguiendo que no tengamos que lavarla a menudo.

Carmen Hinojosa, asturiana y diseñadora textil,

desarrolló a partir de fibras

de residuos de piñas un material llamado "piñatex",

que se usa como sustituto de cuero animal,

con el que se hacen zapatos y chaquetas.

Si las vacas dieran un premio, gana Carmen.

Gracias, Carmen.

Chicos, llegamos al final de nuestro debate.

Después de lo que hablamos, volvemos a estos burros de ropa.

¿Cómo los veis?

Después de lo dicho,

¿cambiaríais algo u os gusta como está?

Sinceramente, yo no cambiaría nada,

porque yo creo que podría añadir, claro,

con dos de cada cosa, no me daría.

Pero yo no cambiaría porque...

Es lo que siempre voy a utilizar.

El cambio que harías sería añadir más cosas.

Exacto.

-Yo tampoco cambiaría nada.

Dos cosas de cada tipo.

Añadiría un poco, pero no mucho tampoco.

¿Qué añadirías?

Una más de cada cosa.

-Yo añadiría lo suficiente para una semana

o para un poquito más, porque así repites,

pero no repites tanto la ropa.

Después de lo que hemos hablado,

¿vosotros iríais a vuestra casa ahora

y le diríais a vuestros padres:

"Con cuatro camisetas a mí me basta y con dos chaquetas también"? ¿O no?

(ALEJANDRO) Yo me quedaría cuatro, las que más me gustan.

-Yo me quedaría con la ropa que tengo ahora mismo

porque soy de esas personas que sale mucho a la calle

y se mancha mucho, soy muy torpe.

Y yo con cuatro camisas no doy.

Este armario no da ni para empezar a vestirnos, ¿no?

No te llegaría a una semana, estarías repitiendo todo.

(ALUMNO) Yo añadiría alguno más, sobre todo, calcetines,

solo hay un par,

como se te rompan o ensucien, ya no tienes calcetines.

Y los calcetines además huelen.

Por supuesto, toca preguntar de nuevo.

¿Podemos estar a la moda sin comprar?

(PAULA) Creo que sí, si tienes pantalones vaqueros

y la moda es llevar pantalones vaqueros rotos,

si quieres estar a la moda y no te los pones

y no te gustan, los puedes rajar un poco

y entonces ya...

También se puede comprar

en tiendas de segunda mano, ropa que ahora esté a la moda.

(SAMUEL) Yo creo también que sí, imagínate que hace unos años,

estaba a la moda las chaquetas que te quedaban grandes.

Imagínate que ha vuelto esa moda, podías preguntar a un primo, hermano,

que si tiene una cosa parecida a eso,

y te lo puede prestar y estar a la moda sin gastar dinero.

¿Qué es más importante?

¿Estar a la moda o tener estilo propio?

(MARIO) Yo creo que tener estilo propio,

porque la importancia que hace que vayas contento

con la ropa que tienes, es más importante que lo que opinen.

Es verdad, completamente.

Bueno, tras este debate,

llega la hora de preguntar a Brenda lo que queráis.

¿En qué consiste tu trabajo?

Trabajé en revistas femeninas,

conozco cómo pone esta industria cosas a la moda y cómo seduce.

Al final, me acabé yendo a la sostenibilidad

porque se podía hacer mejor.

Yo me dedico a buscar esa información

de lo que hay detrás de lo que consumimos.

Las prendas de las grandes marcas

que pasan de moda, ¿qué se hace con ellas?

Lo ha contado bien Ana.

Hay una parte que se reutiliza,

pero gran parte acaba en el vertedero.

Una prenda que tiramos al vertedero

es más contaminante que una fruta o verdura que tiramos.

¿Tú crees que es más contaminante la ropa sintética

o la ropa con residuos naturales?

Con residuos de origen natural, quieres decir.

Mira, la ropa sintética son derivados del petróleo.

La ropa que lleváis de poliéster

es el mismo material en botellas de plástico, es PET.

También mucho del algodón o tejidos que utilizamos

que vienen de agricultura industrial,

tienen muchos pesticidas.

Lo que sería más sostenible o menos contaminante

serían esos tejidos, lo más naturales posible,

pero que no tengan todos esos aditivos añadidos.

Lo más importante de todo esto es que compremos poco y bien.

Llegamos al final.

¿Qué recoges de lo que se ha hablado?

Recojo muchas cosas.

Recojo que sois mucho más responsables

que muchos adultos que conozco.

Sabéis cuidar vuestra ropa, repararla,

lo que es la segunda mano,

tenéis en el armario lo que necesitáis

y alguna cosa de caprichín.

Pero os veo muy responsables y muy conscientes

de la ropa y el consumo.

Estoy muy orgullosa

de compartir esta mañana con vosotros.

Muchas gracias, Brenda, y gracias, chicos,

por acogernos en vuestro centro y responder a la pregunta:

¿podemos estar a la moda sin comprar?

Nos vamos, nos vemos en el próximo programa

de "Aprendemos en clan: El debate". Adiós.

¡Ya hemos terminado!

¡Vamos!

No me fijo en la ropa que tengan mis amigos ni amigas,

da igual qué lleven.

-No me importa la ropa que lleven ni que se fijen en mí.

-Sí me fijo en la ropa de mis amigas y amigos

porque me suele gustar.

Y no me importa que se fijen en la mía.