Yuju.

Vamos, que esta práctica de vuelo valga la pena.

(AMBOS) ¡Oh!

Esto es superdivertido.

Bien. Y ahora mucha atención.

Papá Noel por la borda.

(Grito)

¿Por qué Papá Noel no participa nunca en nuestra práctica?

(Música de acción)

Perfecto, chicos. Bien hecho.

Y ahora... un fallo en la compuerta.

Vamos, Niko.

La clave está en los cuernos. Inténtalo.

(JADEA)

Lo he conseguido. Ese es mi chico.

- Tengo el mío. - No está mal. Nada mal.

Pero... ¿Y si perdemos el trineo?

Intenta no gritar como un gallina.

(RÍE)

¿Por qué Papá Noel no puede ir andando como hace todo el mundo?

Y para acabar, prueba especial de velocidad para el día N.

Niko, recuerda lo que te dije.

No pienses en nada y concéntrate en tu corazón alegre.

Corazón alegre. Vale, papá.

Aquí arriba soy Saltarín.

Velocidad Papá Noel.

Niko, esto no va a salir bien.

¡Ey! Lo estás haciendo.

Lo has conseguido Niko.

Vas a velocidad Papá Noel.

No puedo ir...

más rápido.

(GRITA)

No veo nada. No veo nada.

Esto está mejor.

Otra vez. No veo nada. ¡No veo nada!

(Quejidos)

(Gritos)

"Hola".

"Hola. ¿Cómo te llamas?"

Señora, suélteme.

"Te quiero mucho".

Pero si acaba de conocerme.

Niko, ¿estás bien?

Sí, lo siento, papá.

Nunca podré volar a velocidad Papá Noel.

Claro que podrás,

pero requiere tiempo y un corazón alegre.

Tú tienes el corazón alegre, ¿no? Claro.

Vamos, quiero intentarlo otra vez.

Mejor la semana que viene, hijo.

Se ha hecho un poco tarde

y tu madre se estará preguntando dónde estás.

Papá, si vivieras conmigo y con mamá en el Nuevo Valle del Reno,

no tendríamos que ir siempre de aquí para allá.

Ya lo sé, pero tu madre y yo...

¿Y si le llevamos un regalo?

Podemos coger musgo de alta montaña.

Seguro que le va a encantar. Es el que más le gusta.

Lo que hace más feliz a tu madre

es que te lleve de vuelta sano y salvo.

Y cuanto antes, mejor.

Supongo que sí.

Lo que significa que no podemos hacer esto.

¿Te refieres a esto?

Exacto. Ni esto.

Pues yo no pienso hacer esto.

Y nada de carreras hasta casa.

Desde luego que no.

Vais a hacer una carrera, ¿verdad?

Sí.

(RÍE)

Menuda pareja.

¿Por qué siempre tienen que preocuparme?

Niko ya tendría que haber vuelto.

Está bien vigilado, Oona.

Saltarín y Julius no le quitan el ojo de encima.

Un reno alocado y una ardilla gordinflona.

¿Qué podría pasarle?

(Grito de alegría)

Por fin. ¿Estas te parecen buenas horas de llegar?

¿Dónde está Niko?

No te preocupes, cuando está conmigo no hay nada que temer.

(GRITA)

Eh, bueno, prácticamente nada.

¿He ganado?

¿Qué he dicho sobre las carreras?

Si tengo que aprender a ir a velocidad Papá Noel...

¿Velocidad Papá Noel?

Ya hemos hablado de esto.

Niko aún es muy pequeño para eso.

Sí, ya lo sé, pero... No le hago caso, mamá.

Siempre me dice: "Eres muy pequeño para ir tan rápido.

Y tienes que obedecer a tu madre, chaval".

Y yo siempre le pregunto, ¿por qué?

Y siempre me responde:

"Porque tu madre es una chica muy especial".

Y los ojitos se le ponen así.

Eh, sí...

Bueno, nos veremos el fin de semana después de Navidad, Niko.

Os deseo a todos una feliz Navidad.

(SUSPIRA)

¿Te vendrás mañana con nosotros a jugar al bosque?

Me han dicho que hay mucho musgo fresco.

Oh, sí. ¿Puedo, mamá?

De acuerdo, pero ahora mismo ya es hora de cenar.

Buenas noches.

¿Qué te parece? He cogido tu musgo favorito.

Es genial, mamá. Pero aquí hay mucho.

¿Todo esto es para nosotros dos?

Niko...

Esperaba el momento para decirte una cosa.

Yo también.

Verás, hoy he descubierto que mi corazón

no está tan alegre como debería estar.

Y se me ha ocurrido que, tal vez...

¿no sería fantástico tener a alguien que nos ayudara en casa?

Sí, que lo sería.

Que nos ayudara a buscar comida y que te hiciera compañía.

No tendrías que estar sola.

No sabes cuánto me alegra que pienses así.

Porque tengo una buena noticia.

A partir de ahora no vamos a estar solos.

¿Quieres decir...?

¡Papá! ¡No!

Niko, espera.

Hola, Niko.

Pero... pero...

Niko, te presento a Lenni.

Me alegro de conocerte por fin.

Me han hablado mucho de ti.

La verdad es que estaba nervioso por conocerte.

No sabía muy bien qué decirte.

Pensaba que acabaría parloteando sobre el tiempo o algo así,

pero no ha resultado tan difícil como esperaba.

Dicen que igual nieva.

¿Que eres? ¿El reno del tiempo?

También queremos que conozcas a alguien más.

Claro.

Ven a saludar, Jonni.

Hola.

¡Ay!

¿Ahora eres mi hermano mayor?

¿Hermano mayor?

¿Quién tiene hambre?

Yo me muero de hambre.

