El Congreso aprueba el paquete fiscal tras una ardua negociación y un compromiso para gravar a las energéticas

Podemos exigía un "compromiso real" para gravar a las energéticas

Las negociaciones se han intensificado en las últimas horas. Llamadas, reuniones, corrillos... El acuerdo fiscal estaba prácticamente cerrado con todas las formaciones desde el lunes, tras una jornada agónica en la que se cerró un acuerdo con ERC, Bildu y BNG para prorrogar un año más el impuesto a las energéticas y otro con Junts para no gravar a las compañías que mantengan su compromiso de inversión para la descarbonización.

Sin embargo, desde Podemos mantenían su desconfianza hacia Junts y exigían garantías de que la formación independentista apoyará la prórroga de este impuesto cuando dicha votación se produzca. Finalmente, según ha confirmado Ione Belarra en los pasillos de la Cámara Baja, su formación ha cerrado un acuerdo con el PSOE para constituir en los próximos días una comisión negociadora con participación de todos los partidos políticos necesarios para aprobar esta reforma para conseguir el consenso necesario para aprobar este impuesto.

"Una vez más, solo Podemos aguanta la presión mediática y la presión política hasta el final para defender lo que es justo", ha señalado en declaraciones a los periodistas.

No obstante, si no se consiguiera ese consenso antes del 31 de diciembre, el Gobierno se ha comprometido a aprobar un real decreto-ley con la prórroga del gravamen a las empresas energéticas para el año 2025, evitando así que decaiga.

Según Podemos, el ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes se ha sentado con los representantes de Junts y estos han aceptado formar parte de la comisión que negociará el futuro impuesto. "A mí [Félix] Bolaños nunca me ha traicionado, ha sido muy duro pero tengo su palabra", ha afirmado la líder de la formación 'morada'.

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Montero agradece la capacidad de diálogo de sus socios

También la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha agradecido a los socios de investidura su capacidad de diálogo para llegar a consensos y ha asegurado que confía en el diálogo para consensuar esa ley antes del 31 de diciembre. "Para poder llegar a acuerdos a veces tenemos que abandonar nuestras posiciones de máximos", ha dicho, reconociendo que se siente "profundamente orgullosa" de la Cámara y del pacto que a su juicio permitirá "construir un sistema fiscal más justo, más redistributivo, que blinda el Estado del Bienestar y protege a los ciudadanos frente a situaciones catastróficas como la DANA".

Preguntada por los periodistas, la vicepresidenta también ha confirmado que en esa mesa negociadora para el impuesto a las energéticas estarán presentes Podemos, ERC, Bildu, BNG, PNV, Junts y Coalición Canaria, además de los partidos que conforman el Ejecutivo.

"Hoy hemos aprobado un importante paquete fiscal que supone un avance para conseguir una fiscalidad justa, aumentar los recursos públicos y que nos permite cumplir con Europa. La legislatura y el país avanzan", ha apuntado la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, en un mensaje en su cuenta de X (antes Twitter), donde también ha recordado que "quedan asignaturas pendientes", como "hacer permanente el impuesto a las eléctricas y aumentar los impuestos a la especulación inmobiliaria".

Por su parte, tanto ERC como EH Bildu se han mostrado satisfechos por el resultado y se han comprometido a seguir negociando. Mientras que desde Junts y el PNV se han limitado a apuntar que analizarán la iniciativa cuando la conozcan. "Cuando llegue, si es que llega", ha ironizado la portavoz de Junts en el Congreso, Míriam Nogueras.

Se prorroga el impuesto a la banca y se cae la subida al diésel

El paquete aprobado este jueves por el Pleno del Congreso incluye la trasposición de la directiva europea que regula un tipo mínimo del 15% a las multinacionales, una medida que emana de Bruselas y de obligado cumplimiento. Y es que, de no aprobarse, España podría haber sido sancionada.

También una subida de dos puntos porcentuales en el tipo del IRPF para las rentas del ahorro superiores a 300.000 euros, del 28% al 30%; gravar los vapeadores y subir la fiscalidad del tabaco; o impulsar la factura electrónica. Y bajar el impuesto de sociedades a las cooperativas y empresas que facturan menos de un millón de euros, una mejora de la tributación de las actividades artísticas y una bonificación de las cuotas a la Seguridad Social para los clubes y asociaciones deportivas sin ánimo de lucro.

Asimismo, el Gobierno y sus socios han aprobado incorporar en la reforma el impuesto a la banca, después de que el PSOE y Sumar hayan firmado una enmienda transaccional con Junts que incluye como novedad que todo lo que se recaude se transfiera a las comunidades autónomas. Este impuesto, que sustituye al anterior extraordinario, gravará los márgenes y comisiones de las grandes entidades financieras con tipos progresivos entre el 1% y el 7% con dos deducciones, una de parte de la cuota del impuesto de sociedades y otra extraordinaria en caso de descenso de la rentabilidad.

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También se ha incluido otra enmienda pactada por PSOE y Junts para suspender el pago de una pensión de incapacidad absoluta o de gran invalidez cuando el pensionista pueda desarrollar un trabajo o actividad que le obligue a darse de alta en la Seguridad Social, y otra sobre la rehabilitación de viviendas protegidas en Canarias. Además, la norma insta al Gobierno a impulsar la modificación de la Directiva armonizada del IVA para poder gravar a los arrendamientos de vivienda turística en zonas donde estos alojamientos dificultan el acceso a una vivienda, han confirmado fuentes de Hacienda.

Por contra, finalmente no se ha dado el visto bueno la subida de la fiscalidad del diésel para equipararla a la de la gasolina, al impuesto a los bienes de lujo y ni tampoco a varias de las medidas pactadas entre PSOE y Sumar, como la supresión del régimen fiscal de las socimis.