El guardia civil José Carlos Marrero Sanabria, de 28 años, natural de Las Palmas de Gran Canaria, era integrante de los Grupos Antiterroristas Rurales (GAR).
El 28 de junio, sobre las 8:30 horas, participaba en un convoy del GAR que transitaba por el Alto de Meagas, en Zarautz, para inspeccionar la zona, cuando un artefacto explosivo, colocado junto a la calzada y activado a distancia, estalló en el momento en que pasaba el vehículo en el que viajaba Marrero.
La explosión mató en el acto al guardia civil Francisco Muriel Muñoz y resultaron heridos los guardias José Carlos Marrero Sanabria, Manuel Ángel Arenal Linares, Juan Carlos Carballo Gañán, José María Baltasar Gil, Ramón Perona Sánchez y Luis Pérez Bao.
El agente Marrero Sanabria sufrió insuficiencia respiratoria y shock traumático que le causaron una grave lesión cerebral. Fue ingresado en un centro psiquiátrico, pero murió dos años más tarde, el 10 de enero de 1988, tras quitarle la pistola a un compañero del Instituto Armado que le visitaba y suicidarse de un tiro en la cabeza.
Véase el relato completo del atentado en Francisco Muriel Muñoz.