Jonni y yo hemos traído algo para tomar de postre.

Es musgo de alta montaña.

- Vaya, mi preferido.

(TOSE) Oye, Niko.

Me he dado cuenta de que hay muchas nubes.

Le estaba diciendo a tu madre,

me parece que hoy se va a mojar el "te reno".

(RÍEN)

¿Siempre tienes que estar hablando del tiempo?

No.

Ahora no hablaba del tiempo.

Ha sido un chiste sobre el tiempo.

Pues yo no veo a nadie riéndose.

(RÍE)

El "te reno". (RÍE)

Ahora lo pillo.

Ahora lo pillo.

Niko,

¿qué te parece si nos cuentas

todo lo que has hecho en la guarida de Papá Noel?

No ha sido nada especial.

He estado todo el tiempo con el Escuadrón Volador.

Vaya, qué pasada. El Escuadrón Volador.

Es un gran admirador del Escuadrón Volador.

Se sabe sus nombres.

Cometa, Cupido, Bailarín,

Brilloso, Relámpago, Trueno y Juguetón.

Te has dejado Saltarín.

Siempre me olvido de él.

No pasa nada, Jonni. Puede pasarle a cualquiera.

A mí no me pasaría.

Niko,

tú sabes que para mí siempre serás el primero, ¿verdad?

Ya lo sé.

Lo cierto es que me hacía mucha ilusión

que te pareciera bien que Lenni viniera a vivir con nosotros.

Él también es muy especial para mí.

Y creo que si le das una oportunidad,

entenderás por qué.

Ya, pero sí que me parece bien, mamá.

¿En serio?

Claro.

Me has dado una gran alegría, Niko.

Felices sueños, hombrecito mío.

La verdad es que no me parece nada bien.

¿Qué voy a hacer ahora?

A lo mejor deberías darle una oportunidad.

¿Tú no estabas de mi parte?

Por supuesto.

Mira, Niko.

Ya sé que es difícil.

Los cambios siempre lo son.

Pero tu madre también merece ser feliz.

Sí, me imagino.

Y parece que es un tipo simpático. (RÍE)

Desde luego, gracioso sí que es.

Cada vez que me acuerdo, "te reno".

(RÍE)

Es todo un clásico.

(Águilas)

# Nuestra vida aquí.

# era triste sin ti.

# Sin nada que hacer

# más que hablar y comer.

# Y todo cambió,

# un sol nos brilló.

# No hay nada como estar... #

(CANTA)

(CANTA)

Ha sido precioso, chicos, de verdad.

Ha sido precioso. ¿Sabéis?

Estoy muy contenta de haberos conocido.

Ahora mismo me viene muy bien tener amigos.

Porque sois mis amigos, ¿verdad?

- Oh, claro. - Los mejores.

- Desde luego. - Sí.

Qué bien.

Porque necesito que me hagáis un pequeño favor.

(Risas)

Otra vez otra vez.

Allá va.

Lo haces muy bien, Jonni.

Lánzala más alta.

A ver si la coges.

¿Qué te ha parecido?

Muy alta, ¿no?

(Quejidos)

¿Te has hecho daño, hijo? No, papá.

Estoy bien. En serio, estoy bien.

Niko no quería hacerte daño.

Es solo que también quería jugar.

¿De verdad?

¿Puedo jugar con Niko, papá?

Bueno, habría que preguntárselo a Niko.

A Niko le encantará jugar con Jonni.

¿Verdad, Niko? ¿Qué?

¿Pero no íbamos a ir al bosque con Saga y con Wilma?

(RÍE)

Es muy simpático.

Ya lo creo. Me recuerda mucho a mí.

Parece que ahora tienes un nuevo mejor amigo.

¡Niko!

¿Cómo puedes decir algo así?

Después de todo lo que hemos pasado,

¿crees que un crío podría interponerse en...?

(RÍE) Mira qué monada.

(AMBOS) ¡Oh!

¿Qué te gustaría hacer, Jonni?

¿Te gustan los juegos? Sí, me gustan mucho.

¿Y qué te parece si jugamos al escondite?

Genial. Yo me escondo de maravilla.

Entonces, perfecto.

Venga, tienes que correr hacia el bosque y esconderte.

Venga, corre.

Tengo una idea mejor.

Tú y Niko os esconderéis juntos y los demás iremos a buscaros.

Oye, espera...

¡Sí! Me encanta jugar al escondite.

Uno, dos, tres,

cuatro... ¿Quiere decir que somos un equipo?

seis, siete...

¿Cómo es eso de volar?

¿No te da miedo?

¿En serio conoces a todo el Escuadrón Volador?

¿A qué huele la barba de Papá Noel?

¿Me llevarás contigo la próxima vez?

No.

No todos pueden ir a la guarida y conocer al escuadrón.

Saga, ¿has mirado por aquí?

Eh. ¿Dónde nos escondemos?

¿Te parece bien allí? ¡Ah!

Creo que es mejor que lo decidas tú.

Eres el hermano mayor. Deja de llamarme así.

No soy tu hermano. ¿Me oyes?

Pero mamá dice que...

Y ella no es tu madre.

Es mi madre.

Está bien, Niko.

(GRUÑE)

(SUSPIRA)

Ojalá desaparecieras para siempre.

¡Ah! ¿Eh?

¿Ha funcionado? ¡Niko!

¡Auxilio!

Niko. ¿Qué ha pasado?

¿Dónde está Jonni? No lo sé.

Estaba aquí mismo, junto al banco de nieve.

¿Has dejado solo a Jonni?

Pero solo un momento.

¡Niko, ayúdame!

¡Jonni!

Vamos, Niko.

(Música de acción)

¡Cuidado!

(GRITA)

Se están acercando.

No puedo volar más deprisa.

