La policía griega comienza a desalojar el campamento de refugiados de Idomeni
- Dos autobuses se dirigen a alguno de los nuevos centros oficiales
- La evacuación del campo de refugiados se prolongará diez días
- Desde Idomeni, Esther Serra, cooperante: "Los refugiados tienen miedo"
- Especial 'Crisis de los refugiados'
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La policía griega ha comenzado este martes a desalojar el campamento improvisado de Idomeni, en la frontera con Macedonia, donde se encuentran más de 8.400 refugiados. Según los medios presentes en el lugar, los primeros dos autobuses han abandonado ya el campamento rumbo a alguno de los nuevos centros oficiales abiertos en el norte de Grecia.
Varios centenares de policías han bloqueado el acceso al campo y durante la noche pidieron a los medios y a los voluntarios que abandonaran el lugar. La policía, con la ayuda de intérpretes, ha estado desde la pasada noche informando a los refugiados de la operación de traslado.
La ONG Médicos sin Fronteras (MSF) ha confirmado este extremo. A los voluntarios no se les ha permitido permanecer en el campo, pero los trabajadores de MSF cuentan todavía con un acceso restringido al mismo y siguen llevando a cabo actividades médicas a través de un equipo reducido de 8 personas. Sin embargo, MSF muestra su preocupación por el hecho de que otros servicios esenciales, como la distribución de alimentos, pueda quedar interrumpida.
Lentamente y con calma
La evacuación del campo de refugiados se está desarrollando "lentamente" y "con calma", según ha indicado a AFP el portavoz del servicio de coordinación de la crisis migratoria, Giorgio Kyritsis.
"La operación ha comenzado este martes sobre las 4.00 horas GMT y se desarrolla a un ritmo lento y con calma. No ha sido necesiario usar la fuerza", ha señalado el portavoz, que este lunes subrayó que la evacuación del campo podría durar al menos diez días.
"En este momento tenemos disponibles 6.000 plazas en centros de acogida, tendremos 8.000 en unos días", ha añadido el portavoz, quien ha asegurado que se trata de centros de buena calidad, con cabañas, y no con tiendas de campaña, un factor que espera sirva para motivar a los refugiados a aceptar su traslado.
Según informa la cadena de televisión pública, el ambiente es por ahora tranquilo y muchos refugiados esperan con calma ante los autobuses a ser trasladados.
"Miedo"
"Los refugiados en Idomeni tienen miedo", ha afirmado este martes a RNE en conversación telefónica Esther Serra, coordinadora de Dandelion, un colectivo que se encuentra sobre el terreno prestando apoyo a los migrantes.
Serra ha relatado que agentes de paisano "han detenido a compañeros" de su organización, y que muchos refugiados abrigan temores respecto a la legalidad del desalojo y de las posteriores acciones policiales.
"Hay helicópteros sobrevolando la zona", ha descrito Serra, quien añade que el campo se haya bajo pésimas "condiciones de salubridad", y que "más de la mitad de los refugiados son niños".
Más de 8.000 personas
A lo largo de la jornada de este lunes ya fueron llevadas a estructuras organizadas unas 2.500 personas, pero a primeras horas de la mañana continuaban en Idomeni más de 8.400.
La policía ha asegurado que la fuerte presencia de las fuerzas antidisturbios es una mera "medida de precaución", para reaccionar en el caso de que haya personas que se nieguen a desalojar el campamento.
El Gobierno ha venido insistiendo en las últimas semanas en que no tiene intención de llevar a cabo un desalojo forzoso, teniendo en cuenta que en el campamento hay numerosas mujeres y niños.
El Ejecutivo ha informado además de que los refugiados tan solo podrán obtener en los campamentos oficiales una prórroga del permiso de estancia de un mes que reciben al inscribirse a su llegada a Grecia. A la mayoría de los refugiados este permiso les ha caducado, por lo que el Gobierno espera que esta decisión sirva igualmente como incentivo.