(Estruendos)

(Sintonía)

Hola, claners.

Hoy vamos a hablar de un tema muy interesante.

-James, James, James. -Nacho Mapacho, ¿qué pasa?

-Tengo una supernoticia.

-No me digas que te has aprendido de memoria las tablas de multipicar.

-No, hombre, no, es mucho mejor que eso.

-¿Mejor que aprenderse las tablas? -Sí.

Tengo entradas para un escape room.

-Oye, eso suena muy bien.

-Sí, me las ha regalado mi abuela.

-(RÍE) ¿Tu abuela hace "escape rooms"?

-Sí, todas las semanas.

Pero para esta tenía cita con el veterinario

para desparasitarse.

-No me digas que te pegó alguna pulga.

Nacho, que me está empezando a picar todo.

-Iba a ir con mi primo Juan Mapacho,

pero dice que los acertijos le dan dolor de cabeza.

-¿Te quieres venir? -Claro.

Me encanta poner a prueba mi inteligencia.

-Muy bien. Pero no te agobies

si soy mejor que tú en todas las pruebas. ¿Vale?

-No te hagas ilusiones,

que los "escape rooms" lo ponen todo muy difícil.

-Bueno, pero yo he nacido para escapar,

soy un mapache.

No hay quien me pille la cola.

-(RÍE) -Venga, pues vamos.

Y mientras, os dejamos con Orilo y Arlequina

que os enseñarán a hacer un escape room en vuestra casa.

Vamos, Arlequina, rápido,

tenemos que acabar nuestro escape room,

ya nos debe quedar muy poco tiempo.

-Muy poco tiempo, Orilo, y solo nos queda la última prueba.

Ya hemos pasado el puente levadizo, el túnel de los ratones...

Ahora nos queda averiguar la combinación que abre el candado

para poder liberar tu bocata.

-Vamos, Arlequina, que es la hora del almuerzo,

-estoy muerto de hambre. -Sí.

Tenemos tres números en el candado y para ello tenemos tres pistas.

Comienza con la primera, Orilo.

-Esto es una especie de rompecabezas y hay que irlo moviendo

para encontrar el número.

-¿Y cuál es? -Perfecto.

Yo lo voy moviendo, tú ve haciendo ese de ahí.

-La segunda pista. Es un puzle.

Tengo que completar el puzle para saber cuál es

el segundo número.

-A ver... -Ah...

-Pero... -Mira, Arlequina,

pone "Five", o sea, cinco.

-Y aquí tenemos un dos bien claro.

Así que nuestros primeros números son: 5, venga, y 2.

-Y la tercera pista, ¿cuál es? -Aquí la tengo.

-¿Qué pasa?

-Que es una adivinanza. Y soy malísimo con ellas.

-No, léela en alto,

que seguro que entre todos y todas la resolvemos.

-Vale, ayudadnos, eh.

¿Cuántos colores tiene el arcoíris?

A ver, ayudadme, ¿cuántos tiene?

Efectivamente, son siete colores.

Entonces, si pongo aquí el siete...

-¡Toma! Se abre el candado. -¡Sí!

-Y se libera tu bocata.

-¡Sí! -¡Sí!

-Maravilloso, Orilo. -Qué bien.

-Ay, ay... -Tin, tin...

-Oye, Orilo, ¿te parece...

si construimos nuestra propia escape room?

-Arlequina, creo que ya tenemos reto.

Lo primero que tenemos que hacer es decidir

cuál va a ser el premio de nuestra escape room.

-Mira, Orilo, aquí tengo unos helados de postre.

Los metemos en un lugar que podamos cerrar bien,

en este caso, lo vamos a cerrar con un candado de tres cifras. Tres.

-Pues para cada una de las cifras, podemos crear una pista.

Una puede resolverse siendo un dibujo,

otra, un reto matemático

y la tercera, una adivinanza, por ejemplo.

Y ahora escondemos esas tres pistas.

-Las podemos esconder por el laboratorio.

En distintos lugares.

O, si queréis, las podéis esconder en vuestra habitación,

es un buen lugar o incluso en la cocina.

Ya están escondidas.

Es muy importante explicarle a la gente

que viene a hacer tu escape room cuál es el premio

y donde pueden encontrar las pistas.

Mira, Orilo, me estoy disfrazando de ladrona de helados

y voy a hacer un vídeo explicando cómo resolver la escape room. Venga.

