Putin niega ante Trump que Rusia interfiriera en las elecciones de EE.UU.
- Los dos presidentes se reúnen por primera vez cara a cara en la cumbre del G20
- Tillerson asegura que Trump presionó a Putin sobre trama rusa y éste la negó
- EE.UU. y Rusia acuerdan una tregua en el suroeste de Siria a partir del día 9
- Ambos países crean un "canal bilateral" para abordar el conflicto en Ucrania
Donald Trump se ha visto este viernes con Vladímir Putin por primera vez desde que llegara a la Casa Blanca, en un encuentro en los márgenes de la cumbre del G20 en Hamburgo, y el presidente estadounidense ha querido saber por su homólogo ruso si Moscú había injerido en las elecciones presidenciales de Estados Unidos. La respuesta de Putin ha sido que no, según el secretario de Estado de EEUU, Rex Tillerson, y el presidente estadounidense ha "aceptado" esta declaración.
Según Tillerson, que asistió a la reunión, que duró unas dos horas y cuarto, Trump ha inquirido a Putin en un intercambio "muy largo y muy enérgico" sobre las posibles interferencias de Moscú en los comicios presidenciales del pasado mes de noviembre, señalando que esas injerencias supondrían "un obstáculo significativo" en las relaciones entre sus países.
Sin embargo, el presidente ruso negó la implicación de Rusia y el presidente estadounidense ha dado por buenas sus palabras, según añade la interpretación del ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov.
La reunión entre ambos líderes suscitaba una gran expectación por la presunta injerencia rusa en las elecciones estadounidenses, que los servicios de inteligencia norteamericana consideran probada, supuestamente para perjudicar a la candidata demócrata, Hillary Clinton, y más aún desde que el jueves en Varsovia Trump acusara a Moscú de intentar "desestabilizar" a las democracias occidentales.
Funcionarios de Inteligencia de Estados Unidos han afirmado repetidamente que Putin dirigió una importante operación de hackeo para inclinar las elecciones presidenciales a favor de Trump, algo que el magnate estadounidense ha sido reacio a reconocer directamente.
Trump y Putin "conectan rápidamente"
Por lo demás, el esperado cara a cara entre los líderes de Estados Unidos y Rusia ha discurrido en un ambiente de cordialidad. Ante las cámaras que registraron sus saludos y palabras iniciales, han dicho sentirse "encantados" de verse en persona, y entre ellos hay una "química positiva", en palabras del secretario de Estado norteamericano.
Según ha declarado Tillerson a la prensa, "el encuentro ha sido muy constructivo, los dos dirigentes han conectado muy rápidamente". "Hay claramente una química positiva entre ellos", ha añadido.
De hecho, la reunión ha servido para que los presidentes de EEUU y Rusia acuerden una tregua en el suroeste de Siria que entrará en vigor el domingo 9 de julio.
Diferencias en la actuación frente a Corea del Norte
Desde que Trump accediera a la presidencia estadounidense, la sombra de la injerencia de Rusia en el proceso electoral le ha perseguido y aún se encuentra bajo investigación en el Senado estadounidense.
Otro tema en el que han diferido los dos mandatarios ha sido el de cómo abordar con el programa de armamento nuclear de Corea del Norte, aunque Washington continuará la presión sobre Moscú para frenar las actividades del régimen de Pyongyang, que hace unos días aseguró haber probado con éxito un misil intercontinental capaz de alcanzar EE.UU.
Según el secretario de Estado Tillerson, "no habría opciones muy buenas" si fracasa la "campaña de presión pacífica" que ejerce Estados Unidos sobre Corea del Norte, y que consiste en "un aumento calculado de la presión" pero que requiere tiempo para que el régimen de Kim Jong-un reaccione.
"Los rusos lo ven de modo un poco diferente, así que vamos a continuar las conversaciones y a pedirles que hagan más", ha dicho Tillerson, que ha recordado que Rusia mantiene "una actividad económica" con Corea del Norte. Estados Unidos ha exigido a la ONU un aumento de la sanciones, pero será difícil lograr el respaldo de China y Rusia, miembros permanentes del Consejo de Seguridad.
La relación con la UE es otra de las asignaturas abiertas de la administración del republicano, que apoyó en Varsovia el compromiso de EE.UU. con la defensa del centro y este de Europa -euroescépticos-, además de criticar la actividad "desestabilizadora" de Rusia.
Un "canal bilateral" para el conflicto en Ucrania
Por otro lado, los presidentes de EE.UU. y Rusia han acordado abrir un "canal bilateral" de comunicación entre Washington y Moscú para abordar el conflicto en Ucrania, según ha informado el ministro de Exteriores ruso. Para ello, la administración estadounidense nombrará en breve a un representante especial para Ucrania, que viajará pronto a Moscú para reunirse con su contraparte rusa.
Lavrov ha asegurado asimismo que los dos presidentes acordaron basarse en los Acuerdos de Minsk, que trazan la hoja de ruta para una salida política al conflicto, y no se plantearon alternativas a este acuerdo alcanzado en 2015 entre Rusia y Ucrania.
El objetivo es darle un nuevo impulso al proceso de paz ya que "todas las partes" coinciden en señalar que su implementación "no está avanzando como querríamos", ha dicho Lavrov. Además, Trump y Putin coincidieron en explorar el "potencial" de otros tipos de mediación más allá de la que hasta ahora han llevado a cabo Francia y Alemania.
Primer encuentro "productivo" con Peña Nieto
Antes de reunirse con Putin, Trump ya ha mantenido una reunión bilateral con otro líder internacional con quien mantiene unas difíciles relaciones diplomáticas. Se trata del presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, con quien se ha encontrado por primera vez tras meses de declaraciones encontradas por la política migratoria de la nueva administración estadounidense.
El canciller mexicano, Luis Videgaray, ha asegurado que la reunión fue "muy bien" y resultó "productiva", al tiempo que ha garantizado que en ella no se habló del muro fronterizo entre México y EE.UU., pese a que, ante los periodistas, Trump ha defendido la construcción del muro y que México pague por él.
Videgaray ha reconocido que él, presente en la entrevista, no oyó al presidente estadounidense responder cuando un periodista le preguntó si seguía queriendo que México pague el muro que él quiere levantar en la frontera. "Totalmente", fue la respuesta de Trump, según el relato del pool de periodistas que acompaña al mandatario estadounidense.
"Lo relevante para México es que no fue tema de la conversación, así lo habíamos acordado y así fue", ha señalado el titular de Exteriores para recalcar que la posición de su país es "absolutamente invariable: ése no es un tema de la relación bilateral, no es parte de la conversación entre los dos países y no fue parte de la conversación entre los presidentes".
Entre los temas abordados en la reunión, ha destacado el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) firmado entre México, EE.UU. y Canadá y que Trump amenazó con romper. Videgaray explicó que el acuerdo es negociar para lograr una modernización del tratado y señaló que México cree que "hay espacio para hacer un mejor acuerdo para las tres partes".
Como se prevenía, ha concluido Videgaray, no fue una reunión de grandes acuerdos, pero sí un encuentro para seguir trabajando juntos en asuntos de interés mutuo.