Me encanta cuando huyen.

No puedo esquivarlos, tienes que salvarte tú.

De eso ni hablar.

No pienso irte a ningún...

(SE QUEJA)

Vaya, vaya, vaya.

¿Se puede saber qué tenemos aquí?

Es un reno. Lo sé por sus cuernos.

Ya sé que es un reno. Intentaba dar miedo.

Perdona.

No, da igual.

Me has estropeado la escena.

Es jefe. Deberíamos irnos.

No tendrás tanta suerte

la próxima vez.

(Quejidos)

Por aquí.

Las águilas se han llevado a Jonni.

Las águilas.

¿Y ahora qué hacemos?

Mantener la calma y pensar despacio.

No hay tiempo para eso.

Las águilas lo han cazado por mi culpa y voy a ir a por él.

No puedo permitirlo.

Es demasiado peligroso.

Tiene que haber otra solución.

Primero, volvemos al Valle de los Renos y damos la alarma.

Segundo, elegimos a un jefe de rescate.

Cuarto, ¿o era tercero?

Eh, come nueces.

Oh, no.

No podrá encontrar a Jonni él solo.

¿Puedo saber a dónde me lleváis?

Ahorra saliva, Niko.

Me llamo Jonni.

Sí, claro.

¡Jonni!

¡Jonni!

¡Jonni!

¿Jonni, dónde estás?

(Música de acción)

¡Ah!

¡Ah!

Escuchad. Wilma, ve a la guarida de Papá Noel

y cuéntale a Saltarín lo que ha pasado.

Saga, quiero que tú te quedes aquí por si acaso volvieran.

¿Y qué vas a hacer mientras tanto?

Voy a ir a buscar a Niko.

Pero antes, Lenni y Oona tienen que saber lo que ha ocurrido.

Sinceridad ante todo siempre es lo mejor.

(Risas)

Creo que es mejor que sea yo quien dé la noticia.

Hola. Que pronto habéis vuelto.

¿Y los chicos? ¿Los chicos?

¿Qué chicos?

Jonni y Niko.

Ah, Jonni y Niko. Claro.

Resulta que estaban jugando y vino esa cosa voladora y...

Debí suponerlo.

Saltarín se los ha llevado a ver la guarida de Papá Noel.

Todas las semanas lo mismo.

En cuanto desaparezco de la vista, Niko se larga con ese padre suyo.

Y ya estoy más que harta.

- Yo también.

¡Eh, espera un momento!

Wilma, no te vayas.

¿Por qué no les has dicho nada?

Vaya, perdone usted,

Señor, sinceridad, ante todo siempre es lo mejor.

Creo recordar que has dicho

que era mejor que dieras tú la noticia.

Parad de discutir de una vez.

Lo importante no es quién se lo diga,

sino que Lenni y Oona lo sepan.

¿Qué es lo que tenemos que saber?

(Ronquido)

(JADEA)

Hola.

¿Quién ha dicho eso?

¿Dónde estoy?

No te preocupes, no corres ningún peligro.

No te he quitado la vista de encima, jovencita.

¿Jovencita?

¿Qué? Quiero decir joven reno.

Usted puede ver, ¿verdad?

Perdona, pero puedo contar

hasta el último pelo verde de tu cabeza a veinte metros.

Eso es musgo. Está hablándole a una piedra.

¿Musgo? Sí, ya lo sabía.

Le agradezco mucho su ayuda, señor.

Pero tengo que irme volando.

¿Tú vuelas?

Podría contarte historias sobre voladores.

Uy, gracias, pero de verdad tengo que irme.

Las águilas se han llevado a un reno y necesita de ayuda.

¿Las águilas?

Cielos, no pensarás ir tú solo al Feudo de las Águilas, ¿verdad?

¿Qué es eso?

El lugar al que llevan a todas sus presas.

Un sitio muy peligroso.

Mejor acude al Escuadrón Volador, ellos te ayudarán.

No puedo hacerlo.

Es decir, falta muy poco para Navidad

y estarán muy atareados y no me gustaría molestarlos.

Usted puede acompañarme.

¿Al Feudo de las Águilas? De ninguna manera.

Mis días de aventura pasaron ya hace tiempo.

Pero es que necesito su ayuda.

Lo siento, pero si vivo aquí solo es porque tengo mis razones.

Me cansé de enredarme en los problemas del mundo.

Ya estaba harto.

Solo quiero la amistad de las rocas y los árboles.

Donde vivo no necesito a nadie y nadie me necesita a mí.

Pues hay un pequeño reno que me necesita

y voy a ir con su ayuda o sin ella.

Dejad de mirarme de esa manera, ¿eh?

Continuad mirarme cuanto queráis, pero no os servirá de nada.

¿Creéis que dejaré que un montón de piedras

me digan lo que tengo que hacer?

Ya basta. Está bien, me iré.

¿Ya estáis contentas?

Siempre es mejor que haga de guía un reno que sepa por dónde va.

Apártese, señor. No ve que tenemos prisa.

¡Ay!

(Águilas)

¡Ah! Hemos vuelto.

Y creo que vas a ponerte muy contenta.

Estaba convencida de que podía confiar en vosotros,

queridos amigos rapaces.

Te he traído al joven reno como nos pediste.

Siempre intento complacerte.

He cazado a Niko, ¿lo ves?

- Lo hemos cazado. - Entre todos.

Ese no es Niko.

- Ha sido él. - Eso.

¿Cómo que no es Niko?

Pero tú dijiste: "Traed al pequeño reno trotador".

Y eso es un pequeño reno trotador. ¿No es cierto?

Te equivocas, aguilucho. Yo dije:

"Traedme al pequeño..." (TOSE)

Dije: "Traedme al pequeño reno volador".

