(Música)

Y esta es una ecuación para averiguar

el número más aburrido que existe.

"Cuando el curso está a punto de terminar,

¿qué es lo que te apetece hacer?"

# Ya no hay más exámenes.

# Los pupitres vamos a girar.

# Final de curso, # ya se acabó,

# a divertirse, el verano llegó. #

¿Qué se supone que hacéis? Un gran número musical.

# No más comidas apestosas,

# nos vamos a surfear unas olas.

# Que os zurzan. #

En el nombre del Parque Nacional de Yellowstone,

¿qué estáis haciendo? Aún quedan cinco días de clase.

Lo sabemos, solo era un ensayo.

Si queremos que al final todo salga bien,

tenemos que practicar.

Vaya, demasiado pronto.

¡Soy alérgico al confeti!

El confeti es papel. Tú sí que eres papel.

¿De verdad acaba de decir eso? Da igual.

Ahora limpiad este...

Oh, no, una moto.

El cazarrecompensas ha conseguido encontrarme.

No, es parte de nuestra celebración.

Demasiado pronto.

Buen salto, Randy el insensato.

# Jorge y Berto hacen tebeos.

#Había un viejo director # que les decía "bla, bla, bla".

# Movieron, pues, un hipnoanillo # y le hicieron bailar.

# Y en Capitán Calzoncillos, # sin querer,

# se convirtió al final. #

¡Tatatachán!

# Con un chasquido se transforma, # aunque no es genial

# y recordad que si se moja # volveremos a empezar.

# Poniendo todo junto, # ¿qué podría salir mal?

# Aquí la canción # del Capitán Calzoncillos

# va a acabar. #

De Jorge Betanzos y Berto Henares.

"La endemoniada experiencia de los juegos finales, parte uno"

"Capítulo uno:

más vale una gota de miel que un litro de Gustavinagre.

Estos son Jorge Betanzos y Berto Henares.

Jorge es el de la izquierda, con corbata y pelo cepillo.

Berto, el de la derecha, con camiseta y pelazo.

Recordadlos bien.

Ah, y ese es Gustavo,

está a punto de hacer algo que nunca antes ha hecho,

decirles algo bueno a Jorge y a Berto".

Allá voy.

Yo...

Yo...

Esto...

Yo...

Quería felicitaros por convertiros en los mejores alumnos del colegio

y por...

¿Te importa? Perdona.

Por ser aceptados en la academia Éliteplusi.

Os confieso que no esperaba esto ni en mi peor pesadilla.

Ve acostumbrándote, Gustavo.

Hola, colega.

¿A ti también te han echado la perpetua?

No vamos a ir a Éliteplusi.

Claro, y si vosotros...

Si vosotros rechazáis la oferta, yo soy el próximo en la cola,

y si yo voy, nunca nos volveremos a ver,

que es lo que siempre hemos querido.

Correcto, y nosotros no vamos, ¿nos oyes?

¿Tenemos que decirlo más alto? En resumen, solo creo que...

Espera, ¿habéis dicho que no vais a ir?

¡Dame eso!

(GRITA)

Sí. Excelente.

Estamos de acuerdo. ¿Lo ponemos por escrito?

¿Tienes un... boli?

Bien, firmad aquí y aquí, las iniciales aquí y firma aquí,

firmad aquí, aquí y aquí y aquí y aquí y aquí y aquí y aquí, aquí,

las iniciales aquí, la firma aquí.

Es lo mejor, vosotros no sois lo suficientemente inteligentes

para Éliteplusi.

¿Te importa si revisamos esto?

Tomaos el tiempo que queráis,

pero lo quiero mañana a primera hora.

Buenos días, Gustavo.

Espera, ¿por qué lleváis los uniformes de Éliteplusi?

Hemos cambiado de opinión. Iremos.

Sí. Hemos estrenado estos bonitos uniformes

para que no nos rocenen el primer día en Éliteplusi,

porque ahí vamos.

¿Gustavo, estás bien, tío?

(GRITA)

(GRITA)

Jo, se lo ha tragado todo.

Cree que vamos a ir a Éliteplusi. Se la hemos metido bien.

Demasiado bien. Le ha estallado el cerebro.

¿Le decimos que solo era una broma?

No, que se enfade un poco.

Total, ¿qué nos va a pasar?

"Estos dos nunca aprenden".

Relájate, esos dos tarugos

no pueden ir a la academia Éliteplusi.

Ya es tarde, está hecho, no puedes cambiar el sistema.

Sí puedo. Yo soy el sistema.

