Los estibadores anuncian que irán a la huelga desde el próximo lunes al sentirse "engañados" por la patronal
- Los trabajadores habían desactivado hasta tres veces los paros convocados
- Ahora mantenían el preaviso a la espera de que se ratificara el preacuerdo
- La patronal se da dos semanas para analizar las necesidades de cada puerto
- Un pacto hace dos semanas parecía haber cerrado el conflicto en los puertos
Los sindicatos de estibadores han anunciado que mantienen los tres días de huelga convocados en los puertos para la semana que viene, los días 5, 7 y 9 de junio, tras considerar que la negociación mantenida este jueves con la patronal Anesco queda en vía muerta.
Antolín Goya, representante de la Coordinadora de Trabajadores del Mar (CETM) , principal sindicato de la estiba, no da por rota la negociación pero considera que hay un cambio de postura que justifica el mantenimiento y la ampliación del calendario de paros.
"Nos sentimos engañados y maltratados, no entendemos nada", ha declarado el dirigente sindical al término del encuentro, después de que la patronal haya vuelto a la política de analizar puerto por puerto las necesidades de mano de obra y dejando atrás la garantía de mantenimiento de todo el empleo -excepto prejubilaciones contempladas- a cambio de una rebaja del 10% en los salarios más altos de los más de 6.000 estibadores.
En un comunicado, Anesco sostiene que mantiene su "compromiso para garantizar el empleo, ratificando lo recogido en el acta" de la reunión del 22 de mayo. Considera, sin embargo, que hay aspectos que deben ser tratados en cada uno de los puertos, de acuerdo a la propuesta de mediación, y se da un plazo de dos semanas para el análisis y dos meses para la resolución.
La Asociación Nacional de Empresas Estibadoras, asegura, ha acordado constituir la comisión negociadora del convenio sectorial. Además, ha pedido al Ministerio de Fomento que adopte las "medidas pertinentes" para solucionar el conflicto abierto en el sector y ante el que sus empresas aseguran encontrarse "completamente desamparadas".
Enfriamiento del preacuerdo
A la reunión de este jueves, ambas partes llegaban con incertidumbre después de que el principio de acuerdo alcanzado hace dos semanas no fuera ni siquera analizado en la Asamblea de la patronal hace una semana.
Las empresas de la estiba utilizaron su última asamblea la semana pasada para votar si Anesco mantenía su papel como patronal negociadora, mientras los trabajadores ratificaban en el mismo día el preacuerdo, en el que se solicita a las empresas que participen en los nuevo centros de empleo portuario.
Ese orden del día supuso un enfriamiento de lo que parecía un acuerdo consensuado, y que ya el ministro de Fomento puso en cuarentena por la celeridad en el tiempo en que se había resuelto, y más después de que el Gobierno necesitará dos decretos para que el Congreso convalidara la liberalización del sector.
Cambio de postura de la patronal, según los sindicatos
En el encuentro celebrado este jueves, ha denunciado Goya, la representación empresarial ya no ha garantizado la subrogación de todo el empleo, tal y como se establecía en preacuerdo ratificado por los sindicatos, a cambio de una rebaja salarial, sino que ha pedido un plazo de dos semanas para analizar la situación puerto por puerto.
Las empresas tienen "serias dudas de cuántos de nosotros pueden ser o no ser sus empleados y hasta que no se aclare esa incógnita, todo lo demás es absolutamente intrascendente para nosotros", ha matizado.
En su opinión, después de que el Gobierno no quisiera solucionar la situación, ahora "nos encontramos" con una patronal que, tras la aprobación del real decreto-ley de reforma de la estiba, se ha sentado a negociar con una posición de poder, que quiere ejercer y, por lo tanto, "cuestionar nuestro trabajo".
La huelga en los puertos parece de nuevo cercana, después de que los sindicatos hayan desconvocado hasta tres calendarios de paros, desde que hace cuatro meses se retomara la negociación.