¿Lo ves? Te dije que era una cosa que no tenía sentido.

¿Ni siquiera le habéis preguntado cómo se llama?

Sí, pero pensábamos que nos mentía.

Ha sido una simple confusión.

Quitadlo de mi vista.

¿Qué quieres que hagamos con él?

Me da igual.

Genial, porque estoy muerto de hambre.

Os lo advierto. Niko es mi hermano mayor

y los renos del Escuadrón Volador son amigos suyos.

Cuando vengan a rescatarme, os arrepentiréis.

¿Que Niko es tu hermano?

(RÍE)

Bien, parece que finalmente servirás para algo.

Buen trabajo, amigos.

Ponedlo en algún lugar seguro.

¿Lo tiene en las águilas?

Tengo que encontrarlo.

Dime.

¿Por dónde hay que ir?

Se me ocurre que se lo hayan llevado al Feudo de las Águilas.

Pues al Feudo de las Águilas.

¿Y dónde está?

Espera, Lenni.

Se tardan varios días en llegar allí a pie.

Déjame ir a mí. Yo puedo volar.

Ve con Wilma a la guarida de Papá Noel

y pide ayuda al Escuadrón Volador.

¿Y pedir ayuda a Saltarín?

No pienso hacerlo.

¿Ni siquiera por Jonni?

Tienes razón.

Pero ¿qué voy a decirle a Oona?

Yo siempre digo, sinceridad ante todo es lo mejor.

¿Qué pasa? Es cierto.

Julius tiene razón.

Tengo que decirle la verdad.

¿Vas a la guarida de Papá Noel para desafiar a Saltarín?

Sí, exacto.

Estoy harto de que te dé disgustos y pienso arreglar

este asunto con él de una vez por todas.

- De reno a reno. - ¿En serio?

Pues la verdad es que no te pega mucho.

Eso es más típico de un bravucón, no de mi dulce reno del tiempo.

Bueno, verás, no solo me interesa el tiempo, preciosa.

Y ahora, si no te importa, me tengo que ir.

Sí, parece que va a nevar más.

Vaya, tienes una manera curiosa de decir la verdad.

No me atrevería jamás a mentirle.

No me gusta.

Pero creo que es mejor no preocuparla de momento.

¿Y eso por qué?

Voy contigo. Tienes razón.

Alguien tiene que poner a Saltarín en su sitio.

Y también tengo un par de cosas que quiero decirle.

Muy bien.

Espero que Jonni esté bien.

¿Sabes cuánto falta para el Feudo de las Águilas?

Llegaremos cuando hayamos llegado y mientras tanto,

te sugiero reducir la charla al mínimo.

Bien.

Vivo en el Valle de los Renos.

¿Has estado allí alguna vez?

Hay muchos renos. Por cierto, me llamo Niko.

Yo soy Tobias, por si te interesa.

Y, como te he comentado, me gusta vivir a mi aire.

¿Y no te sientes solo? ¿Solo?

Uno tienes que aprender a cuidarse de sí mismo.

Yo no necesito a nadie aparte de mí.

No llegas a viejo como yo si no sabes cuidar de ti mismo.

Además, no puedes confiar en que siempre haya alguien

como yo salvándote cuando tengas un problema.

¿Podemos parar un poco?

A eso me refiero precisamente, jovencito.

No durarías ni un minuto aquí si no fuera por mí.

(RÍE MALVADAMENTE)

Este sitio da mucho miedo, ¿verdad?

Aquí abajo, donde nunca llega la luz,

no hay modo de saber si es de día o de noche.

Aquí solo hay túneles oscuros.

(RÍE MALVADAMENTE)

- (GRITA) - Hola, Veloz.

Siempre igual.

¿No podrías, aunque fuera una vez, dejarme dar miedo

sin estropearme la diversión?

Vaya perdona.

Mira, este es el Bosque de la Desaparición.

¿Por qué lo llaman así?

Ni idea, pero tranquilo, seguro que pronto lo sabremos.

(SE QUEJA)

(SE QUEJA)

Te noto un poco cansado, joven reno.

Si quieres descansar, por mí hay problema.

No, no estoy cansado. ¿De verdad?

Pues da la impresión de que estás sin aliento.

No descansaremos hasta que encontremos a Jonni.

¿Tobias?

(Música de misterio)

(Ronquidos)

Tobias.

Despierta, por favor.

Estoy despierto. Y creo que ya he descubierto

por qué se llama el Bosque de la Desaparición.

Pero, si estás despierto, ¿entonces quién ronca?

Eso...

¿Eso es un oso?

No tienes por qué preocuparte por él.

Ahora mismo está hibernando.

No lo despertarías ni aunque quisieras.

¡Ey, oso, despierta!

¿Lo ves? Nada.

O tal vez sí que se despiertan. Vámonos de aquí.

Sí, me parece que va a ser lo mejor.

(Música de acción)

Estoy atrapado.

Aguanta. Rápido.

Ya viene.

¡Ay!

¡Ay!

(TOSE)

Increíble. Acabas de vencer a un oso.

¿En serio?

Claro. ¿Cómo no?

¿Qué te parece?

Suerte que estabas conmigo. Oh, sí, gracias.

Aunque has sido tú quien ha caído por el agujero, no yo.

Y también quien ha despertado al oso.

¿Qué te he dicho antes de reducir la charla al mínimo?

(RÍE)

¿No tuviste hermanos que te metieran siempre en líos?

No. ¿Ni padres que te dieran órdenes?

No. Vaya, tuvo que ser estupendo.

Podías hacer lo que querías. Y eso es justo lo que hice.

Recorrí el mundo varias veces

y viví más aventuras de las que puedas imaginar.

Qué suerte tienes.

Y encima ahora vives a tu aire.

