España salva un empate y asegura la segunda plaza
- La selección española y la de Reino Unido firman tablas (1-1)
- Argentina será el rival de los de Patrick Soyez este domingo
- Vuelve a ver el España - Reino Uindo de hockey masculino
La selección española masculina de hockey sobre hierba se aseguró la segunda plaza de su grupo en los Juegos Olímpicos de Río 2016 tras empatar este viernes a un gol en su último partido ante Gran Bretaña, en un partido donde las mejores opciones fueron británicas.
De este modo, los 'Red Sticks' finalizan segundos del Grupo A tras la impecable Bélgica, con 10 puntos, y su rival en el cruce vital por entrar en la pelea por las medallas será Argentina.
España no jugó su mejor partido del torneo, pero logró contener a un rival que se jugaba mucho más porque necesitaba ganar para apurar sus opciones de clasificación. Ese mayor ímpetu se vio en el Centro Olímpico y solo su falta de acierto y Quico Cortés le impidieron sumar un mejor botín.
El portero catalán comenzó inspirado y detuvo los primeros acercamientos peligrosos de los británicos, una ayuda que David Alegre dobló su valor cuando culminó una jugada ofensiva para hacer con calidad el 0-1.
A partir de ahí, Gran Bretaña apretó aún más y los de Frederic Soyez comenzaron a sufrir, lastrados también por las continuas inferioridades a las que se vieron por los árbitros del encuentro. Así, con diez jugadores en cada bando, su rival logró el empate por medio de Ward.
Los británicos siguieron buscando el gol en el segundo periodo y lo lograron, pero España consiguió anularlo gracias a la revisión por video. Los españoles, con muchas amonestaciones, no podían acercarse con peligro a la portería de Pinner, pero se defendía con bastante orden para mantener la igualada.
Tras el descanso, el guión no cambió demasiado y Gran Bretaña continuó gozando de las mejores ocasiones, sobre todo una muy clara que desperdició a puerta vacía, pero Quico Cortés seguía firme en la portería. Pau Quemada, de 'penalti corner', tuvo la mejor para los de Soyez, que sufrieron hasta el final por el empuje del combinado británico, que desperdició sus 'pc'.