Subtitulado por TVE.

-¿Estáis listos, chicos? (NIÑOS) ¡Sí, capitán!

-¡Más fuerte! (NIÑOS) ¡Sí, capitán!

-¡Uuuuu!

Él vive en la piña, debajo del mar.

(NIÑOS) ¡Bob Esponja!

Su cuerpo amarillo absorbe sin más.

(NIÑOS) ¡Bob Esponja!

El mejor amigo que puedes tener. (NIÑOS) ¡Bob Esponja!

Igual que los peces, él puede flotar.

(NIÑOS) ¡Bob Esponja! -¿Listos?

(TODOS) ¡Bob Esponja, Bob Esponja, Bob Esponja!

Bob Esponja ya llegó...

(TOCA LA FLAUTA)

LA GRAN HERMANA SAM

(RONCA)

(MAÚLLA)

(PATRICIO CANTA)

Limpio mi casita...

La estoy dejando como los chorros del oro.

La, la, la, la, la...

Eh, amigo, ¿para qué estás limpiando?

Porque estoy esperando una supervisita muy importante.

¿Quién es? Mi hermana mayor, Sam.

Vaya, no sabía que tuvieses una hermana.

Nadie lo sabe,

la perdí en el oleaje cuando éramos niños.

Hombre, lo siento, Patricio.

Sam cuidó de mí cuando me encontró

comiendo coral,

fue mi...

Mi... mi...

(LLORA) Roca.

No pasa nada,

hoy mismo la podrás ver,

será hoy.

Vamos, amiguito, anímate, me aseguraré

de que su visita sea

extra super especial pase lo que pase.

Gracias,

tienes razón, estoy deseando compensar nuestros años perdidos.

¿Podríais hablar más bajito?

Perdón, estaba arreglando la casa para mi hermana.

Espero que no sea tan insoportable como tú.

¡Sam!

-¿Eh?

Gordinflón.

Hermana. (RÍE) Ja, ja, ja...

Oh...

Me alegro de verte.

-Tu hermana Sam tener muchas cosas que contarte.

Ay...

Ya no me acordaba de tu saludo.

Oh.

Sam, te presento a mi mejor amigo, Bob Esponja.

Sí, nuestra amistad se remonta a muchos años.

(RÍEN) Ja, ja, ja... Sí, muchos años.

-¡Cuadrado amarillo tocar a gordinflón!

Enfadar a hermana Sam.

He limpiado mi roca para ti.

¡Ah...!

Entremos a jugar.

Ay... -Ser muy pequeña, agrandar.

Buena idea, voy a por las herramientas y...

-No. Hombre.

-Las tengo todas aquí.

Uh, uh, uh...

Por Neptuno, ¿es que no me habéis oído?

Gracias, bonita.

-A Sam gustar hacer roca para hermano gordinflón.

Pues haz roca en otro sitio, mi casa está llena de arena.

-Sí, narizotas no gustar Sam,

¡Narizotas mudarse! Uh...

Estás invadiendo mi propiedad, oye, Patricio,

esta patana es mejor como escavadota que como hermana.

(RÍE) Ja, ja, ja, ja...

Qué humor tengo.

-Oh... ¡No reír!

No te enfades con Calamardo, no quiso decirlo.

Claro que quise decirlo, es una payasa como Patricio,

pero mayor y más tonta, y una payasa.

(GRUÑE)

Oh, Calamardo, qué guasón.

(RESPIRA DE FORMA AGITADA)

¿No la ves un poquito enfadada?

-Oh...

(SOLLOZA)

(LLORA)

Chicos ser malos,

meterse con hermana Sam.

(LLORA)

Me avergonzáis,

mirad lo que habéis hecho. ¿Lo que hemos hecho nosotros?

(LLORA)

Oh. Oh...

(AMBOS GRITAN) ¡Ah...!

-Madre mía, Grinch, qué tiro más bueno.

-No fui yo, Tucker, apuesto a que fue la pequeña de ahí abajo.

Oh... hermanita,

no escuches a esos seres.

Oye, la nueva roca parece un poco...

aburrida,

¿qué tal si la decoramos?

-¿"Blecorar"?

Llámalo como quieras, hermana, siempre que quede bien bonita.

Eh... oh...

-Hacer nueva casa bonita.