Solo tú y tus recuerdos.

Así es.

Sin amigos, ni familia que te molesten.

Porque no tienes a nadie que te moleste, ¿verdad?

Seguro que nadie sabe ni que existes.

Sí, tienes razón.

Debe ser genial.

¿Te encuentras bien?

Pareces un poco triste.

¿Pero cómo voy a estar triste?

Soy el reno más afortunado del mundo, ¿recuerdas?

Vale más que sigamos.

(Música de tensión)

Bien, jovencito.

Estamos llegando al Feudo de las Águilas.

A partir de ahora hay que ir con cuidado.

(Águilas)

¿A dónde vas? A buscar a Jonni.

No durarás ni un segundo en el aire cuando ellas te vean.

¿Y qué puedo hacer?

Yo solía venir aquí a jugar de pequeño.

Había un pasadizo que llevaba hasta su guarida y estaba...

Aquí.

Perfecto.

Sígueme.

(Quejidos)

Me parece que he crecido un poco con los años.

Lo siento, pero tendré que esperar aquí.

No tardaré mucho.

Te estaré esperando aquí mismo.

Si detecto algún peligro, silbaré hacia el túnel.

(Águilas)

Perdona, Veloz

pero he oído lo que has dicho y tienes toda la razón.

La verdad es que aquí abajo hace falta un poco de luz.

Esto es demasiado siniestro.

¡Es una mazmorra!

¡Tiene que ser siniestra!

No hace falta gritar.

- No queremos asustar al prisionero. - Claro que queremos.

(SE QUEJA)

Eddie, ¿por qué no tomas un poco de aire fresco?

Muy bien, ya me voy.

Si entrara la luz, también se podría tomar el aire aquí abajo.

(Ruido)

¿Quién anda ahí?

¿Eres tú, Eddie?

Esto no tiene gracia.

Ya te lo he dicho.

Solo tiene gracia cuando asusto yo.

Eddie.

Eddie.

Jonni.

Niko, sabía que vendrías.

Shh. Deprisa.

Tenemos que salir de aquí.

¿Eh, has visto eso?

¿Qué hace un reno en nuestro feudo?

(Música de tensión)

- Hola. - ¿Quién es?

No es fácil sorprender al viejo Tobias.

Oye, qué estamos aquí.

(INTENTA SILBAR)

Niko. ¡Cuidado!

Vaya, ¿qué te parece?

Creo que hemos encontrado a nuestro pequeño reno.

Pues es más viejo de lo que esperaba.

No es ese, chorlito.

Está en el túnel.

(Águilas)

Vamos.

- ¡Bú! - (AMBOS GRITAN)

Oh, mira qué bonito.

Una reunión familiar, es conmovedor.

En el fondo es un sentimental y un blando.

¿No sabes lo que es un sarcasmo?

(SUSURRA) Cuando diga "ya", salta sobre mí.

Ya.

¡Detenedlos!

Más rápido, Niko.

Tiene que haber otra salida.

Niko, mira allí.

(AMBOS GRITAN)

¿Vais a algún sitio?

(Voces de fondo)

¿Qué pasa ahí abajo?

Vamos. Pareces un elefante.

Uno, dos, tres.

Y arriba.

Perdone, señor, pero por casualidad

¿no habrá visto a un joven reno por aquí?

Vale, vale.

Mantén la calma y no digas ni una palabra.

No tengo ni Niko de lo que me dices.

O sea que no, no tengo ni idea de lo que me estás "nijando".

Maldita sea.

Tenemos que hablar.

Niko.

Vaya.

La verdad es que eres un jovencito muy difícil de atrapar.

¿Quién eres tú?

Había olvidado que no nos habíamos visto nunca.

Pero creo que conociste a mi hermano.

¿Lobo Negro es tu hermano?

¡No! Era mi hermano.

Hasta que tú lo destruiste.

Jonni no tiene nada que ver.

Y no es mi hermano de verdad.

De verdad o no, al menos sé que tienes un hermano.

Pero será por poco tiempo.

(RÍE MALVADAMENTE)

(Estruendo)

No puedes dejar de meterte en líos, chaval.

Tobias. No eres el único que sabe volar.

¡Cogedles!

A la izquierda.

No, por ahí no.

Eso no es la izquierda.

Izquierda, ¿eh? ¿Qué más da?

Volar nunca se olvida.

Tranquilo, jefe. Yo me encargo.

No podrás llevarnos a todos.

Tú agárrate fuerte y aprende de un maestro.

Vamos, perseguidlos.

Había olvidado lo divertido que era esto.

¿Es que tengo que hacerlo yo todo?

(Música de acción)

(Risas)

¿Y tú por qué te ríes?

Perdona, es por las plumas. Tengo muchas cosquillas.

Ah, cuánta paciencia.

(Gritos)

¿Todos bien?

Tobias. ¿Por qué no me habías dicho que volabas?

Bueno, si quieres que te diga la verdad,

no estaba seguro de que me acordase.

(Águilas)

Son ellos.

Tenemos que escondernos.

Yo me escondo de maravilla.

Venid aquí.

Vamos, Niko. Ya se acercan.

No están aquí.

Vámonos.

Jonni nos ha salvado.

Buen trabajo, Jonni. Bien hecho.

Tenemos que irnos.

Vamos. En marcha.

¿Y bien? ¿Dónde están?

Aparentemente han desaparecido.

"Aparentemente han desaparecido". ¿No te suena un poco raro?

Inútiles. Lo habéis destrozado todo.

(GRUÑE)

Veréis, lo que quiero decir es

que si no podéis ayudarme a atrapar a ese reno,

tendré que irme.

- Quédate. - No te vayas.

Nunca quiere quedarse nadie.

Dinos qué tenemos que hacer.

