Trump despide al director del FBI, James Comey, y provoca un terremoto político en EE.UU.
- Comey se va entre polémicas por los emails de Clinton y los ciberataques rusos
- Trump actúa "basándose en las recomendaciones del fiscal y vicefiscal generales"
- Muchos demócratas le acusaban de haber provocado la victoria de Trump
- Algunos críticos creen que la decisión tapa las consecuencias del caso ruso
El presidente de EE.UU. , Donald Trump, ha despedido al director del FBI, James Comey, según ha informado este martes su portavoz, Sean Spicer, en un comunicado. Comey fue muy criticado por los demócratas por reabrir el caso de los correos de Clinton y estaba investigando los posibles contactos entre el Gobierno ruso y la campaña de Trump.
"El FBI es una de nuestras instituciones más estimadas y respetadas de nuestra nación y hoy marca un nuevo comienzo para nuestra joya de la corona de las fuerzas del orden", ha afirmado Trump en la nota oficial.
Spicer ha indicado que Trump "actuó basándose en las recomendaciones claras del vicefiscal general, Rod Rosenstein, y el fiscal general, Jeff Sessions", y ha señalado que "la búsqueda de un nuevo director del FBI empezará inmediatamente".
Comey ha sido una figura central en dos casos que han sacudido profundamente la vida política estadounidense: el de los correos electrónicos de Hillary Clinton y la investigación de las presuntas injerencias de Rusia en apoyo a Trump. El propio presidente ha enviado una carta a Comey, difundida por varios medios estadounidenses, en la que le informa sobre su despido "con efecto inmediato".
"Aunque aprecio enormemente que usted me informara, en tres ocasiones distintas, de que no estoy bajo investigación, aún así estoy de acuerdo con la conclusión del Departamento de Justicia de que usted no es capaz de liderar eficazmente el Buró", dice Trump en la misiva, en una aparente referencia a la pesquisa del FBI sobre los lazos entre Rusia y la campaña electoral del actual mandatario. "Es esencial que encontremos un nuevo líder para el FBI que restaure la confianza del público en su vital misión de aplicación de la ley", agrega.
El polémico caso de los correos de Hillary Clinton
El caso de la gestión de correos electrónicos secretos desde un servidor personal ha lastrado la carrera de Hillary Clinton y la demócrata respiró aliviada cuando fue cerrado en julio de 2016. Sin embargo, a pocos días de las presidenciales del 8 de noviembre, el ahora destituido director del FBI resucitó el caso tras anunciar el descubrimiento de correos de Clinton en el móvil de Anthony Weiner, representante por Nueva York y marido de Huma Abedin, asesora de la ex secretaria de Estado. La medida probablemente apuntilló la campaña electoral de Hillary Clinton y provocó una investigación posterior al propio FBI.
Este último capítulo ha estado pegado a Comey hasta el día de su despido. La semana pasada se hizo público un error cometido por el ya ex director tras asegurar ante el Congreso de EE.UU., de manera errónea, que Abedin había reenviado cientos y miles de correos electrónicos a la computadora portátil de su esposo, Anthony Weiner, algo que no ocurrió propiamente.
En realidad, la transferencia de información fue consecuencia de los sistemas de copia de seguridad automáticos del móvil de la asesora, según desvelaron medios estadounidenses, y no fueron los "cientos y miles" que Comey aseguró frente al Congreso, ni estaban marcados como "clasificados", aunque el FBI más tarde encontró información clasificada contenida en algunos de los mensajes recuperados de la computadora portátil de Weiner.
Algunos demócratas y la propia Clinton han culpado a Comey de su derrota en los comicios por volver a elevar dudas sobre su manejo de la información a pocos días de la cita electoral del 8 de noviembre, en la que se impuso el republicano Donald Trump.
En su comparecencia ante un comité del Senado de la semana pasada, Comey aseguró sentir "náuseas" al pensar que su investigación a Hillary Clinton pudo impactar en el resultado de las elecciones, pero defendió su decisión de reabrir las pesquisas cuando quedaban solo once días para los comicios.
Las injerencias de Rusia en las presidenciales
Después de que se anunciara la decisión de Trump de destituir a James Comey, el líder de la minoría demócrata del Senado de EEUU, Chuck Schumer, ha pedido que se nombre inmediatamente un fiscal especial independiente que dirija las investigaciones sobre los vínculos del Kremlin con la campaña del actual presidente, Donald Trump.
El líder demócrata en el Senado ha afirmado que la medida de Trump es "un gran error" y ha recordado que hay abiertas distintas investigaciones en la Cámara de Representantes, el Senado y el propio FBI para dilucidar si la campaña de Trump y el Gobierno ruso se coordinaron para dañar la campaña de Clinton, por lo que se preguntó si dichas indagaciones estarán cerca de resolver algo que afecte al presidente al haber tomado esta decisión.
"¿Estas investigaciones estaban demasiado cerca de casa para el presidente?", se ha preguntado el senador, quien considera que los ciudadanos de Estados Unidos creerán que el despido forma parte de una "tapadera". Además, cuestiona la razón dada por el Departamento de Justicia para hacerlo. "¿Porqué ahora? ¿Por qué sucedió hoy?", ha comentado Schumer, señalando que si los errores sobre el caso de Clinton habían sido la verdadera razón, el gobierno de Trump debería haber despedido a Comey cuando tomó posesión en enero.
"Esta investigación debe hacerse lo más lejos posible de la Casa Blanca, y tan lejos como sea posible de cualquier persona que haya sido nombrada por el presidente Trump", ha agregado Schumer.