(RÍE) Je, je, je... bonita...

Eh, no hagas eso, es mi ventana.

(RÍE) -Ja, ja, ja...

"Blecorar".

Esa es la actitud, hermana.

No, esa no es la actitud en absoluto, Patricio,

tu hermana está descontrolada.

¡Oye! Ocúpate de tus asuntos y déjanos "blecorar" en paz.

Por mí como si "bledecoráis" hasta que las vacas

de mar vuelen,

pero no uséis las cosas de mi casa.

-Más bonita, sí... (RÍE)

Pero eso es de...

¡Mi casa!

Pero ya no aguanto más a esta ladrona patosa.

¿Cómo te atreves a llamar ladrona a mi hermana

sólo porque se llevo unas cosas tuyas? Hombre.

Tranquilos, caballeros, no perdamos la cabeza,

Patricio, ¿no te parece una pizca injusto

que tu hermana Sam haya desmantelado la casa de Calamardo?

Pues... eh... no,

ni un pizca así de pequeña,

mejor así, o así...

Veo que te has vuelto contra mi hermana,

pues también te has vuelto contra mí.

No es eso, Patricio, es que...

(LLORA) -A callar.

Niños malos hacer salir agua de ojos de gordinflón,

¡Niños malos fuera...!

Ah...

Vamos, hermana, bajo nuestra roca no nos molestarán.

-Oh... Malos, ser malos.

(GRUÑE)

Oh...

Calamardo, ¡oh! Espera, Calamardo, espera,

antes de que te precipites, deja que hable con ellos.

Se acabó el tiempo de hablar,

ha llegado el momento de la acción.

Una roca de arena hecha por dos hermanos,

no es rival para la dureza de esta piedra.

¡Viva los Mares del Sur!

No deberías hacerlo.

¿A quién le importa eso?

Si quieren destrucción, tendrán destrucción.

-¿Quién hacer ruido?

¡Oh...!

Linda casa rota.

¡Hermana enfadada!

Para haberme matado.

Sam, no es lo que parece, Calamardo la arreglaba

para que quedase más mona.

(GRITA) -Ah...

Hermana hacer su casa más linda también.

No, por favor.

-Oh... Hum...

Calamardo, si miramos el lado bueno,

esto te motivará para hacer esa obra en la cocina,

¿verdad, Calamardo?

Debe de estar empezando.

(RÍE) Je, je, je...

(AMBOS) ¿Eh? Eh...

Oh, Calamardo, Calamardo, para.

Cálmate, amigo, vamos a relajar ese tentáculo del acelerador.

¿Te refieres a esto, bonito?

Ay...

(RÍE) Je, je, je... Dulce pájaro de destrucción.

-Oh...

Uh...

Eso le enseñará a los malos.

Sigues siendo mi roca, hermana mayor.

Eh, Patricio, creo que el genio de tu hermana está descontrolado.

-Bob Esponja, ¿por qué dices cosas feas de Sam?

En un ataque de rabia destruyó mi casa,

tiene que controlas su genio.

A veces se entusiasma demasiado la pobrecita.

-¿Qué hacer, Patricio?

¿Por qué hablar con los malos?

Bueno, eh... eh...

es sobre tu mal genio, Sam.

-No tener mal genio,

eso... eso enfadar a la hermana Sam.

Ah... Hermana Sam poner mala cara...

¡Ah...! Ahora destrozar casa de gordinflón.

La roca no...

-Ah...

Uh... ah...

¿Patricio? Eh, gordinflón,

gordinflón, gordinflón no despertarse.

Patricio...

Ajam...

Eh... masa de galletas,

ricas. -Estar bien...

Hermana Sam sentirlo.

Sentir hacer daño a Patricio,

debería proteger a gordinflón, irse ahora.

¡Hermana, espera! No estés triste.

No tienes por qué irte.

-Sí, hermana Sam debe irse.

¡Tarde para manicura!

¡Adiós, gordinflón!

¡Herma...! ¡Ay!

(Golpe) ¡Pum!

¡Eh! ¿No te parece fenomenal?

Más bonita que un San Luis. (RÍE)

QUÍMICA PERFECTA

-Casi he terminado.

¿Podrías pasarme esa llave, Bob Esponja?

No, no, no, no. No, colega.