Puedes guardar el vídeo en un pendrive

y esconder ese pendrive en una botella

y colgar esa botella, por ejemplo, en el baño.

En la ducha del baño.

Y entonces tu escape room puede empezar

dándole a las personas que lo vayan a hacer

un panfleto sobre la higiene

para que deduzcan que tienen que ir al baño

a encontrar la primera pista.

-Y tenemos que poner un tiempo máximo,

aquí está claro, no más de cinco minutos

para resolver la escape room

porque si no, se nos deshacen los helados.

-¿Que se deshacen los helados? No podemos permitir eso.

Arlequina, ¿dónde está la primera pista?

-¿Por dónde empieza el escape room? -Por aquí, Orilo,

-si me lo acabas de dar tú. -¿Un panfleto de higiene?

Eso significa que hay que ir al baño.

Arlequina, rápido, que la primera pista...

-Pero, Orilo, lo has hecho tú. -Se deshacen los helados.

Recordad hacer vuestra escape room.

Nosotros nos vemos en nuestra próxima aventura.

-Venga...

(Música)

-"Concursantes" -Hey.

-Pero ¿quién habla? -"Soy la 'game master'.

Para salir del escape room necesitáis la llave de la caja,

pero para abrirla,

antes debéis averiguar la contraseña".

-Quizá la contraseña está en esa pared.

-Hay números y letras, James.

-Claro, porque quizá una letra corresponde a un número concreto.

-¿De qué mapachos hablas?

-Imagínate que la A es el 1 y la B es el 2.

-Entonces la C es el 3. -Exacto. Y la E sería...

-El... 5. -Muy bien, voy a probar.

¡Lo hemos conseguido!

Aquí está la llave, hemos pasado la primera prueba

-Se suponía que debía adivinarlo yo solo.

Soy un maestro del escape.

-Bueno, Nacho, pero este es un juego colaborativo.

¿Qué te parece si vemos una clase de matemáticas

sobre acertijos?

(Música misteriosa)

Hola, matemaníacos y matemaníacas.

Hoy tengo una misión. Mirad lo que me he encontrado.

Me he encontrado esta bomba matemática.

Y veo que hay una tarjeta aquí, a ver qué dice.

La tarjeta dice:

"Esta bomba de mil kilotones de megatones

explotará en tres minutos". Tres minutos. Dice:

"A no ser que des con la clave que abre la caja

con las instrucciones para desactivarla".

La caja tiene que ser esta que tengo aquí.

Y tengo tres minutos,

así que lo más importante es mantener la calma.

Vamos a coger la bomba con cuidado, que tenemos tres minutos

y no quiero que estalle antes. Vale.

Vamos a ver qué dicen las instrucciones.

Continúan y dicen así,

parece que es un acertijo matemático.

"Si tengo seis años yo ahora y mi hermano tiene la mitad,

cuanto yo tenga 70 años, qué edad va a tener mi hermano?".

A ver, nos da varias opciones.

A ver, a ver...

Yo creo que son, sí, ya lo tengo, yo creo que son 67 años.

Claro que sí.

No habrán pensado 35, ¿no?

Que tenga la mitad no quiere decir que sean 35.

¿Por qué? Porque tiene la mitad ahora,

es decir, si yo tengo seis años, la mitad son tres.

¿Pero cuántos años nos llevamos? Nos llevamos tres años.

Así, cuando yo tenga 70, nos seguiremos llevando 3 años.

Por eso tiene 67 años.

Así que vamos allá, que tengo la primera clave.

Sería 067 porque son tres dígitos, así que voy a poner por aquí el 067.

Estupendo. Vamos, tranquilidad,

lo más importante, mantener la calma porque veo que hay otra caja.

Ay, ay, Hay otra caja.

Vamos a ver qué dicen las siguientes instrucciones.

Dice: "Si diez kilos de manzanas cuestan 10 euros,

¿cuánto cuestan cinco kilos de manzanas?

Ay, las manzanas.

Diez kilos de manzanas, diez euros, entonces ¿cuánto cuesta un kilo?

Si diez kilos son diez euros un kilo cuesta un euro.

Vale, si un kilo cuesta un euro, ¿cinco kilos?

Cinco euros. Vale, venga, cinco.

Pues si son tres dígitos, sería 005. Vale.

005. Vamos allá, a mantener la calma.

Ay, hay otra tarjeta, otra tarjeta, no puede ser.

Venga, que creo que esta es la última.

La última, dice:

"¿Cuánto es...?"

