El Gobierno pacta con el PNV apoyar los Presupuestos con un acuerdo que mejora el Cupo e incluye la "Y vasca"
- Con los cinco diputados del PNV, el PP superaría las enmiendas a la totalidad
- El PNV recupera 1.400 millones de euros y rebaja la cantidad a pagar al Estado
- Para sacar los presupuestos adelante necesitaría al menos un voto más
Los gobiernos central y vasco han logrado un acuerdo sobre el Cupo vasco, con lo que se desbloquean las negociaciones en torno a este asunto tras diez años de encontronazos entre ambas administraciones y garantiza apoyo del PNV a los Presupuestos Generales del Estado de 2017.
El ministro de Hacienda y Función Pública, Cristóbal Montoro, ha afirmado este miércoles que el acuerdo del Cupo Vasco supone cumplir un programa político "inexcusable", ya que se había producido la prórroga más larga del Concierto Económico, y considera que "nadie se tiene que sentir agraviado".
En la misma línea, Montoro ha apuntado que Navarra "tiene que tener su propio tratamiento" y ha explicado que desde el Ejecutivo se trabaja con el gobierno de la comunidad navarra, con dos reuniones ya programadas referidas a la actualización de su Cupo. "Nadie se tiene que sentir agraviado", ha apostillado.
El portavoz del PNV en el Congreso, Aitor Esteban, lo ha calificado de "un buen acuerdo" y que no sólo incluye al Cupo Vasco sino también a la "Y vasca", temas de tarifas eléctricas en la industria y una mejor coordinación con la Ertzaintza aunque no contempla la política penitenciaria.
El consejero de Hacienda y Economía, Pedro Azpiazu, ha explicado en rueda de prensa que el Gobierno central devolverá al vasco 1.400 millones tras resolver las "discrepancias" en el cálculo del Cupo desde 2007 y Euskadi pagará este año al Estado 1.300 millones, aunque una vez descontados 344 millones correspondientes a las políticas activas de empleo, abonará 956.
Ese "Cupo provisional" de 956 millones servirá de base para calcular el dinero que el País Vasco pagará durante los próximos cinco años al Estado por las competencias no transferidas, como Defensa, Asuntos Exteriores e infraestructuras como puertos y aeropuertos.
El acuerdo se ha formalizado el mismo día en el que ha comenzado el debate en el Congreso de las siete enmiendas a la totalidad al proyecto de presupuestos del Estado para 2017, pendiente de un posible pacto entre el Ejecutivo de Mariano Rajoy y el PNV que salvaría este trámite de las cuentas públicas gracias a los 5 votos de los nacionalistas vascos.
A falta de un escaño
El acuerdo entre el Gobierno y el PNV, permitirá al Ejecutivo sumar los votos de los cinco diputados nacionalistas vascos a los 170 ya garantizados entre PP, Ciudadanos, UPN, Foro y Coalición Canaria, en definitiva, los apoyos necesarios para que no prosperen las enmiendas de PSOE, Unidos Podemos, ERC, PDeCAT, Compromís, Nueva Canaria y EH-Bildu.
El apoyo de 175 votos, la mitad exacta de la Cámara, es suficiente para rechazar las enmiendas en el debate a la totalidad, sin embargo para el resto de la tramitación será necesario contar la mitad más uno (176) y es aquí donde el PP espera conseguir el respaldo del único diputado de Nueva Canaria, Pedro Quevedo, que, sin embargo, ha pedido la devolución de los presupuestos.
El debate a la totalidad comenzó esta mañana con la intervención del ministro Hacienda, Cristóbal Montoro, que expuso las líneas del proyecto presupuestario.
¿Qué es el Cupo vasco?
El Cupo es el dinero que el Pais Vasco tiene que pagar cada año al Estado por las competencias exclusivas del Estado como las Cortes Generales, Casa Real, embajadas, Defensa, Asuntos Exteriores además de las que aún no han sido transferidas como prisiones o Seguridad Social. También incluye parte de los intereses de la deuda pública estatal.
El concierto económico vasco fue creado en 1878 y se calculó restando a la recaudación de aquel año el gasto de las competencias vascas.
El método para calcularlo ahora es pactado y se referencia a los gastos del Estado y no a la recaudación. El importe acordado se establece en leyes quinquenales. El último data de 2007 y ambos gobiernos no han podido renovarla.
En principio, el País Vasco debería pagar al Estado el 6,24% de la renta estatal, un porcentaje pactado en 1981 entre las autoridades vascas y españolas estableciendo como referencia el PIB de Euskadi sobre el total del Estado. Desde 1982 este porcentaje no ha cambiado aunque el peso de la economía vasca en la del Estado ha variado. Desde 2001 rondaría el 6,10% por lo que estaría pagando más de lo que corresponde.
En los Presupuestos Generales del Estado aprobados en 2016 se calculó que el País Vasco debía pagar al Estado 1.525 millones de euros, una cantidad similar a la que se reclama cada año desde 2007.
El Gobierno de Euskadi calcula que ha pagado 1.600 millones de más entre 2007 y 2017. El acuerdo con el Gobierno central ha permitido recuperar 1.400 millones. El Ejecutivo central ha previsto para este ejercicio un Cupo provisional de 1.202 millones mientras que el Gobierno vasco ha calculado que rondará los 850 millones.
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