# Mil aventuras te están esperando # aquí.

# Ven con nosotros # al refugio de Audrey. #

¡Oh!

Hola, Audrey. Oye, ¿Qué hacen aquí los del zoo?

¡Hola!

Una tormenta ha inundado el hábitat del oso panda en el zoo.

Y, hasta que vacíen toda el agua,

van a poner el panda en manos de la mejor zoóloga del mundo.

Espera, ¿te refieres a tu madre?

(Motor)

(RÍE) (RÍE)

¡Oh! ¡Hala!

¡Es un panda gigante de verdad!

Es casi imposible ver uno de estos fuera de China.

¡Eh, eh! Por favor, respetad el perímetro de seguridad

o lo asustaréis.

Niños, este es Damián, el inspector animal encargado de Huan.

Está aquí para asegurarse de que cuidemos bien de nuestro panda.

Hmm.

Por supuesto que cuidaremos bien de él.

Eso es lo que hacemos en el refugio.

Los pandas gigantes no son como los demás animales.

Son un tesoro nacional de China.

Estoy aquí para velar por su seguridad,

asegurándome de que cumpláis los protocolos

al pie de la letra.

No se preocupe, Damián.

Estoy segura de que Huan estará muy a gusto aquí en el refugio.

Hmm. Eso espero.

Porque si no se aclimata, tendremos que enviarlo de vuelta a China.

Pat ha terminado de preparar un hábitat para Huan.

Vayamos a verlo.

(PAT) Aquí está bien.

Mira eso.

Con un hábitat así, Huan va a ser la envidia de los demás animales.

Hemos intentado replicar todos los detalles de su hábitat en el zoo.

Hmm.

(GRITA) ¿Todos los detalles?

Pues este no lo recuerdo.

Es nuevo.

En el zoo le faltaba algún equipamiento lúdico.

Así que hemos añadido varios juegos.

Hmm. Pues tendrán que quitarlos.

Las distracciones adicionales solo serán un trastorno.

A partir de ahora, hagamos las cosas más sencillas.

Pero... ¡Por supuesto!

Haremos todo lo que haga falta con tal de cuidar bien de Huan.

Bien. Veamos cómo reacciona Huan.

¡Oh! ¡Oh!

(GRITA)

No es un buen comienzo.

Huan no se siente suficientemente seguro para salir de su jaula.

Hola, Huan.

Hmm. Acaba de llegar.

Dele un poco de tiempo.

La cuestión es que no tenemos tiempo.

(Alarma)

¡Ah! La hora de comer.

A ver, ¿dónde está el bambú, por favor?

Por allí. Pat le acompañará.

Podéis quedaros con Huan, pero no os acerquéis demasiado.

No quiero hacer nada que moleste a Damián, ¿entendido?

Hmm. Hmm.

Hola, Jack.

(CHILLA)

Este es Huan, un panda.

(CHILLA)

(GIME)

(OLISQUEA)

(CHILLA)

¡Guau! ¡Buen trabajo!

(GIME)

(CHILLA)

Nuestro jardinero, Jonas,

instaló este bosquecillo de bambú

tan pronto como supimos que iba a venir Huan.

Oh. Hola, Jonas.

¿Qué estás haciendo?

(Música suave)

Estoy tocando música para ayudar a los bambús a crecer, obviamente.

Hmm.

Esperen, este bambú es de la provincia de Hubei.

Mis instrucciones especificaban que fuera bambú de Sichuán.

Sí. Pero este sabe más rico y es más nutritivo.

A los pandas les encanta.

Huan come bambú de Sichuán.

El bambú representa el 99 % de la dieta de los pandas gigantes.

Puede provocarle dolor de estómago.

Que no, hombre.

Este es perfecto para el estómago de los pandas.

Hasta preparo té de bambú.

Oh... Está bien. Tendremos que conformarnos con este.

Ese tío del zoo está un poco tenso.

Le vendría bien un té de bambú.

(CHILLA)

¿Ves, Huan? Ya tienes un amigo en el refugio.

(RÍE) (RÍE)

(GRITA)

¿Así es como su refugio protege a los animales?

¿Dejando que los niños y los gorilas los asusten?

¡Esto es un escándalo!

(GRUÑE)

Niños, os dije que no os acercarais demasiado.

Pero, mamá, estaba triste y solo.

Si Huan no se adapta al refugio, tendrá que volver a China.

Si queréis que se quede, hay que seguir las instrucciones de Damián.

¿Queda claro?

(Alarma)

Ya basta. ¿Debo recordarles que Huan sigue aún sin comer?