Qué número tan largo.

Uf. Son números muy largos, a restar ahora...

A ver, vamos a colocarlos. Los coloco y si los coloco,

veo que se llevan muy poco, ¿cuánto se llevan?

Pues claro, solo se llevan 2.

Pues si lo resto, el resultado es 2.

Genial. Pues sería 002, vamos a ponerlo por aquí.

0-0-2.

Ay, ya está, ya está. Ay.

Que tengo unos alicates, así que vamos a ver

para qué sirven.

Vamos a abrir esta bomba matemática,

bomba matemática...

Uy, si hay un cable rojo.

Si solo hay un cable y me dan unos alicates

entiendo que lo que tengo que hacer será cortar el cable

para desactivarla.

Vamos allá, matemaníacos y matemaníacas.

Vamos, vamos...

Parece que cuesta un poco cortarlo

y es una bomba de mil kilotones y mil megatones,

una barbaridad. Ay, ay...

¡Bien! Lo he conseguido, cable cortado,

la bomba está desactivada.

Hemos conseguido la misión, matemaníacos y matemaníacas.

Hasta la próxima.

"Jugadores, la siguiente prueba consiste en atravesar la habitación

sin tocar la basura.

Cuanto menos la toquéis, más puntos ganaréis".

¿Pero qué dice esta señora?

No puedo pasar por delante de basura sin revolcarme en ella.

-Cálmate, Nacho, debemos hacerle caso al "game master".

-Pero esa basura está diciendo: "Cómeme".

-Nacho, si te comes la basura perderemos los puntos

y no podremos salir. Debemos esquivarla.

-Pero ¿cómo puedo no comer basura?

Eso es peor castigo que estar un mes sin mapachoconsola.

-Tendrás que hacer un esfuerzo.

-Ay, es superior a mis fuerzas, James.

Ayúdame.

-Venga, Nacho, concéntrate, tienes que esquivar la basura.

-Ay. ¿Y cómo vamos a esquivar los obstáculos?

-Eso es muy fácil. Álex nos enseña cómo esquivar obstáculos.

(Música videojuegos)

"Bien hecho.

"Superado nivel 1 de lleva el huevo a tu mamá".

Hola, campeones.

Escapar no siempre consiste en salir corriendo

o hacer una buena finta.

A veces hay que sortear obstáculos con precisión,

equilibrio, paciencia y control mental.

Llevando incluso, a veces, un objeto delicado.

Como un huevo.

¿Quieres aprender cómo hacerlo?

Pues vamos allá.

Lo primero es la precisión.

Voy a pasar entre dos cintas sin tocar ninguna de las dos.

Y para ello es muy importante la precisión.

Lo mejor es hacerlo despacio.

Primero voy a bajar el culo

a una altura adecuada con respecto al obstáculo.

Una posición estable y cómoda.

Después voy a pasar una pierna entre las dos cintas.

¿Sabes qué animal es muy bueno haciendo esto?

Los gatos.

Porque los bigotes le sirven para medir las rendijas

o agujeros entre los que pasar.

Sí, sí, yo creo que entro.

Primero pasamos la pierna,

después vamos a pasar los brazos y la cabeza.

Y terminamos pasando la otra pierna.

El equilibrio también es muy importante.

Ahora vamos a intentar mantenernos sobre un pie

mientras nos agarramos el otro.

Para ello necesitamos coordinación y una tripa bien firme.

No es nada fácil.

Vamos, sin titubeos.

(Redoble)

Fantástico. Ahora vamos con la otra pierna.

A mí siempre me cuesta un poco más con la pierna izquierda.

A ver si lo consigo.

Respiro...

Respiro...

Conseguido.

¿Y tú qué tal?

Pues ya estamos listos para el siguiente nivel.

Para escapar con equilibrios es muy importante

la estrategia, cómo lo vas a hacer.

Es fundamental tener paciencia y no saltar enseguida a la acción.

El control mental nos sirve para pensar antes de hacer.

Como cuando resuelves un problema.

Calculas primero los pasos y cómo lo vas a hacer.

Déjame que piense.

Primero voy a hacer así, luego asá,

después, retrueque y final con pirueta.

Venga, vamos allá.

¿Me sigues aunque no tengas cintas para esquivar?

Vamos a por ello.

Primero así, poco a poco.

Luego asá, controla el cuerpo y el equilibrio.

Ahora el retrueque.

Este es difícil. Vamos allá.