-¿Eh? ¿Me has llamado Bob Esponja.

Acordamos llamarnos por nuestros tratamientos apropiados.

-¡Bob Esponja! No, no, no, no, no, no, colega.

-Ya he terminado. Ahora podré esconde mis nueces

en tejas sin salir del laboratorio.

(Alarma) Pi, pi, pi.

(Estruendo) ¡Pum!

¡Funciona! ¡Hurra! ¡Oh, lo logramos!

-Cáscaras...

(Truenos) ¡Pum! ¡Pum!

-Por fin ha llegado el día.

-¿Quieres decir que es jueves? -No.

Es el día en el que robaré al señor Cangrejo

la fórmula de la burguer Cangreburguer.

-¿Y por qué, si puedo preguntar?

¿Hoy es distinto a los otros días en que fracasaste?

(GRUÑE) Ah... Porque hoy he terminado

mi mayor invento.

¡Contempla! -¿Qué es eso tan grande y feo

que contemplo? ¿Una olla llena de verduras?

-No es una olla de verduras cualquiera,

Karen, mi computaesposa, es mi último invento.

¿No te parece preciosa? Soy un genio.

-No me digas.

-Cariño, tú me ayudarás a lograr mi divino propósito,

¿verdad? Sí. Robar la receta

de la burguer Cangreburguer.

(RÍE MALÉFICAMENTE)

(Avisador) Pi, pi. ¡Está lista!

Oh, vaya.

(TOSE) Qué calor hace aquí.

-Dímelo a mí.

-¡Funcionó! En esta nueva forma gaseosa,

podré colarme silenciosamente

en el Crustáceo Crujiente.

(RÍE MALÉFICAMENTE)

Dinero, dinero, dinero, dinero, dinero.

-Ay. (RÍE MALÉFICAMENTE)

¿Cuánto costó aquella? (PLANKTON RÍE)

(HUSMEA)

¡Ah...!

-Por fin llegó el momento.

¿Eh? ¡No! ¡No! ¡No! ¡No!

¡Nooo! ¡Nooooo!

(HUSMEA) ¡Puf!

-¡Eh, apaga eso!

Plankton, ¿eres tú? -Claro que soy yo, enano.

-¿Has podido transformarte en una forma gaseosa!

Fascinante. -¿Eh? ¡Espera!

(SILBA)

Nunca me di cuenta de que eras un gran estudioso de la ciencia.

Tal vez puedas ayudarme a arreglar mi transportador de nuevo.

-Eh, ¿has dicho transportador?

Uhm, interesante.

Eh, si combino este aparato con mi propio invento,

la fórmula de la burguer Cangreburguer será mía.

Eh, quiero decir que tengo los repuestos

en el laboratorio, tal vez. -Entonces, trato hecho.

Qué laboratorio más chulo.

(RÍE) -¿Eso te parece?

-Pues claro, hijo, es que no te enteras.

-Supongo. -Debería haber venido antes,

puesto que nosotros somos los únicos científicos

de la ciudad. (RÍE) Sí.

Ay... uy... ay...

ay... ay... ah...

-Sí, señor, es un laboratorio estupendo.

-¿De verdad te gusta? Ay...

-Y mucho. ¡Aaaah!

Oh. Tu teletransportador, colega.

-Gracias, Bob Esponja. Por favor, llámame colega.

-¿Dónde conecto el teletransportador?

-Eh, enchúfalo a ese chisme de ahí arriba.

-¿A quién estás llamando chisme? -Oh,

es una auténtica esposa-automática, marca 3 Plus.

Es preciosa. -Oh, gracias.

-¡A ese chisme no, a este!

Enchufa tu teletransportador a mi aparato

y nuestra potencia combinada...

¡Conquistará el mundo!

(RÍE MALÉFICAMENTE)

-Ajá. O puedo combinar tu gasificador

a mi invento y transformar mis nueces en una nube gaseosa

que las lleve a Tejas. -Ah...

Sí, eso quiero decir.

-¡Sí, por fin funciona! ¡Nuevo colega!

Oh, supongo que no me necesitas más.

(Latidos) Pum, pum...

-Tienes razón, y cierra bien la puerta al salir.

-Espera, no puedes irte, Bob Esponja.

Te necesitamos. -¿Qué? ¡Nos estorbará!

