José Antonio Vivot Undabarrena, de 49 años y exalcalde de Olaberria (Guipúzcoa), su localidad natal, estaba casado y con cinco hijos. Era jefe de personal de una empresa cuando fue asesinado el 6 de febrero de 1979. Tras secuestrar un coche en Beasain y atar a un árbol a su dueño, los terroristas se personaron en la casa de Vivot. Tras acceder por la fuerza, arrancaron el cable del teléfono y amenazaron con sus armas a la familia de José Antonio, a quien se llevaron contra su voluntad y ejecutaron de tres disparos en el portal.
El 25 de abril de 1988, Mercedes Galdós Arsuaga, autora material del asesinato, fue juzgada y condenada a 29 años de prisión mayor. Félix Ramón Gil Ostoaga, su acompañante, fue también condenado a 29 años de prisión mayor y al pago solidario, junto a Galdós, de una indemnización económica a los herederos de la víctima.