El Gobierno niega que la acogida del Aquarius tenga un 'efecto llamada'
- La vicepresidenta, Carmen Calvo, destaca que cumple "una obligación legal"
- Se desplazará a Valencia para coordinar con Ximo Puig llegada de los barcos
- Cree que la UE debe ordenar su política migratoria y trabajar en países de origen
- Cruz Roja se encargará de la primera acogida en el Puerto de Valencia
La vicepresidenta del Gobierno y ministra de Igualdad, Carmen Calvo, ha afirmado que el ofrecimiento de España para acoger a las 629 personas migrantes a bordo del Aquarius es una "obligación legal" que el Ejecutivo español "no puede ni quiere eludir" y ha negado que esta acción pueda tener un 'efecto llamada' para la inmigración irregular.
"No estamos hablando de inmigración, sino de una situación límite y España tiene que responder como país responsable. Es una obligación y una perfecta imagen de lo que un país tiene que hacer", ha afirmado la 'número dos' del Gobierno de Pedro Sánchez en una entrevista en la Cadena Cope.
Calvo ha explicado que cuando lleguen las tres embarcaciones -en las que se van a repartir a las personas a bordo del Aquarius para garantizar una travesía segura hasta la costa española-, el Gobierno, a través del Ministerio del Interior, determinará quiénes son refugiadas.
Coordinación de la llegada en Valencia
La vicepresidenta del Gobierno se desplazará esta semana a Valencia para coordinar con el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, la llegada de las tres embarcaciones con 629 refugiados a bordo.
El objetivo de ese desplazamiento de la vicepresidenta es ultimar detalles en diversos ámbitos ante la llegada de los barcos, previsiblemente el próximo sábado.
Según fuentes de Vicepresidencia del Ejecutivo, que está coordinando todo el operativo, el Ministerio del Interior será el encargado de estudiar la situación de cada una de las personas a bordo ya que podrían tener estatus distintos y hay que determinar qué tipo de protección se les puede dar, por ejemplo otorgándoles la condición de refugiados o asilados.
"Europa tiene que ordenar lo que estamos haciendo y actuar en países de origen"
"España es un país que quiere trasladar el honor de su nombre. Esto no tiene nada que ver con llegada de refugiados ni efectos de ningún tipo que no sea el cumplimiento estricto de la legalidad, como es ofrecer un puerto seguro ante una crisis", ha insistido Calvo.
Preguntada por la reacción triunfalista del ministro del Interior italiano, Matteo Salvini, al conocer que España al final se hacía cargo del barco, la vicepresidenta del Gobierno ha evitado juzgar esta reacción "por cortesía", pero ha recordado que Italia y España tienen las "mismas obligaciones".
"Europa tiene que reflexionar y ordenar muy seriamente lo que estamos haciendo en este asunto, trabajando en los países de origen, que es donde está el efecto llamada, donde se producen guerras y pobreza", ha aseverado Calvo, quien ha advertido también sobre la frontera sur, una cuestión que tiene que atender la Unión Europea y no solo España.
Delgado: "Italia puede incurrir en responsabilidades internacionales"
En esa misma línea se ha pronunciado la ministra de Justicia, Dolores Delgado, en una entrevista en la Cadena Ser donde ha advertido de que Italia puede incurrir en responsabilidades internacionales por negarse a permitir el desembarco del Aquarius en un puerto italiano.
"La situación de estas 629 personas en una embarcación al límite es una situación crítica y tenemos asumido todos los Estados que hemos suscrito tratados internacionales que no es una cuestión de buenismo o generosidad, sino de responsabilidad internacional", ha explicado la titular de Justicia.
Delgado ha admitido que la situación europea "es complicada" y la solución a la crisis migratoria tiene que venir de todos los Estados, "de los que son frontera y de los que no". En este sentido ha insistido en que el desembarco del Aquarius es una "cuestión de humanidad, pero también de cumplir con los convenios y tratados de los que todos los Estados son parte".
Por otro lado, el director general de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), William Swing, ha agradecido este martes a España que esté dispuesta a recibir el barco de migrantes, pero ha anticipado que habrá graves crisis en esa ruta marítima si los países se niegan a rescatar este tipo de embarcaciones.