¿A mí? ¿En qué puedo ayudaros?

Ni siquiera soy... científico.

-Tu trabajo será el más importante de todos,

serás nuestro mono de laboratorio.

¿Mono de laboratorio?

(CHILLA)

El mono de laboratorio se presenta. -¿Mono de laboratorio?

Nunca había tenido un mono de laboratorio.

Eh, tú sí que tienes madera de científica, loca.

(RÍE MALÉFICAMENTE)

(AMBOS RÍEN)

(RÍE)

-Tenemos que mejorar mucho esa risa maléfica.

-¡Listo! -¡Recibido! Ah...

Ay... Oh... ah...

Ah. ¡Un momento! Ah, ah.

¡Ah! ¡Ay, ay, ay, ay, ay,

ay, ay, ay... ¡Aaay!

(Estruendo) ¡Pum!

Eh, ¿quién apagó las luces? -Oh, solo hemos transportado

sus ojos. -Qué mal. ¡Otra vez!

¿Dónde está el pesado de Bob Esponja?

Me ha dejado solo en la cocina.

Este trabajo apesta.

(HUSMEA) Qué asco.

¡Aaaaaah!

¡Señor Cangrejo, tiene que venir conmigo!

¡Hay algo en la cocina que tiene que ver enseguida!

-Bueno...

(Golpe) ¡Pum! ¡Ay!

-Nuevo intento.

(Estruendo) ¡Pum!

Véalo usted mismo. ¿Eh?

(HUSMEA) ¡Ah!

Ya veo. Así que fuiste tú el que dejó

aquella peste en el despacho.

-Unos ajustes más...

-¡Hecho! ¡En marcha!

¿Crees que esta imagen me favorece o resulta un poco llamativa?

-¡Aparta!

¿De qué? ¡Aaay!

(Estruendo) ¡Pum!

Aquí está pasando algo raro.

Hola, Calamardo. ¡Aaaaaah!

¡Señor Cangrejo, hay un ruido extraño en la sala de descanso!

-Eh... Ahora solo le falta la boca.

-Apágalo.

(Estruendo) ¡Pum!

Buf...

Por el amor de Neptuno, Calamardo, ¿qué rayos te pasa?

(Estruendo) ¡Puf!

-Prueba 3.

(Estruendo) ¡Pum!

No puedo creer que venga a servir toda esta comida basura yo solo.

¡Oh, aaay!

¿Pero qué...?

¿Eh?

No, gracias. ¿Eh?

¡Aaaaaaaah!

(Música de radio)

(Estruendo) ¡Pum!

Mira, sin manos ni pies. (RÍE)

-Estamos más cerca.

¡Gafas!

-¡Lo activaremos juntos! -Claro que sí. 3...

-2... -1...

-¡Fuego!

(Golpe) ¡Pum! Oh...

(Estruendo) ¡Pum!

(Estruendo) ¡Pum!

Uy, tengo que ir al baño.

(Estruendo) ¡Pum!

¡Puf! Cola de Neptuno, Calamardo,

tal vez, debería de dejar el brócoli por una temporada.

(Estruendo) ¡Pum!

-¡Funcionó!

Esta vez transportamos todo su cuerpo.

-Sí, mi plan funcionó. Y ahora,

no me servís para nada más, infelices.

Con esta tecnología, me teletransportaré

hasta el Crustáceo Crujiente y la fórmula

de la burguer Cangreburguer será mía.

(RÍE MALÉFICAMENTE)

(Estruendo) ¡Pum!

¡Oh, no, Plankton ha ganado!

Y nosotros le ayudamos.

-No exactamente, colega.

(Estruendo) ¡Pum!

La fórmula de la burguer Cangreburguer.

Pero si está aquí, ¿dónde está Plankton?

-Idiotas.

Jugué con ellos como con una carta de cromos.

(RÍE MALÉFICAMENTE)

Y bien, ¿dónde está la fórmula?

Ha desaparecido.

¡Noooooooooo! ¿Has oído algo?

No he oído nada, pero algo apesta.

-¡Ja! Sabía que Plankton estaba maquinando algún plan malvado,

así que ajusté los mandos para llevarlo

donde no podrá hacer ningún mal.

Nadie engaña a una ardilla de Tejas.

(RÍE MALÉFICAMENTE)”