"UN TRABAJO DESDE DENTRO"

Sintonía circense

¡Ah, esto es vida!

-"¡Plancton!".

-¡Eh, estaba viendo eso!

-"Y yo estoy cansado de verte ahí sentado".

"El Cubo de Cebo es un fracaso".

-No lo es. Es que el negocio va lento.

-"Si siguieses mi consejo, la receta de la cangreburguer sería tuya".

-Tú eres un ordenador. Y yo soy el genio maléfico de aquí.

Puerta

-Ya llegamos, hijo. ¡El Cubo!

-Parece que este nuevo fracaso tiene clientes.

Hola, ¿se han perdido?

-No estamos perdidos. Prometí a mi hijo

que vendría al Cubo. -¿Sí?

-¡Vaya, fíjate en esta mampara!

Está totalmente cubierta de mugre y roña.

-¡Guay!

-¡Huele este aire!

-¡Me revuelve las tripas!

-Creo que el Cubo es el punto culminante del "tour".

-¿"Tour"?

-Sí. Estamos visitando los lugares más asquerosos de Fondo de Biquini.

Y hasta ahora, ¡este es el número uno!

Hasta la vista, pequeño guarrete. ¿Qué te parece

si ahora vamos al vertedero? -¡Qué bien!

-¡Ay!

-"¿Cómo fue?".

-Soy un perfecto fracaso.

-"¿Te rindes?". -Sí.

-"Haz lo que diga". -Sí.

-"Si quieres la receta

de la cangreburguer, mira al hombre que la escribió, el señor Cangrejo".

-¿Por qué no se me ocurrió antes?

-"Con mi conector de mentes, podrás leer el pensamiento

de Cangrejo y la receta se trasladará a tu cerebro.

-¡Vaya, es una estupenda idea! ¿Eh?

¡Karem, Karen...!

-"Quieto".

"Necesitarás esto".

-¿Y cómo tengo que sujetar esto en la cabeza del señor Cangrejo?

-"Déjamelo a mí, querido".

"Lanzamiento. Blanco a la vista".

"Secuencia iniciada".

-¡No! ¡Espera!

¡Ahí está!

¡Apártate de mi camino!

¡Ya lo tengo!

¡Fuera de ahí!

¡Eres mío...!

¿Dónde desea esta imagen de usted mismo, señor?

¡No...!

Te dije que dejaras de jugar con eso y que regresaras al trabajo.

¡Genial! -"Plancton, ¿qué ha pasado?".

-Gracias a tu gran puntería, ahora estoy atrapado

dentro de este cocinero idiota.

-"Bueno, ahora tendrás que cambiar de planes".

"Métete en sus ojos y mira lo que sucede fuera".

Oh.

¡Ay! Hemos fundido un fusible. Yo sí que te lo voy a fundir.

¡Funciona!

¡Puedo ver todo lo que Bob ve!

¡Que alguien encienda las luces! ¿Dónde está la de la 17?

Calarmardo, ¿eres tú? Está tan oscuro. No veo nada.

Dame esa cangreburguer. Claro, Calamardo.

¡Marchando una cangreburguer!

Va a hacer una justo delante de mí.

¿Dónde están las cangreburguers?

No. Eh...

¡Ahí está la carne! Añadimos un panecillo

esponjoso y una pizca de salsa.

¡Salsa especial!

Espera... ¿Es jabón?

Y después un poco

de lechuga.

¡Una burguer cangreburguer perfecta!

Ojalá pudiese ver cómo está.

Mesa 17, cangreburguer lista.

Cuidado, Calamardo, voy a servir.

Está peor de lo suyo.

¡Mesa 17!

¡Mesa 17!

Nada.

No.

¡No!

Mesa 17...

¡Mesa 17! Su burguer cangreburguer, señora.

¡Ya está bien!

Voy a probar algo diferente.

¿Dónde están los pabellones auditivos?

¡Eh, ha vuelto la luz!

¡Ah!

Señor Cangrejo, ¡ayuda!

¡Se me ha olvidado cómo hacer una cangreburguer!

¡Cuénteme la fórmula otra vez!

¡Oh, por fin el pabellón!

Ahora simplemente lo desconecto.

¿Necesitas que te refresque la memoria?

Repasaré la fórmula de la burguer una vez más.

Pitido

Sordera

Veamos lo que puedo captar por aquí.

"El secreto de la cangreburguer es...".

¡Por los dioses!

¿Sí?

El secreto de la fórmula de la burguer cangreburguer

¿Puede hablar más alto?

¡El secreto de la fórmula...! ¿Qué?

Espera.

Aquí viene.

¡El secreto de la fórmula de la burguer...!

¡Ay...!

Odio mi vida.

¿Está lo bastante alto? Ahora le oigo bien.

¿Cuál es tu pregunta?

Pues...

Pues no me acuerdo.

Yo tampoco. Vete.

Sí.

¡Fuera! Vale.

Ya está bien de sentidos carnales. Si quiero hacerme con la receta,

¡voy a tener que llegar al mando central!

¡El cerebro!

Hola, amigo.

¿Por qué estoy haciendo comentarios idiotas?

¿Saludos superficiales?

Pero ¿qué tipo de imbécil...?

¿Opiniones personales, chistes con carcajadas?

¡No! ¡Todo esto

es inútil! Voy a tener que adentrarme más.

Ah.

¿Dónde estoy?

Bosteza

¡Puaj!

¡Esto es asqueroso!

¿Dónde guardan los mentecatos sus secretos?

No.

¿Es que aquí no hay secretos?

¡Ah,

el archivo! Aquí hay registros de sus pensamientos.

¡Todos sus secretos más profundos y jugosos!

¡En un cómodo orden alfabético, fíjate!

Cu, erre, ese...

Esto no le va a gustar nada a Calamardo.

Risas de Bob Esponja

¿El lugar donde le gusta que le rasquen a Patricio?

¿Qué haces?

Eh... Rascar.

¡No! Estos secretos son tonterías.

Un momento.

¿Qué es esto?

¡La receta secreta no está en el cerebro,

sino en el corazón!

Qué tontería.

¡Ay!

Ah.

La receta de la burguer cangreburguer...

¡Sí, aquí la tengo!

La boca se me hace agua.

Mis papilas gustativas

me cosquillean.

No sé.

¡Qué bueno es esto!

¡Lo siento

hasta las puntas de mis...!

Muñones.

Cada ingrediente se combina en perfecta armonía.

¡Y todo es mío!

Vale, ha sido raro.

Como decía, la receta de la cangreburguer

es propiedad del crustáceo crujiente.

¿Quién ha dicho eso?

¿Qué me está pasando?

¡Ay, por favor!

¡Tan cálida y tan...!

¡Confuso y

conf...!

¡Ay!

¡Es maravilloso!

¡Todos los deliciosos ingredientes viven en perfecta armonía!

-"¿Tienes la receta?".

-Claro que sí. -"¿Y a qué esperas?,

tráela al Cubo de Cebo".

-Karen, pero eso sería robar.

-"¿Robar?".

-La recta es propiedad del crustáceo crujiente.

-"¡Oh, chico!".

¡Hola! Un momento, no quería decir esto.

¿Cómo era?

¡Ay!

¡Ah!

Ay...

¡Ay!

Ah.

¡Oh!

¡Ay!

Ay.

Bueno, no importa.

"Y bien, ¿dónde está la receta?".

-¿La qué?

-"Sabía que la fastidiarías".