Todavía faltan cinco días de clase y te queda el último recurso,

un examen final para tu clase

amañando para que recuperes el primer puesto

y obtengas esa invitación de Éliteplusi.

Los he llamado los juegos finales.

¿Qué tipo de examen? ¿Cálculo? ¿Física cuántica?

¿Historia de las guerras montadas?

Utilizaremos sus propias imaginaciones disparatadas

para destruirlos gracias a este ridículo tebeo.

"Capítulo dos: el Capitán Calzoncillos

y la mortal cúpula del destino. Por Jorge Betanzos y Berto Henares.

Una vez, el capitán fue al centro comercial

a comprar el nuevo álbum de Punt Force Mama,

porque de verdad habían encontrado su estilo.

Entonces, un bigotudo guay le dijo "¿quieres ir a un concierto

de Punt Force Mama? Regalaban entradas en el taller

de cambio de aceite". Y el capitán le dijo "Dame eso."

Tengo una entrada, tengo una entrada".

Así que se fue a la nueva "Esta cúpula no es una trampa"

pero en cuanto entró en la cúpula, las puertas se cerraron

porque sí que era una trampa y el bigotudo guay se convirtió

en el doctor Cascarrabias, un villano que había construido

una cúpula del destino para ser malvado.

Y el capitán le dijo "te has esforzado demasiado

para ser malvado", y el doctor Cascarrabias

"me gusta el drama. Me gusta el drama".

Entonces, agarró al cantante principal del grupo y...

Esperad un momento, me he perdido.

Vuelve hacia atrás.

Y el doctor Cascarrabias dijo "me gusta el drama".

Y agarró al cantante principal del grupo y huyó,

y el Capitán Calzoncillos gritó "¡No! Tiene la voz de un ángel

cuando están afónicos".

El Capitán Calzoncillos le persiguió,

pero Cascarrabias le tendió trampas, como una planta carnívora

llamada Malvadus trampus, un muelle enorme,

y las malolientes escaleras apestosas,

Dedos, el mezquino ladrón pantera,

y dardos somníferos contra los productos del grupo.

Pero Calzoncillos estaba preparado para todo por su ropa interior.

A uno le hizo "tictac", a otro, "flip flap",

y además le dio un repaso a las escaleras, y no,

esta no es mi carta, y atravesó las trampas como hacen los héroes.

Entonces, el doctor Cascarrabias dijo "el único modo

de salir de la cúpula es pulsar este botón rojo",

así que el capitán lo puso y el doctor Cascarrabias dijo

"debería haberlo hecho más difícil",

entonces el capitán liberó al cantante

y el grupo tocó todos sus temas, los dos,

y el capitán les dijo "Os compraría una camiseta".

Vale, fin".

¿Has hecho su cúpula del destino? Eso le da ventaja.

Eso creerán.

Creerán que van sobrados y se relajarán,

así que ventaja para Gustavo.

Es un plan terrible.

O es un plan brillante.

No, es terrible.

Seré un fracasado, una vergüenza, seré...

Serás yo.

Usa la bolsa.

Tarde.

Solo cinco días más y estaremos de camino al campamento de verano.

Lo único que hay que hacer es relajarse.

Y las maletas, ¿caca de broma? Aquí.

¿Caca de verdad? Aquí.

Espera, he olvidado etiquetarlas. No importa.

Bueno, ya está, las maletas hechas.

¿Y la ropa? Llevamos la misma todos los días.

Es verdad.

Ya no hay nada que puede evitar

que vayamos al campamento de verano.

"Deberían dejar de decir cosas como esa.

Capítulo tres: jugando en casa"

Mira, la cúpula del destino de los juegos finales 2000.

Este es el patio.

No he pulsado el botón.

Debe haberte costado millones.

Sí, pero vengo del futuro,

es fácil ganar dinero cuando sabes predecirlo.

¡He ganado otra vez!

Soy el campeón del bingo.

Costeado con dinero del bingo.

¿Juegos patrocinados por Piquasaurio Pizza?

Sí, necesito un patrocinador para pagar los costes de Éliteplusi.

Esa cúpula es la respuesta a nuestros problemas.

No, es el problema.

Esa cúpula está llena de obstáculos físicos.

¿Cómo voy a superarlos?

Si me cansa sacarle punta a un lápiz.

Resulta que ya no.

¡Me has disparado!

Tranquilo, solo he inyectado nanobots en tu riego sanguíneo.

"Los nanobots son robots microscópicos, ¿los veis saludar?