Tenemos un horario que cumplir.

(OLISQUEA)

Deberíamos acercarle el bambú.

Los pandas tienen problemas de visión.

¿Señor Damián?

Creo que eso no es buena idea.

Aquí dejamos que los animales hagan las cosas a su propio ritmo.

(GRUÑE)

Como me suponía, a Huan no le gusta este tipo de bambú.

Está claro que tendré que traer del que tenemos en el zoo.

Ay... El problema aquí no es el bambú.

(Alarma)

¡Ah! Es hora de hacer ejercicio.

Los pandas deben mantenerse en forma.

Pueden tentar a Huan con una manzana para que camine.

Con diez vueltas bastaría.

Coge la manzana, Huan.

Vamos... Vamos...

¿No se da cuenta de que está estresando a Huan?

Me estás dejando en ridículo.

Vamos. Vamos. ¡vamos!

(GRUÑE)

(GRUÑE)

(GRUÑE)

Se acabó.

Todo el mundo fuera. Huan necesita espacio.

Nunca había visto a Huan así.

Está claro que este refugio no es de su agrado.

Habrá que enviarlo a China.

¿Qué? Pero eso no es justo.

Tiene que darle tiempo para que se acostumbre a nosotros.

Mi hija tiene razón, Damián.

¿No le parece precipitado tirar la toalla tan pronto?

Ah... No. Han incumplido el protocolo demasiadas veces.

Métanlo en su jaula mientras organizo la recogida.

Mamá, no podemos rendirnos ya.

Estoy segura que Huan puede ser feliz aquí.

Ajá. Sí. Sí.

Estamos de acuerdo.

Por eso Pat y yo vamos a distraer a Damián

mientras vosotros usáis vuestra magia con Huan.

Entendido.

Ajá. Sí. Adiós.

He llamado a la camioneta. Llegarán enseguida.

Mientras esperamos,

¿le enseñamos nuestros comederos último modelo?

No sé si tengo tiempo.

(PAT) Oh, insistimos. Acompáñenos.

Hola, Huan. Vamos a divertirnos.

Después de todo lo que ha pasado,

no me extraña que ya no confíe en nadie.

Espera. Hay un animal en quien sí confía.

¡Jack!

¿Jack? ¿Jack?

Ven aquí, amigo.

(CHILLA)

Jack, tienes que ayudarnos con Huan.

(CHILLA)

(GIME)

Eso es, Jack. Tráelo hacia aquí.

(GIME)

(GIME)

Bien hecho, Huan. No tengas miedo.

(GIME)

(RÍE) (RÍE)

No lo entiendo.

A mí me parecen comederos de lo más corrientes.

Son muy especiales.

Como nuestras cámaras de visión nocturna.

Vigilamos a nuestros animales, día y noche.

(Alarma)

¡Ya es suficiente!

Tengo que enviar un panda de vuelta a China.

¡Espere! ¿No le gustaría ver la clínica?

¿O tomar un té de bambú?

¡Oh! ¿Quién ha dejado la puerta abierta?

¡Huan! ¡Huan! ¡Ha desaparecido!

Bloqueen todas las salidas, llamen a los bomberos.

No se preocupe. Está a salvo con Audrey y Tommy.

¿Qué? ¡Huan! ¡Huan!

(Risas)

Ya es sufi...

¿Qué? ¿Qué?

¿Cómo han hecho eso?

Hola, mamá.

Mi hija se ha criado aquí, con los animales.

Esa niña nunca deja de sorprendernos.

¿Eh? Pero ¿Huan no tiene miedo de vosotros?

¿Qué habéis hecho?

Ni siquiera con el manual he podido conseguir algo así.

No necesita ningún manual.

Solo tiene que prestarle un poco de atención.

(RÍE) (RÍE)

(GIME)

¿Quiere darle de comer?

Ah... No debería.

Recordad lo que pasó la última vez.

Solo debe tener paciencia

y demostrarle que puede confiar en usted.

Disculpad. Tengo que hacer otra llamada.

Hmm. Sí. Sí.

Hmm. Bueno, ya está.

Le he asegurado al director del zoo que Huan está en buenas manos.

Aquí se queda.

(TODOS) ¡sí!

(Alarma)

¡Ah! Es hora de...

Es... hora de irme. Sonia, ¿me acompaña a la salida?

Por supuesto.

Niños, ¿podéis llevar a Huan hasta su hábitat?

No hace falta, de verdad.

Sé que en el refugio estará a salvo.

Estaba convencida de que Damián iba a llevarse a Huan.

Pero es bastante majo, en realidad.

Oh, oh.