Por los pelos.

Y para terminar, el final con pirueta.

¿Lo conseguiré?

Sí. Perfecto.

"Bien hecho".

"Superado nivel 2 de lleva el huevo a tu mamá".

Vamos, somos los mejores.

Ya hemos terminado. Recuerda trabajar:

"Preparado para el nivel 3".

(Música videojuegos)

"Ahora, con pelotas".

Madre mía, vaya lío.

Hasta pronto.

(Música)

"Jugadores, para salir de este escape room

debéis resolver el siguiente acertijo".

"¿Cuántos gatos hay en la casa sabiendo

que todos son persas menos dos,

todos son siameses menos dos

y todos son pelados menos dos?".

No es justo, James. Yo de gatos no sé nada.

Si el acertijo fuera sobre mapaches sabría la respuesta.

-Nacho, pero el acertijo va de gatos

porque esta sala es de temática egipcia.

Y a los egipcios les encantaban los gatos.

-Pues no lo entiendo, la verdad. Los gatos no son tan especiales.

-Pues los egipcios pensaban

que los gatos eran animales sagrados, casi dioses.

-A ver cuándo hacen a los mapaches dioses.

Y nos dan regalos y ofrendas a todas horas.

-Ahora tenemos que concentrarnos en resolver el enigma,

que casi no tenemos tiempo.

-Vale, pienso, si ya casi lo tengo.

-A ver... Uy, creo que tengo la respuesta.

-El número de gatos es tres. -Tres, tres.

Lo he dicho yo primero. Tres gatos.

"La respuesta es correcta. Podéis salir".

(CANTURREA)

Yo lo sabía y tú no.

-Pero, Nacho, te dije que el escape room es

un juego colaborativo, tenemos que ayudarnos entre los dos.

Bueno, vamos a ver un vídeo sobre el antiguo Egipto.

Hola, niños y niñas. ¿Qué tal estáis?

¿Os gusta la arqueología?

A mí me encantaría participar en una excavación.

Y así conocer cosas del pasado.

Sobre todo del antiguo Egipto.

¿Sabéis que los egipcios momificaban a sus faraones y a sus gatos?

-(GATA MAÚLLA) -Tranquila, Valentina,

ya no lo hacen.

Lo hacían porque les consideraban animales sagrados.

Se me ocurre que podemos organizar una expedición

para encontrar algún antepasado tuyo muy muy antiguo, Valentina.

¿Os animáis a venir con nosotras?

¿Cómo nos organizamos? La planificación es muy importante.

Primero tenemos que documentarnos,

buscar información sobre lo que vamos a hacer.

Así sabremos muchísimo.

Toda esa información la tendremos que organizar

por objetivos y estos, a su vez, por orden de importancia.

Para todo esto nos podemos ayudar de apuntes, pizarras,

fotos o dibujos, anotando todo en un cuaderno.

Ahora toca el trabajo de campo. Ir a la excavación.

Allí encontraremos nuestros hallazgos y no debemos olvidar

hacer un buen resumen de todo lo que encontremos.

Seguro que así nuestra expedición será todo un éxito.

Bueno, ¿qué? ¿Nos vamos ya a Egipto?

(RESOPLA)

Qué calor hace en Egipto.

Ya he llegado a la zona de la excavación.

¿Habéis visto?

Ya mis compañeros han trazado la cuadrícula

para que tengamos todos nuestros hallazgos perfectamente ubicados.

Voy a empezar.

La técnica es desenterrar por capas, con mucho cuidado, sin prisa,

estos restos llevan aquí miles de años.

Hay que ser muy delicado.

Voy a empezar por el cuadrante A.

Parece...

Eso es un hueso fosilizado. Es un gran hallazgo.

Llamaré al equipo especializado para que determine su antigüedad.

Voy a dejarlo ahí y continúo en el cuadrante Z.

Parece que he hallado algo.

Es un cofre, sí, parece egipcio.

Voy a intentar abrirlo.

(SE SORPRENDE)

Con mucho cuidado, hay un pergamino dentro.

Vamos a ver.

¿Qué pone aquí?

"Vida eterna para los felinos".

Ya han pasado varias semanas y, por fin,

el experto en jeroglíficos me ha confirmado que esto

significa "paso a la vida eterna".

Y que contiene información para localizar el sarcófago

del antepasado de Valentina, de Nilo.

Hemos seguido trabajando y por fin lo hemos encontrado.