No, claro que no. Porque son tan pequeños que son invisibles".

¿Estás loco?

¿Sabes lo que eso puede hacerle a un niño en desarrollo como yo?

Sé exactamente lo que puede hacer.

Ahora levanta ese coche. No seas ridículo.

Que lo levantes.

¡Lo he hecho!

Sí.

Los nanobots te proporcionan habilidades físicas superiores

que controlas con mi aplicación, el Nanolímites 2000.

Mientras Jorge y Berto se duermen en los laureles,

tú vas hacia la victoria. Somos geniales.

Así es.

No vuelvas a hacerlo.

Os preguntaréis por qué estáis en una cúpula o de dónde ha salido

y quién la ha pagado, o cómo se ha construido en secreto.

¿No había una cúpula como esta en uno de nuestros cómics?

"El Capitán calzoncillos y la mortal cúpula del destino"

Es verdad. El del doctor Cascarrabias.

Como iba diciendo, este año haremos un examen final

de todo el cuarto curso. (TODOS) Oh, no.

-Para aprobar, lo único que debéis hacer es pulsar un botón rojo.

(TODOS) ¡Hurra!

-Tras completar un peligroso circuito de obstáculos.

(TODOS) Oh, no.

-Pero el primero que lo pulse se llevará un 10.

(TODOS) ¡Hurra! -Y todos los demás, un cero.

(TODOS) Oh, no.

-Pero podéis coger toda la pizza que queráis,

cortesía de Piquasaurio Pizza. ¡Hurra!

Genial, si suspendemos,

nuestra nota bajará y nos quedaremos sin campamento.

Tenemos que ganar. Lo teníamos tan cerca...

¿Por qué nuestra vida no es más fácil?

"Porque no nos interesaría".

Estoy cansado de ganar.

¿Por qué nuestra vida no es más difícil?

Si os rendís ya,

podéis ahorraros la humillación de la terrible derrota frente a mí.

¿Qué? Tú no podrías atravesar ese circuito,

aunque montaras a caballito encima de un tirolés

con piernas de hierro.

No sabéis lo equivocados que estáis, rollitos de primavera.

Soy el árbitro y estas son las reglas.

Una, cero ayuda de fuera o estáis descalificados.

Dos, largaos de aquí

para que me pueda terminar esta pizza. O sea, empezad.

(SILBA)

¿Por qué va silbando? Se trama algo, te lo digo yo.

Siempre trama algo y siempre le ganamos.

Espera, eso es una Malvadus trampus.

"Malvadus trampus". No podemos perder.

Claro, todo esto fue idea nuestra.

Es como tener una chuleta con todas las respuestas.

Zigzag, zigzag.

¡Sofía uno! Ay, no.

Otrasofía... Bueno.

Espera. ¡Dios mío!

Ahora me quedado sin Sofías.

Como te llames y seas quien seas, eliminadas.

Bienvenidas a Piquasaurio Pizza, patrocinador de los juegos.

Somos dinosaurios y hacemos pizza, por ahora,

pero si este patrocinio no atrae clientela, se nos acaba el negocio.

-Bueno, al menos seguiremos vivos si no ganamos.

Están cayendo como moscas. ¿Deberíamos salvarlos?

¿De la pizza? Están bien.

Y tenemos que concentrar nuestros esfuerzos en el campamento

Sí, casi se me había olvidado.

Pero nosotros creamos la cúpula, así que será fácil.

Hay una gran diferencia entre fantasía y realidad,

por ejemplo, pulsar el botón rojo es una fantasía para vosotros.

Para mí, es una realidad.

Esto está chupado.

"¿En serio? Ya vale.

Capítulo cuatro: cuando estés en Roma..."

El muelle enorme. "¡El muelle enorme!"

¿Recuerdas en qué baldosas había que pisar?

Yo sí, pero ellos no.

¡Estoy volando!

El chico de las gafas, eliminado.

Izquierda, derecha, izquierda, salta.

Seguro que a Gustavo lo lanza un muelle.

Mira, allí va el muy tonto.

Habláis demasiado.

Ha superado el obstáculo.

No te preocupes, la suerte del empollón.

Ahora que estoy aquí, espero que los pájaros

me acepten como uno más.

-El seguro no cubrirá eso.

Empiezo a pensar que eso ha sido una mala idea.

Estas malolientes escaleras apestosas son mejores

de lo que imaginaba. "Malolientes escaleras apestosas".

Sí. Han clavado la parte de la peste

que venía de los calcetines.

