A Bella se le ocurre hacer un concierto en el café de Rikki para recaudar fondos para el programa de rescate de delfines, pero Sophie le roba la idea y se la presenta a Rikki y Zane, que alaban su iniciativa. Pero pronto se desvelan las verdaderas intenciones de Sophie.

Cleo encuentra un cristal inusual en una roca del estanque de la luna. Es idéntica a la que tiene Bella en su collar y que ella encontró en el estanque de luna donde se transformó.

Don y Sam se casan al tiempo que Lewis debe darle una terrible noticia a Cleo. Kim, la hermana de Cleo, hace todo lo que puede por boicotear la boda, que resulta un desastre. 

En el cumpleaños de Rikki, Cleo y Bella van al estanque de Luna para hacerle un regalo usando sus poderes: una elegante estatuilla que Sophie encuentra extraña y sospechosa.

La hermana despiadada de Will, Sophie, lo está entrenando para ser un buzo profesional, solo que él preferiría pasar el tiempo nadando con Bella. Sophie le pide a Bella que se mantenga alejada de Will, pero Bella no lo hace porque tiene que asegurarse de que Will le guarda el secreto.

Will está convencido de la conexión entre Bella, Mako, el agua y la luna llena. Bella se siente presionada y decide apartarle de su vida. Pero cuando va a despedirse de él, Will deliberadamente le echa agua en la mano.

A escondidas de Lewis, Cleo ha guardado una pequeña muestra de la mezcla de agua de la cueva para experimentar con ella a sus anchas. Consigue que su padre y Lewis salgan de casa y avisa a Bella, Rikki. El experimento se complica y Will será testigo de comportamientos demasiado extraños.

Las chicas se preparan para dormir en casa de Cleo por la luna llena y así tratar de protegerse de cualquier ataque de agua. Lewis hace los preparativos a su propia manera mediante la instalación de cámaras en la caverna del estanque de Luna en un intento de filmar el tentáculo de agua misteriosa.

Rikki acepta a Bella como nueva camarera pero, por su parte Zane ha aceptado a Sophie, la hermana de Will, que ha puesto sus ojos sobre Zane. Don, el padre de Cleo, organiza un día en la playa para que sus hijas conozcan mejor a Sam, su novia.

Bella se decepciona al descubrir que Will está con otra chica. Cleo ayuda a Lewis con un proyecto de ciencias, replicando el efecto del agua de Mako. A pesar de los consejos de Rikki, Bella se arriesga y sigue a Will cuando este va a bucear con su chica.

Cleo y Lewis descubren qué le ocurre al agua de la laguna de Mako cuando se mezcla con el agua de la cascada de la cueva. Zane organiza una carrera para recaudar fondos porque están en bancarrota. Rikki está en contra de sus métodos, sobre todo cuando descubre que Zane hace trampas.

Bella anima a Cleo a presentarse como ayudante del adiestrador de Ronnie, pero Rikki cree que es peligroso. Will ha hecho buena amistad con Ronnie y aconseja a Cleo que se meta en el agua porque solo nadando con el delfín podrá adiestrarlo. Cleo lo sabe, pero meterse en el agua es imposible.

Comienza el instituto y es el primer día para Bella, que ya se ha hecho amiga de las sirenas y para Will, que les pide ayuda para llegar a Mako; quiere descubrir el misterio de lo que le ocurrió con el tentáculo de agua en la cueva de la luna. Allí se encontrarán todos.

Zane ha comprado el JuiceNet y lo dirige con Rikki. Esta noche es el estreno, pero hay luna llena y algo extraño le está sucediendo al agua. Una fuerza surge en la laguna de Mako y sale hacia el JuiceNet, allí atrapa a Rikki y la arrastra hacia Mako.

Hoy hay luna llena y las chicas previenen a Charlotte, que reacciona con agresividad. Lewis distrae la ira de Charlotte contra las chicas y la lleva al estanque de la luna porque Lewis sabe que esta será una noche de luna llena muy distinta a otras.