Uníos a mí para destruir al Escuadrón Volador.

Cuando no estén, Niko ya no tendrá dónde esconderse.

¿Destruir al Escuadrón Volador?

- No creo que podamos. - Esos tíos son duros.

Lo siento, me habré equivocado.

Estaba convencida de que fue el Escuadrón Volador

quien os desterró de los cielos.

Fueron ellos.

¿Ah sí? ¿En serio?

¿Y estáis seguros de que eso no os molesta ni siquiera un poco?

Sí, claro.

(HABLAN A LA VEZ)

Si el Escuadrón Volador me hubiera desterrado de los cielos

obligándome a vivir en esta cueva siniestra,

seguro que me habría puesto un poco furiosa.

(HABLAN A LA VEZ)

Ya te dije que era siniestra.

Hasta el punto de que volaría ahora mismo

hasta la guarida de Papá Noel y les enseñaría

a esos malditos renos voladores quién manda en estos cielos.

(TODOS) Sí, eso.

- A por ellos. - A por ellos.

(RÍE MALVADAMENTE)

(Águilas)

Toma.

Tobias, ¿perteneciste al Escuadrón Volador?

Ya lo creo.

Además, fueron los mejores años de mi vida.

¿Y por qué lo dejaste?

Bueno, es que... hubo un incidente, ¿sabes?

¿Qué tipo de incidente?

Verás, en aquella época yo era el líder del Escuadrón.

Sí, lo era.

Pero ya empezaba a hacerme viejo

y con la vejez empezó a fallarme la vista.

En aquel momento no dije nada porque no estaba dispuesto

a perder mi rango en el Escuadrón.

Hay que entender que era la única familia que tenía.

Me comporté como un idiota

y seguí repartiendo regalos de Navidad como si nada.

Pero mis ojos estaban peor de lo que creía.

Aquella noche me dejé dos casas.

Y al día siguiente, dos niños se quedaron sin juguetes.

Y todo por mi culpa.

Estaba tan avergonzado por aquello

que me escabullí en mitad de la noche.

Y nunca más regresé.

Pero hoy has compensado aquel error.

Míranos a Jonni y a mí.

Sí, no estaríamos aquí si no fuera por ti.

Sois unos buenos chicos.

Y tenéis suerte de ser hermanos.

En realidad...

No somos hermanos como los de verdad.

El padre de Jonni y mi madre viven juntos.

Verás, es que mi madre murió cuando yo nací.

Por eso mi padre y yo siempre hemos estado solos.

¿Y qué tiene de malo? Estar solo es lo mejor que hay.

Pregúntale a Tobias.

Bueno... No, no es tan maravilloso.

Mi padre siempre había estado triste hasta donde yo recuerdo.

Pero desde que conoció a tu madre, siempre está contento.

Y yo también.

Pero entiendo perfectamente que no quieras ser mi hermano.

Así que no te molestaré.

Mmm... ¿Qué?

Si eso es lo que quiere.

Ay...

(Águilas)

Comprobación prenavideña del equipo de vuelo.

- Timón derecho. - (TODOS) Listo.

- Timón izquierdo. - (TODOS) Listo.

Presión de aire.

(ERUCTA)

No está mal, no está nada mal.

Hoy será la última prueba antes del día N.

Adelante.

Mira, allí están.

Y ahora sé valiente, Lenni.

Dile de una vez a Saltarín todo lo que tengas que decir.

Ha sido un placer conocerte, Lenni. Me tengo que ir.

Esperad. Tengo que ir a ver qué pasa.

Dos minutos, Saltarín.

- Oona, ¿qué haces aquí arriba? - Me llamo Lenni.

Y tienes que darme una explicación.

- ¿Quién, yo? - Oona.

Esto podría ser desagradable.

Es mejor que lo arreglemos entre hombres.

No pienso irme de aquí.

Sabemos que están contigo.

No tengo ni idea de lo que dices.

Venga, no te hagas el inocente conmigo, volador.

Sabes perfectamente a qué nos referimos.

- ¿Ah, sí? - Sí.

Desde luego.

Oye, ¿tienes algún problema en ese ojo?

¿Se puede saber qué pasa, Lenni?

(SUSPIRA)

(Alarma)

Alarma en la fábrica.

Echemos un vistazo.

Lo siento mucho. Tengo que irme ahora mismo.

¿Qué ocurre?

- La fábrica no está en marcha.

No habrá suficientes juguetes para Navidad.

Veamos cuál es el motivo.

Son las huellas de mamá.

Y estas de papá.

Oye, Jonni.

Sobre eso de las águilas...

Espera un momento, jovencito.

Tu madre cree que estáis en la guarida de Papá Noel.

¿No crees que ya es hora de que sepa lo que ha pasado?

¿Pero por qué?

Ahora está solucionado.

Si descubre que las águilas raptaron a Jonni

y se lo llevaron a su feudo, no volverá a confiar en mí.

Y no me dejará volver a la guarida de Papá Noel.

Lo siento mucho, Niko.

Pero es tu madre y tiene que saber la verdad.

Me castigará de por vida.

Uy.

Tranquilo, Tobias. Estoy seguro de que Niko hará lo que debe.

¿A dónde vas? Me vuelvo a casa.

Ahora que los chicos están a salvo,

no necesitan al viejo Tobias para nada.

Pero no puedes irte sin despedirte de Niko.

Es mejor así.

Además, me olvidará muy pronto.

Sí, le irá muy bien.

Pero...

Papá. Jonni, ¿te encuentras bien?

Estaba muy preocupado.

Hola, mamá.

Estoy bien, papá.

Niko, ¿dónde os habíais metido?

Bueno, verás...

Lo que ha pasado...

Que hemos ido a la guarida de Papá Noel con Saltarín.