Aspirantes a zoquetes, todavía tenéis mucho que mejorar.

Disfrutad de la pizza, perdedores.

¿Por qué no deja de mirar el móvil?

Quizás está viendo videos de fitness.

Estas escaleras dan asco y huelen como una furgoneta.

Sofía uno, encuentra las mecánicas.

Otrasofía...

Espera, sigo sin tener Sofías.

(GRITA)

¡Esto es tu culpa, Otrasofía, aunque ni siquiera estés aquí!

La chica cruel del pelo, eliminada.

Mira, es Dedos, el mezquino ladrón pantera.

"Dedos, el mezquino ladrón pantera"

¿Queréis cruzar el puente?

Lo único que tenéis que hacer es seguir la bola.

Da vueltas y vueltas.

¿Dónde para? Nadie lo sabe.

Dedos es muy astuto, hay que mantener la calma.

¿Por qué lo pusimos en el cómic? Tenías fiebre.

La bola está ahí.

Bola.

¡Me han timado!

Eliminada y eliminado.

Tío, voy a necesitar un techo nuevo.

-¿Dónde se esconde la bola traviesa?

En esa. No, en esa.

Os equivocáis.

Las manos quietas, niño. Dedos trabaja solo.

Gustavo a por la victoria.

Vale, seguro que pasa algo raro con Gustavo y ese teléfono.

Sí. Nunca antes ha sido capaz de levantar panteras.

Llegará antes al botón rojo y entonces,

en lugar de al campamento de verano,

iremos a la tienda de tiendas.

Tenemos que quitarle el móvil

y conozco a la pantera perfecta para ello.

Hora de trampear al tramposo.

"Capítulo cinco: la cúpula de la esperanza"

(Móvil)

Estás demasiado cerca.

¿Y ahora? Quita el dedo de la cámara.

Me dijiste que estaba amañado,

pero Jorge y Berto me pisan los talones.

Vale, lo admito, sí, es verdad,

puede que hacer la cúpula del destino exactamente

como esos dos la pensaron quizá fuera un error.

Por suerte, tengo unos pocos obstáculos más para emergencias.

Estoy perdido.

Ten un poco de fe. Vale, el primero es un...

No se oye y no te entiendo.

Le has dado a silenciar. Silenciar.

¿Cómo no sabes usar un móvil?

¿Qué haces, tomarte un descanso de sus trampas?

Si la vida te da una cúpula, domínala.

No, solo es limonada. ¿Queréis?

¿De ti? Nada. Yo quiero una.

Que sean dos. Qué pena, solo tengo para mí.

Típico. Sabemos que haces trampa.

Ayer necesitabas ayuda para cerrar unas tijeras

y ahora eres como un tirolés con piernas de hierro.

Yo no hago trampas.

Tengo nanobots que mejoran mi rendimiento en las venas

y lo controlo con una aplicación, la Nanolímites 2000.

¿Por qué nos lo cuentas todo ahora?

Alguien debe hacerlo. "No necesariamente."

Entonces lo admites, haces trampa. No admito nada.

Las reglas lo dicen claramente. Sin ayuda de fuera.

Y como los nanobots están dentro de mi cuerpo, son ayuda de adentro.

Tecnicismos. No importa, aun así ganaremos,

porque nosotros creamos todo lo que hay aquí.

Todo no. El futuro yo os ha organizado una fiesta sorpresa.

Me encantan las sorpresas. ¿Quién viene?

Solo vuestros peores enemigos.

Voy a retirar lo de que me encantan las sorpresas.

Estamos rodeados por todos los monstruos

a los que nos hemos enfrentado. eso no estaba en nuestro cómic.

Pues debería. Esto es genial. Sí. Porque ahora voy a ganar

y vosotros estáis a punto de ser destruidos.

Bueno, ya está, se acabó.

No sé, hay algo en estos monstruos que me huele muy mal.

Ese olor de Boñiga de cabra, ¿recuerdas?

Y Atascaretretes, y Vertidoso, y Calcetínpulpo,

la momia de papel... Bueno, todos olían bastante mal.

Por eso lo digo. Yo no huelo nada. Quédate aquí.

¿Dónde vas?

¡Jorge, no, eres joven!

Aún es peor, son monstruos fantasma.

Hologramas.

Es una lástima, habría sido una buena batalla.

¿Crees que Dedos tendrá ya el móvil?

¿Este móvil?

Como le dije a ese chico, las manos quietas.

Ahora apagaremos los nanochismes y...

O se lo ponemos a tope a ver qué pasa.

