El exdirector de los Mossos reconoce que dimitió porque no se sentía "cómodo" ante la proximidad del referéndum
- Albert Battlé dimitió en julio de 2017 y fue sustituido al frente de los Mossos por Pere Soler, defensor del referéndum
- El exdirector de los Mossos defiende al mayor Trapero: "No hubiera aceptado ninguna intromisión por parte del poder político"
El exdirector de los Mossos d'Esquadra Albert Battle ha reconocido este miércoles que dimitió en julio de 2014, tras el nombramiento de Joaquim Forn como conseller de Interior, porque no se sentía "cómodo" ante la proximidad del referéndum del 1-O. Tras su decisión había, entre otros aspectos, un "componente de incomodidad personal de cómo podían evolucionar las cosas", según ha declarado como testigo en el juicio del 'procés'. No obstante, ha querido dejar claro que esa "incomodidad" era por las "presiones" que pudiera recibir como cargo político porque él "no tenía ninguna duda" sobre que los Mossos cumplirían siempre con la legalidad.
De hecho, Battle ha hecho una defensa cerrada del mayor Josep Llúis Trapero, al que él mismo nombró para el cargo. "El mayor Trapero era muy celoso de las competencias que él tenía cuando actuaba como policía judicial [como el 1-O]. No hubiera aceptado de ninguna de las maneras ninguna intromisión por parte del poder político", ha destacado.
Mucho más directo que el exconseller Jordi Jané -que este martes acabó reconociendo también que en su decisión de dejar el cargo pesó la posibilidad de que hubiera una consulta unilateral pero de una forma algo enrevesada-, Battle ha respondido claramente cuando uno de los abogados de la acusación popular, ejercida por Vox, le ha preguntado por si su dimisión tenía relación con la "próxima celebración" del 1-O. "Hombre, he de decirle que cómodo no me sentía", ha señalado.
Apunta también a la presión de la CUP
Esta "incomodidad" por lo que pudiera pasar no era "solo por el nombramiento del señor Forn", sino porque la CUP, que en ese momento sustentaba parlamentariamente al Govern "había pedido por activa y pasiva" su dimisión, ha añadido. De esta forma, Battle ha insistido en que su dimisión se produjo por un "cúmulo de factores" en el que el principal, ha defendido, fue un "tema de lealtad con el conseller entrante para que pudiera nombrar a su equipo".
El exresponsable de los Mossos hasta dos meses antes de la celebración del referéndum, cuya declaración era sin duda una de las más esperadas de la jornada trigésimo quinta del juicio, ha explicado, no obstante, que Forn no le llegó a manifestar nada tras su nombramiento y que tampoco habló con él de sus motivos para dejar el cargo cuando le presentó la carta de dimisión.
Albert Battle, que tras dimitir el 17 de julio mandó un mensaje a todos los agentes del cuerpo destacando que los Mossos cumplirían siempre su labor "con escrupuloso respeto y sujeción a la ley", fue sustituido por Pere Soler, defensor del referéndum y actualmente procesado por presunta rebelión en la Audiencia Nacional junto al mayor Josep Lluís Trapero.
Lloveras niega la participación de Municipios por la Independencia
Este miércoles ha declarado también la expresidenta de la Asociación de Municipios por la Independencia (AMI) y alcaldesa de Vilanova i la Geltrú, Neus Lloveras. La testigo -que llegó a estar investigada en la causa pero que finalmente no fue procesada- ha sostenido que AMI "no tuvo nada que ver en la organización y celebración del referéndum" y que su apoyo a la consulta fue solo "político". Lloveras ha negado también que la Generalitat les pidiera locales como asociación aunque sí ha reconocido que mandó cartas a los ayuntamientos.
Por su parte, el exportavoz del Pacto Nacional por el Referéndum y asesor jurídico de ERC, Joan Ignasi Elena, ha negado que recibiera aportaciones públicas por sus actividades a favor del referéndum y ha afirmado que la financiación corría a cargo de entidades privadas, informa Servimedia.
También han pasado por la Sala de Plenos del Supremo varios directivos de Unipost, entre ellos el exresponsable financiero de la empresa postal, Xavier Barragán, que ha atribuido a "errores" de la propia compañía el hecho de que emitieran y anularan facturas a la Generalitat en un mismo día. Otro de los exjefes de Unipost ha confirmado que le pidieron dar "prioridad" a este pedido y que era "vox pópuli" entre los trabajadores que se trataba de material electoral del 1-O. Algo con el que no todos los empleados estaban de acuerdo.
Por la mañana ha declarado también el portavoz de Mossos pèr la Independencia -sectorial de la ANC en el cuerpo policial-, Albert Donaire, al que el presidente del tribunal, Manuel Marchena, ha reconvenido por responder a una de las preguntas de Vox diciendo que él "no es el que es juzgado aquí". El magistrado le ha pedido que "no se confunda de escenario" y le ha recordado que tiene que responder a las acusaciones y las defensas sin excepción salgo que el tribunal determine que la pregunta es impertinente. El testigo ha negado que recibieran directrices de la ANC sobre cómo actuar el 1-O.
Primeros testigos solo de la defensa: "Claveles" y "actitud cívica"
Este miércoles por la tarde han empezado a declarar ante el Tribunal Supremo los testigos llamados solo por las defensas de los doce acusados. El primero de ellos ha sido el eurodiputado de ERC Jordi Solé, que ha asegurado que la actitud de los manifestantes en la protesta del 20S frente a Economía fue "tranquila" y "muy predominantemente cívica".
Preguntado por el fiscal Javier Zaragoza sobre si vio los daños en los coches logotipados de la Guardia Civil, Solé ha respondido que vio las pegatinas. Preguntado por si vio en concreto "rupturas y fracturas" de los cristales, ha dicho que no las vio aunque se fijó en que "había claveles encima del parabrisas".
Las declaraciones de la jornada las ha cerrado la que era jefa de la Oficina de Relaciones Externas y Protocolo de la Vicepresidencia de Economía y Hacienda. Anna Teixidó, que ha reconocido que de entrada le "sorprendió" que el entonces presidente de la ANC, Jordi Sànchez, estuviera dentro de la Consellería ese día pero que lo entendió cuando se lo explicaron los mossos dedicados a la mediación. Esta mujer ha revelado un detalle que hasta ahora no había salido en el juicio y es que Sànchez se ofreció a ser el mismo junto a Lluis Llach a acompañar a la letrada de justicia a través del pasillo para que pudiera abandonar el edificio sientiéndose "más respaldada", lo que fue descartado por la Guardia Civil.
Teixidó ha relatado que ya por la noche, cuando se habló de desconvocar la concentración, "los Jordis" quería asegurarse de que ellos eran "representativos" para los concentrados porque podía pasar que algunos concentrados no les hicieran caso cuando pidieran que había que irse ya a casa.