Charlotte prohíbe a Lewis hablar con las sirenas y ellas deciden apartarse de Lewis. Charlotte se enfrenta a Cleo con sus poderes y le arranca el colgante que era de su abuela.

Charlotte se cree mejor que las demás sirenas; no ha tardado en controlar sus poderes y ahora decide ser ella quien organice el cumpleaños de Lewis: una fiesta sorpresa en su casa. Rikki se distancia del grupo. Charlotte no es buena compañera, es egoísta y manipuladora. Se va a quedar sola.

Charlotte no acepta la ayuda de las sirenas porque cree que lo que quieren es limitar sus poderes. Lewis la ayuda a superar su miedo a los delfines pero Charlotte no tiene control sobre sus poderes y su imprudencia pone en peligro a las demás.

Las sirenas no van a aceptar fácilmente que Charlotte sea ahora una de ellas, y mucho menos cuando descubran cuál es su poder. Rikki no está dispuesta a aceptarla en el grupo y será Cleo quien interceda por ella.

Charlotte está decidida a averiguar si fue o no su abuela realmente una sirena y sigue a Lewis cuando este le devuelve la investigación a Max. Max, encantado de conocerla, no le oculta la verdad. Charlotte se dirige a la isla de Mako y hoy hay luna llena. Las sirenas se protegen en casa de Cleo.

Buscando en las notas de la investigación de Max de la isla Mako, las chicas descubren un viejo rollo de película y una fotografía de su amada Gracie.

Lewis investiga el magnetismo de Mako y descubre que hace cincuenta años un tal Max Hamilton también lo hizo. Lewis localiza a Max y este le pide que le lleve a la isla de Mako, a cambio de enseñarle su estudio. Allí, en el estanque de la luna, se encuentran inesperadamente con Cleo. 

Cleo quiere celebrar el primer año de sirenas con sus dos amigas. Lewis la ayuda a preparar la cueva en Mako y luego va a su cita con Charlotte. Lewis encuentra en el JuiceNet un enfrentamiento entre Zane y Ash, y entre Rikki y Emma, que han olvidado lo importante: la cita con Cleo.

Rikki y Cleo animan Ash para que se lance con Emma y así se presenta por sorpresa esta noche en casa de Emma, donde las tres van a pasar la luna llena. Cuando Ash llega, Cleo le abre la puerta y ahí empieza todo. Rikki y Cleo quieren que Emma le cuente su secreto a Ash para que puedan ser novios.

Lewis tiene pesadillas porque se preocupa por Cleo y no puede estar con ella para protegerla. Eliott le pide consejo a Lewis para pedirle salir a Kim, algo que pilla a todos por sorpresa. Cleo y Lewis serán sus carabinas y también disfrutarán de una tarde como las de antes. 

Zane consigue ámbar gris, una sustancia que atrae a las sirenas y que resulta ser un perfume insoportable del que todos huyen. Zane y Lewis abandonan el perfume sobre una mesa y Nate lo encuentra y se lo echa. Todos huyen de Nate excepto las sirenas, que se enamoran locamente de él. 

Cleo echa de menos a Lewis y utilizará sus armas de sirena para no perderle. Charlotte va a pasar momentos muy incómodos. Emma se reencuentra con Ash, que va a comenzar a estudiar en su instituto pero lo peor de todo es que va a trabajar en el JuiceNet y va a ser su jefe.

Emma se corta sin querer al recoger un coral para la pecera de Héctor, el pez de Cleo. Poco después, Emma y Héctor sufren cambios de comportamiento. Emma no puede parar de comer pescado y Héctor salta fuera de su pecera.

Zane propone a Rikki buscar el tesoro hundido de un yate por el que ofrecen una gran recompensa. Rikki tiene dudas pero termina aceptando. El problema es que necesitan ayuda y Rikki pide ayuda a sus amigas sin contarles toda la verdad.