Ha sido muy divertido. ¿Qué?

¿Cuántas veces te lo he repetido, Niko?

No puedes irte a ver a tu padre sin avisar y cuando te apetezca.

¿Seguro que no hay nada más que quieras decirle a tu madre?

Sí.

No volveré a hacerlo más, te lo prometo.

Bien, entonces ya está.

Por lo menos, tú y Jonni estáis a salvo.

Lenni, creo que tú también tienes algo que decir.

¿Sí?

Quiero decir... que se está preparando una tormenta.

Volvamos antes de que empeore.

No sé por qué me molesto.

Venga, Julius. Volvamos a casa.

¿Dónde está Tobias?

Tobias ha dicho que tenía que marcharse, Niko.

Pero si no se ha despedido.

Está claro que no necesita nadie.

Alguien debe haber parado las máquinas.

Esto no me gusta nada.

(Música de tensión)

(GRITAN)

(RÍEN)

(Música de tocadiscos)

¿Qué es esa música?

(GRITAN)

Vaya, ahora no volamos tan alto, ¿verdad?

(TARAREA)

Oye, Jonni.

Solo quería darte las gracias.

Pero no tendrías que haber mentido.

Tú lo has hecho.

Yo no había mentido nunca hasta hoy.

Y ha sido más fácil de lo que pensaba.

Pero, de todos modos,

ha hecho que me sienta un poco mal.

¿Sobre qué estáis cuchicheando?

Sobre nada.

Me hace muy feliz comprobar que los dos os lleváis tan bien.

Creo que ahora entiendo a qué os referís tu padre y tú

con lo del corazón alegre.

Estaba segura de que serías un buen hermano mayor para Jonni.

Mamá, cuando hemos ido a jugar al escondite,

he dejado a Jonni solo y las águilas se lo han llevado.

¿Qué?

Sabía que dirías la verdad.

Julius. ¿Tú lo sabías?

He intentado decírtelo, pero Wilma...

A mí no me mires.

Yo también quería decírtelo, pero Lenni...

- ¿Lenni? - Quería contártelo.

Quería hacerlo, pero no quería que te preocuparas porque...

Bueno, ya sabes por qué.

¿Queréis decir que todos me habéis mentido?

(TODOS) No.

Sí.

Sí.

Sí.

Lenni.

Pensaba que tú eras diferente.

Vamos, Niko.

Nos volvemos a casa.

Solos.

(TODOS) Somos los mejores.

Somos los mejores.

Somos los mejores.

(RÍE MALVADAMENTE)

No sé quiénes sois, pero nadie molesta al Escuadrón Volador

y se va de rositas.

¿En serio?

¿Estás seguro de eso?

Sin embargo, echamos mucho en falta al invitado de honor.

Al pequeño Niko.

Estoy segura de que vendría corriendo

si supiera que su padre está en peligro.

(RÍE MALVADAMENTE)

(Águilas)

¿Qué ha sido eso?

Es un arnés.

Han atacado al Escuadrón Volador.

Tengo que ir.

Lo siento, mamá.

Siento todo lo que ha pasado.

- ¡Niko! - ¡No!

¡Niko, vuelve!

Conozco a alguien que puede ayudarnos.

Me has leído el pensamiento.

(Música de misterio)

¡Ah!

(SUSPIRA) Eh.

No pensarás meterte ahí dentro tú solo, ¿no?

Eh.

No sabéis cuánto me agarro de veros.

¡Por qué habéis traído a Jonni?

Porque ha sido él quien ha ido a buscarme.

Siento interrumpir una reunión tan bonita, pero mirad eso.

El Escuadrón Volador debe estar atrapado dentro.

Tenemos que entrar como sea.

No sé si podremos despistarlas.

Tal vez pueda ayudar. No, Jonni.

Esto es muy peligroso.

Quiero que te vayas al bosque y que te escondas.

Pero...

¿Y si los atraigo yo?

¿Sí? Mientras las águilas me persiguen,

vosotros entráis en la fábrica.

Aún no se ve a nadie.

No tardará en llegar.

Confía en mí.

¿Ah?

¿Veis lo que os decía?

Los chicos buenos son muy predecibles.

¿A dónde van ahora? No.

La pregunta es, ¿a qué estamos esperando?

(Música de acción)

Esto es demasiado fácil. ¡Ah!

No, Jonni.

(Sigue la música)

¿Dónde está?

Mirad ahí abajo.

- Me pica la nariz. - Esa es la mía.

Sacadlos de ahí y yo pondré en marcha la fábrica.

Niko no tiene dónde esconderse.

¿Me buscabas a mí?

Pues aquí me tienes.

Eres realmente oportuno, Niko.

Creo que tendrás que pillarme.

(GRUÑE)

Vaya, esta es la pinta que tiene el Escuadrón Volador hoy en día.

- ¿Este no es...? - Tobias.

Una leyenda viviente.

- Un héroe.

- ¿Qué haces tú aquí?

¿Tú qué crees que puede hacer un héroe aquí?

Salvaros a todos.

(GRITAN)

Haz algo. Lo que sea.

Está bien.

Eso no. A ver esto.

(Quejidos)

(Sigue la música de acción)

(Quejidos)

(GRITAN)

(Alarma)

La fábrica. Volvamos a la fábrica.

¡Ay!

Qué pandilla de inútiles.

(Sigue la música de acción)

¿Eh?

¡Venid a ayudarme!

Ya vamos.

Venga, sácanos de aquí.

- Venga, Tobias. Puedes hacerlo.

- Ánimo, chicos. Os ha dejado la parte más fácil.

Empuja. No. Un momento.

Estira.

(Gritos)

Eh, chicos. Es Wilma.

Hola a todos.

De ese me encargo yo.

