El guardia civil Diego Salvà Lezáun, de 27 años, sobrevivió a un accidente de motocicleta que le dejó en coma 23 días. Al recuperar la conciencia, Salvà tuvo que aprender de nuevo todo desde cero, y tras meses de una dura recuperación, justo el día en que volvía al trabajo, ETA lo asesinó, junto a su compañero Carlos Enrique Sáenz de Tejada García, con una bomba-lapa adosada a los bajos del coche oficial que acababan de arrancar. Ocurrió el 30 de julio de 2009.
Diego, que nació en Pamplona, era el segundo de siete hermanos y su familia era muy conocida en Palma de Mallorca. Tenía novia desde hacía seis años. Diego y Carlos fueron homenajeados por el Ayuntamiento de Calviá el 5 de diciembre de 2009, concediéndoles a título póstumo la Medalla de Oro de Calviá, localidad que puso sus nombres a dos calles del municipio.
Véase también Carlos Enrique Sáenz de Tejada García.