"Estoy complacido de que España haya dado un paso adelante para terminar esta crisis, pero temo una tragedia mayor si los Estados empiezan a negarse a rescatar a los inmigrantes amenazados", ha señalado Swing, quien ha advertido en un comunicado que actuar de esa manera "no va a disuadir a otros migrantes de intentar cruzar a Europa".
Críticas desde el PP
Desde la oposición del PP empiezan a llegar críticas a la acción gubernamental. El secretario de Política Social y Sectorial del PP, Javier Maroto, ha pedido en Las mañanas de RNE que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, debe explicar si, además de la decisión de acoger a los migrantes a bordo del Aquarius, el Ejecutivo español tiene algún plan o estrategia.
"Lo más llamativo es que van a ser trasladados a Valencia por barcos de la Armada Italiana, es decir: los italianos sí ponen efectivos para sacar a los inmigrantes de sus costas. El mensaje es muy evidente y es un precedente. Frente a esa situación, ¿cuál es el plan del Gobierno de Sánchez? ¿Es actuar a golpe de impulso o hay un plan más allá de esto?", se ha preguntado Maroto.
"Creo que en este caso ha habido un impuso buscando la foto", ha afirmado el dirigente del PP, quien ha añadido: "Creo que los ciudadanos nos exigen a los gobernantes actuar no como individuos, no como familias, no como personas con sus sentimientos (..) Nos piden a los gobernantes que tengamos un plan, una estrategia, una posición global y, por tanto, las pregunta que nos surge es si el presidente Sánchez actúa a modo individual, a modo de impulsos o tiene realmente un plan".
"Y si mañana hay una crisis en la valla de Melilla, ¿qué va a hacer? ¿Va a levantar la valla o cuál es el plan?", ha planteado Maroto. "Tenemos que saber esto porque estamos ante una situación en Europa en la que las crisis migratorias son un debate popular y de gobierno de primer orden y tiene que tener una estrategia", ha apuntado.
Maroto defiende que "hay que actuar de forma coordinada en Europa, no tomar decisiones de forma aislada" ni "a título particular".
Más duro se ha mostardo el coordinador general del PP, Fernando Martínez-Maíllo, quien ha advertido al Gobierno de que abrir los puertos a la inmigración puede ser "muy peligroso" y ha insistido en que "esto no puede ser un coladero".
En una entrevista en Los Desayunos de TVE, Maíllo ha recordado que en 2017 en España entraron más de 28.000 personas de manera irregular "y aumentó un 116% los que llegaron por el mar".
Preparativos en Valencia
Mientras tanto, bajo la coordinación de la vicepresidenta del Gobierno, se realizan los preparativos para acoger a los migrantes, cuya llegada se espera para el próximo jueves.
El dispositivo de emergencia para la primera acogida en Valencia correrá a cargo de Cruz Roja, según ha explicado la vicepresidenta del Gobierno valenciano y Consejera de Igualdad y Política Inclusiva de la Generalidad Valenciana, Mónica Oltra, en declaraciones a la Cadena Ser.
Esa organización social está "preparando camas, alimento y todo lo que hace falta para cuando desembarquen, y a partir de ahí, se pondrán en marcha la logística de las derivaciones". La Generalitat valenciana ha pedido ya "una radiografía de los perfiles del barco: edades, embarazadas y situación médica en que se encuentran las personas que están a bordo para preparar los dispositivos", ha confirmado Oltra.
La dirigente valenciana también ha destacado que País Vasco, Baleares y Cataluña han expresado su voluntad de acoger migrantes del Aquarius y ha recordado que existen otras comunidades firmantes del manifiesto de 2016 en la que pedían al Gobierno español cambios en la política de acogida.
Además, esta tarde se reúne la comisión mixta del Consell valenciano para la Atención y Acogida a Personas Desplazadas y Refugiadas, convocada con carácter de urgencia para "ver las necesidades y los recursos" de los que se disponen, y establecer una "hoja de ruta" para la acogida.
Este organismo estará presidido por la vicepresidenta de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, y contará con presencia de distintos departamentos del Consell como Igualdad, Sanidad, Educación, Transparencia y Economía Sostenible, así como de la Federación Valenciana de Municipios y Provincias, las tres Diputaciones provinciales, la Universitat de València y entidades como Accem, Cepaim, Cruz Roja, Cear, Cáritas y Acnur.