(Sigue la música)

¡Socorro!

¡Jonni!

Salta, Jonni. Yo te cogeré.

Confía en mí.

(RÍE)

Me haces cosquillas.

(GRITA)

Jonni.

(Quejidos)

¿Eh?

¿Jonni?

¿Te encuentras bien?

¿Jonni?

Despierta, por favor.

Ah.

¡Jonni, estás bien!

Bueno, he estado mejor.

(AMBOS) ¿Eh?

(GRUÑE)

Así que queréis jugar al escondite.

(ESTORNUDA)

(Música de acción)

Vamos.

Busca ayuda, irás más rápido sin mí.

Ni lo sueñes. No pienso volver a perderte de vista.

Jonni, cuidado.

¡Niko!

No sé cuánto tiempo podré mantener este ritmo.

Recuerda que eres un héroe.

Creo que necesitan una lección.

Larguémonos de aquí.

Uy, cómo lo echaba de menos.

Jonni.

¡Ey!

Lo siento.

Creo que está siendo demasiado difícil para ti.

(GRITA)

(Gruñido)

(Sigue la música)

Niko.

Jonni, cuidado.

¡No!

Mal empaquetado, pero aun así es el regalo perfecto.

He esperado mucho tiempo para disfrutar este momento.

Eh, chucho.

(SE BURLA)

Jonni, no.

Al final, con tantas emociones me había olvidado del aperitivo.

Jonni.

Está allí.

¿Qué hacéis vosotros aquí?

Solo queremos equilibrar un poco la partida.

Feliz Navidad...

Para mí.

¿Ah?

Buen trabajo.

¿También sabes cómo se abre?

Creo que sí.

Genial. Yo te diré cuándo.

Suéltame o te arrepentirás.

Ahora.

¡No!

Esto no quedará así.

Permíteme.

(BALBUCEA)

- Todavía no.

(BALBUCEA)

Retirada.

¿Retirada? ¿Qué significa eso?

No lo sé, pero no me quedaré a averiguarlo.

Toma esto, aguilucho despreciable.

(RÍEN)

Muy bien, equipo. Asunto arreglado.

(CANTAN) # La, la, la, la.

# Soy reno navideño # y vuelo con empeño.

# Jo, jó. #

Es hora de irse, chicos.

Y pensar que hay gente que a esto le llama las fiestas.

- Qué gracioso.

Tranquilo. Puedes acercarte un poco más.

Vaya. Es el mejor regalo de Navidad que podía tener.

Qué guay.

Niko, me alegro mucho de verte.

¿Quién es este jovencito que te acompaña?

Se llama Jonni.

Es mi hermano pequeño.

Encantado de conocerte, Jonni.

¿Y este es quien yo creo que es?

Me alegro mucho de volver a verte, viejo amigo.

Sí.

¡Jo, jo, jó!

¡Feliz Navidad a todo el mundo!

- ¡Jonni! - ¡Niko!

¡Mamá!

¡Papá!

Chicos, ¿estáis bien?

Muy bien.

Perdona, mamá.

Todo ha sido culpa mía.

Tendría que haber sido un buen hermano mayor

desde el principio.

Y siento no haberte dado una oportunidad, Lenni.

No eres un simple reno del tiempo.

Todas las familias tienen alegrías y problemas.

Así es como son las cosas.

Vendrán días buenos y también días malos.

Pero mientras sepamos pasar las tormentas juntos,

al final saldrá el sol y...

Vaya, es verdad que siempre estoy hablando del tiempo.

(TODOS RÍEN)

¡Tobias, espera!

¡Tobias, por favor, espera!

¿Por qué tienes que irte?

Había pensado que a lo mejor querías quedarte con nosotros.

Sé que te gusta vivir con las piedras y el musgo

sin que nadie te moleste, pero...

¿Pero qué dices?

¿Alguna vez has intentado hablar con una piedra?

Son peores que los árboles.

Si quieres, te lo explicaré todo de camino a casa.

Una vez hablé con una roca y me contó

que la mayoría de los árboles duermen como troncos.

¿Lo ves? Sujétala bien con los cuernos.

Inténtalo tú.

Sabía que lo harías muy bien.

Vamos.

Esto se está haciendo muy largo.

Ya lo creo. ¿Eso es normal?

Claro, no hay de qué preocuparse.

No hay nervioso para ponerse motivos...

Motivo para ponerse nerviosos.

Oíd, chicos.

Aquí hay a alguien a quien le gustaría conoceros.

Una carrera.

Velocidad Papá Noel. ¡Eh!

¿Desde cuándo corres tan rápido?

Saludad a vuestra hermanita, chicos.

Creo que ahora los dos somos hermanos mayores.

Eso parece.

Marchaos. Vuestra madre necesita descansar.

¿Quieres jugar al escondite conmigo?

¿Al escondite? Qué atrevido jovencito.

Te encontraré en un abrir y cerrar de ojos.

(RÍE)

(LLORA)

Es mejor que te de un poco el aire.

Bueno, parece que ahora somos una gran familia, ¿verdad?

¡Corazón alegre, Julius!

Corazón alegre, Niko.

Velocidad Papá Noel.

Vas a velocidad Papá Noel, Niko.

(Grito de felicidad)

# Navidad, navidad, dulce navidad.

# La alegría de este día # hay que festejar.

Ya estoy impaciente por que llegue la próxima Navidad.

- Yo también.

¿Crees que Papá Noel nos traerá algún regalo?

- Seguro que sí, este año nos hemos portado muy bien.

Entonces intentemos portarnos superbién durante el resto del año.

(TODOS) ¡Sí!

¿Tú qué piensas, querida?

(FORCEJEA)

"Te quiero mucho".

(TODOS) Oh, nosotros también te queremos.