Juan de Dios Doval Mateos, madrileño de 37 años, casado y con dos hijos, era doctor en Derecho y profesor adjunto de Derecho Procesal en la Facultad de San Sebastián, y dirigía, además, la gestoría de su hermano. Miembro del Comité Ejecutivo de Guipúzcoa de UCD, en el que había entrado un año antes, había ocupoado el segundo puesto de la candidatura en esa provincia en las anteriores elecciones. ETA político militar lo mató el 31 de octubre de 1980, apenas una semana después de asesinar a Jaime Arrese Arizmendiarrieta.
Juan de Dios salió de su casa y, al entrar en su coche para dirigirse al trabajo, dos terroristas le dispararon tres veces. Los asesinos huyeron en un coche robado en el que les esperaba otro etarra.
El sacerdote jesuita Antonio Beristain, compañero de Doval en la universidad, contó en Gaceta Universitaria que Doval, la víspera de su muerte, le dijo a su secretaria: “Reza por mí”. Ella le recomendó que abandonara, pero replicó: “No quiero que mis hijos piensen que soy un cobarde.” El día posterior a su asesinato se paró la actividad de la Facultad de Derecho y unos 300 alumnos y profesores se manifestaron de forma silenciosa desde la facultad hasta la Diputación Foral de Guipúzcoa.
Véase también Jaime Arrese Arizmendiarrieta.