Sí, eso suena más divertido.

No pasa nada. Menudo timo.

Por favor, que sea otro holograma.

No, ese es el de verdad.

Oh, no, los nanobots se han vuelto locos...

Me han convertido en un... ¡Nanoempollón!

Gran nombre.

Pero mejor apagamos esto antes de que nos apague él.

Vosotros me habéis convertido en un monstruo

y además me habéis quitado el móvil.

Ellos no.

No, se ha recalentado. Deja un comentario negativo.

Lo siento mucho, Gustavo. Ya es demasiado tarde.

Usaré esto a mi favor.

No hay nada que podáis hacer para evitar que gane los juegos.

Mira, ¿eso es otro Nanoempollón? ¿Dónde?

Lo único que hay son árboles y un nido

y esa ardilla y ese otro nido y...

Me las pagarán.

Por fin, un lugar donde puedo zampar pizza tranquilo.

¡Señor Carrasquilla!

Ocupado, ocupado. ¿Por qué no habéis llamado?

Porque no ha puesto el pestillo. No veo nada.

¿Y por qué está comiendo pizza en el váter?

Porque no puedo contenerme y tengo un problema.

Ayuda, por favor.

No tenemos tiempo.

¿Esto es un árbol de pizza?

"Inodoro cedido por Piquasaurio Pizza."

"Compren pizza del culo."

Qué bueno.

Sí, pero volvamos a centrarnos en ganar a ese nanoempollón.

No podéis ganarme.

Nanonadie puede.

Mira, globo parlante de feria,

tengo un árbol de pizza que recolectar,

así que arreglemos esto nano a mano.

Capítulo seis: el capítulo de la violencia súper gráfica.

Presentado en pizzaorama.

Porque luchar es violento, pero la pizza es deliciosa.

Tengo una media Capitán Calzoncillos, media nanoempollón

y está que arde, quizá demasiado.

Esta es un cuarto calzoncillos 3/4 gafas y pajaritas.

Esos ingredientes de empollón tienen algo contra los calzones.

Última llamada para una empollonada suprema

con un toque de calzoncillos. Mala suerte, calzones.

Pizza, necesito pizza.

Tras este pepperoni, mejor que te prepares.

Más pizza. Extra de queso.

Y una hawaiana. La pizza no funciona, hora de huir.

No te pares, lo perderemos en el bosque.

¡Una chaqueta de la gira de Punt Force Mama

atada a un cable! Qué guay.

No, es una trampa de nuestro cómic.

¿No se acaba de volver todo muy lento?

O sea, muy lento.

Los dardos somníferos, ¿en qué estábamos pensando?

Sí, fue un día flojo, pero no hay tiempo.

No sé cuánto tiempo podrá retrasar Dedos al nanoempollón.

¿Es esta tu carta? Por última vez, no.

Vale. ¿Es este tu reloj?

Un barranco. No hay escapatoria.

Lo hemos perdido.

No temáis, yo lo encontraré. ¡Aquí, nano, nano!

¡No, espera! ¡Bingo!

Se acabó.

Cuando os deje tirados en ese nido de águilas,

pulsaré el botón rojo

y yo iré a la academia Éliteplusi en vuestro lugar.

Espera, nosotros no queremos ir a Éliteplusi.

Era una broma por llamarnos tontos.

Sí. Tan solo queremos ir al campamento.

¿En serio?

Chicos, he encontrado pizza de tierra.

Sabéis que, me he equivocado, es solo tierra.

¿Por qué no lo habéis dicho antes?

No nos has dado tiempo.

Entonces, si vais al campamento de verano,

¿no iréis a Éliteplusi y no nos veremos nunca más?

Claro. Hecho.

¿De verdad? Pues claro.

No soy un monstruo. (GRITA)

¿Te acabas de auto electrocutar?

No tenía elección,

pero ya estamos seguros gracias a mi Nanopuedeser 2000.

Era el único modo de parar la epidemia de nanobots

que liberasteis en mí, aumentando los nanobots al máximo.

Si aumentarlos al máximo hace eso, ¿por qué lo has puesto

como una opción?

¿Y por qué has construido la cúpula de nuestro cómic?

Ha habido errores, muchos errores. Hay muchas culpas que repartir,

pero la cosa es que me he deshecho de los nanobots, a no ser, claro,

que el shock los haya llevado a otro anfitrión como la cúpula...

Vamos, solo hay un cuatro por ciento de posibilidades.

Oh no.

Si quisiera un final con suspense, lo colocaría justo aquí.