Engraciano González Macho, de 41 años, era natural de la localidad vizcaína de Ondarroa. Estaba casado y tenía dos hijos. Hacía seis meses que había abierto el pub Antxi en Zarautz.
El 22 de diciembre, sobre las 20:00 horas, el etarra Juan Carlos Balerdi entró en el local y pidió una consumición. Después le disparó dos tiros en la cabeza y le mató en el acto. Otro etarra le esperaba fuera del establecimiento y un tercero les aguardaba en un coche para salir huyendo. ETA justificó el crimen relacionando a Engraciano con el tráfico de drogas.
Los terroristas Juan Carlos Balerdi Iturralde, Fermín Urdiain Ciriza y Jesús María Ciganda Sarratea fueron condenados, como autores del asesinato, a penas de 30 años de reclusión mayor cada uno. José Cándido Zubicaray Badiola y José María Beristain Urbieta, por cooperación necesaria, fueron condenados a 27 años de reclusión mayor cada uno. Los cinco terroristas debían indemnizar conjunta y solidariamente a los herederos legales de la víctima.