Juan Merino Antúnez, de 21 años, estaba casado y era natural de la localidad asturiana de Llanes. Murió tiroteado junto a su compañero, Antonio Jesús Trujillo Comino, cuando realizaban un servicio de vigilancia en la Delegación de Hacienda de San Sebastián el 9 de julio de 1985. Merino y Trujillo, recién salidos del madrileño Colegio de Guardias Jóvenes de Valdemoro y con apenas dos meses en el País Vasco, estaban en el interior de un coche estacionado cuando dos etarras se acercaron por ambas ventanillas delanteras y les dispararon en la cabeza, el cuello y los hombros. Murieron en el acto.
Véase también Antonio Jesús Trujillo Comino.