El sarcófago contenía la momia de Nilo, mirad.

¿Habéis visto qué bien conservada?

Se hará famosa, es un gran hallazgo para la historia.

La llevarán a un museo y todo el mundo querrá conocerla.

¿Habéis visto? Planificar es muy importante.

No solo en una excavación sino para cualquier proyecto

que nos propongamos hacer.

Nos va a ahorrar tiempo

y a saber reaccionar rápidamente en caso de un imprevisto.

-(VALENTINA MAÚLLA) -Sí, sí, Valentina,

es que estamos preparando la momia de Nilo

para enviarla al museo donde va a ser expuesta.

-(VALENTINA MAÚLLA) -Ya sé que es

tu tataratataraabuelo.

Venga, nos vemos pronto.

"Jugadores, ahora debéis completar un puzle de palabras.

Tenéis piezas con sustantivos y piezas con artículos.

Juntadlas y escaparéis".

Qué voz más pesada.

-Nacho, no le digas esto al "game master".

-Jo, es que solo pone pruebas que no sé resolver.

-Pero si ni siquiera lo has intentado.

-Yo quiero volver a la habitación de la basurita

y quiero comer, merendar y cenar basura.

-Pero, Nacho, si ya nos hemos escapado de allí.

Ahora toca concentrarnos en el puzle.

-Ay, yo quiero juntar basura, no juntar palabras.

-Es más fácil de lo que parece.

Vamos a ver un vídeo y luego seguro que te parece divertido.

Hola, superlingüistas.

Estoy investigando el caso del falsificador de monedas.

¿Me ayudas?

Para ser un buen investigador

hay que controlar perfectamente los artículos.

Los artículos acompañan a los sustantivos

y concuerdan con él en género y número.

Hay dos tipos de artículos,

se utilizan los artículos determinados.

Mirad, por ejemplo. A ver...

¿Dónde estaba la lupa?

Bastián, ¿puedes traerme la lupa?

¿Dónde estará este hombre?

Hombre, Bastián, avisa.

Gracias.

Aquí tengo la lupa.

He utilizado el artículo determinado "la"

porque Bastián sabía a qué lupa me refería.

Es mi lupa favorita.

Pero otras veces utilizo otro tipo de artículo.

Cuando Bastián o quien escucha

utilizo los artículos indeterminados.

Por ejemplo, Bastián, dame un pañuelo.

-Señorito, aquí tiene su pañuelito.

-Gracias, Bastián.

Bueno, en este caso he utilizado el artículo indeterminado "un"

porque me daba exactamente igual el pañuelo que me diera.

Si hubiese querido un pañuelo concreto,

hubiese dicho: "Bastián, dame el pañuelo".

Así hubiese cogido un artículo determinado.

Bueno, sabéis la diferencia entre los dos, ¿no?

Entre los determinados y los indeterminados, ¿verdad?

¡Genial!

Para ser un buen investigador

también hay que prestar mucha atención

al género y al número de los artículos.

Si son masculinos o femeninos o singular y plural.

En el caso de los artículos indeterminados

"un", "uno", "una" y "unas".

Por ejemplo, aquí tengo muchas fotos.

Exacto.

Tendría que decir: "Aquí tengo unas fotos".

Femenino y plural.

Porque si no utilizo bien el género y el número

quedaría un poquito raro.

Porque ¿cómo te suena si digo: "Aquí tengo una fotos"?

O: "Aquí tengo unos fotos".

¿A que es muy raro?

Con los artículos determinados pasa lo mismo.

Pueden ser:

Y siempre concuerdan en género y número con el sustantivo.

Necesito mi lápiz encuentra pistas. Se lo pediré a Bastián.

Bastián, Bastián.

¿Puedes traerme las lápices encuentrapistas?

No viene, no se habrá enterado.

Claro, es que no lo he dicho bien.

Bastián,

¿puedes traerme el lápiz encuentrapistas?

Muchas gracias, Bastián. Ahora sí que se ha enterado.

Creo que he encontrado una pista.

Bastián, Bastián.

-"Qué pesado está hoy". -Vamos, Bastián.

Dame una moneda.

Lo que me temía.

-¿Puedo retirarme, señor? -Un momento.

Esta no es una pista cualquiera es la pista definitiva.

¡Bastián!

¡Tú eres el falsificador!

Hasta luego, niños, que voy a ver si lo cojo.

Ah, no, que es por allí.

"Participantes,

la última prueba consiste en lograr que Nacho

salga voluntariamente de esta habitación".

Lo siento, pero yo no voy a salir de aquí.

-¿Cómo que no quieres salir? Estamos a punto de ganar el juego.

¿Te vas a rendir ahora?

-Yo nunca me rindo, James, pero quiero quedarme a vivir aquí.

Esto es el universo de las sandías.

-Venga, cuando salgamos vamos al súper

y te compro la sandía más grande que veas.

-No quiero, aquí hay muchas más.

"Jugadores,

este es escape room se autodestruirá en diez segundos".

-"Nueve...". -Se va a autodestruir en...

-Un universo de las sandías. -"Siete...".

-Y con nosotros dentro.

-Ay, soy demasiado joven para desaparecer.

-Y aún no hemos presentado las noticias, corre.

-Ay... -"Tres...".

Mapachis.

-Adiós, universo de las sandías. -"Dos, uno".

(Música noticiero)

Bienvenidos y bienvenidas a "Está mapachando".

El noticiero mapache que da las noticias

"pache lo que pache".

Hola, James.

-Hola, Nacho. Hoy tenemos dos noticias alucinantes.

Comenzamos con la primera. Los escape rooms virtuales.

"En los últimos tiempos,

se están poniendo muy de moda este tipo de escapes rooms.

Una forma de vivir la experiencia de resolver enigmas y rompecabezas,

pero sin salir de casa.

Uno de sus principales representantes en nuestro país

es escapingpumio,

una web catalana que ofrece partidas a través de internet,

tanto a grupos de amigos como a empresas

que quieren organizar un evento entres sus empleados".

Estas partidas se pueden celebrar a través del ordenador

o con gafas de realidad virtual.

-Yo prefiero los escape rooms reales.

Son mucho más emocionantes

y las sandías también las prefiero reales,

llenan mucho más la panza.

-Ahora descubrimos nuevos usos para los escape rooms.

"Aunque parezca increíble,

algunas empresas están empleando escape rooms

para seleccionar a su personal.

Gracias a sus juegos de ingenio,

pueden decidir si las personas que entrevistan

son suficientemente inteligentes.

En la enseñanza también se usan.

La Universidad Autónoma de Barcelona organizó recientemente

un escape room para aumentar la motivación

y mejorar el aprendizaje de varias asignaturas

de Ingeniería Informática".

Claners, vosotros no os preocupéis

porque vais a triunfar en todos los escape rooms.

-¿Y eso por qué?

-Porque he entrevistado a alguien que conoce todos sus secretos.

Dentro vídeo.

Hola. Hoy estoy supercontento

porque tenemos nada más y nada menos que a una llave de escape room.

-Espero que esto no dure mucho,

tengo que encerrar a tres grupos de niños antes de comer.

-Solo será un minuto, ¿tanto trabajo tienes?

-Es un no parar. Cuando no estoy abriendo, estoy cerrando.

-¿Y no te cansas?

-Sí, pero cuando termino

el "game master" me limpia con un trapito.

Es tan relajante.

Sobre todo, cuando me frota los dientes.

-¿Eh? ¿Las llaves tenéis dientes?

-Ajá. La parte que tengo en forma de sierra son los dientes.

Pero tranquilo, que no muerdo.

-Oye, ¿y qué tal los jugadores? ¿Alguna vez hacen trampas?

-Muchas veces.

Intentan abrir con la tarjeta de crédito,

tirar la puerta abajo a empujones.

-Vaya, qué fuerte.

-Por eso quiero cambiar de profesión,

estoy estudiando para ser llave maestra.

-Oye, ¿y qué tal te llevas con los llaveros?

-Muy bien. El llavero es un gran invento

que permite a los humanos perder todas las llaves al mismo tiempo.

-(RÍE) Oye, ¿y sabes inglés?

-¿Eso qué tiene que ver con lo que estamos hablando?

-James siempre dice que el inglés abre muchas puertas...

-Ja. Qué buen chiste.

-Oye, pues me sé más.

¿Qué le dice una llave a otra llave?

-"Ya ves tú". -Jajá. Qué gracia.

A ver si quedamos otro día y te presento a mi novio,

que le encantan los chistes.

Es un candado, encajamos muy bien.

-Mapachachi, pues vamos hablando.

Bueno, claners, espero que hayáis aprendido

que el trabajo en equipo puede abriros muchas puertas.

Hasta pronto.

(Sintonía)