Enlaces accesibilidad
Mundial Qatar 2022 | Kalidou Koulibaly

Koulibaly, el baluarte de la zaga senegalesa

Por

Koulibaly hizo sus pinitos en el fútbol francés antes de recalar en otras ligas. Su carrera se inició en el Metz, donde empezó en las categorías juveniles. Debutó en el primer equipo en 2010 y marcó su primer tanto frente al Clermont un año más tarde. Tras otra temporada con el club galo, el senegalés se marchó al Genk belga a cambio de 1,2 millones de euros.

Allí se hizo un hueco rápidamente debutando en la máxima categoría belga y también en la Europa League esa misma campaña cayendo en octavos. El primer gran título de Koulibaly fue la Copa de Bélgica, siendo titular en la final ante el Cercle Brugge. Su buen hacer en defensa no paso desapercibido por el Nápoles, donde terminaría aterrizando en julio de 2014.

Allí se hizo un héroe llegando a cifras extraordinarias. 317 choques, 14 goles y 9 asistencias, son los números del senegalés en el club napolitano. Además, consiguió levantar la Copa de Italia en la 19/20 y también la Supercopa italiana. Tras 8 años en el país de la bota, el zaguero cambió de ubicación y se fue al Chelsea donde firmó un contrato de cuatro años esta misma temporada.

Con su selección fue elegido futbolista del año en 2017 y 2018, además de lograr la ansiada Copa de África este verano con él y Mané como máximas referencias en el combinado africano. Kalidou se enfrenta ahora a su segundo Mundial con Senegal y, con la posible baja del atacante del Bayern de Múnich, se convertirá en el baluarte del campeón africano y será el capitán durante la cita mundialista.


Koulibaly es un central contrastado en Europa. Su poderío aéreo y la fortaleza física son dos de los pilares más importantes del zaguero senegalés a la hora de defender. Además, posee una gran capacidad técnica para sacar el balón jugado e incluso puede llegar al área rival en balones parados.

Su altura de 1,95 metros le permite ser un jugador muy difícil de superar en el uno contra uno, ya sea en ataque o en defensa. La madurez en sus movimientos y la capacidad de anticipación le convierten en la referencia de su país y del Chelsea en fase defensiva, además de ser un grandísimo recuperador de balones.


El punto débil de Koulibaly siempre ha sido su aclimatación a los clubes y también la rapidez como defensa central. En Londres tuvo problemas de disciplina a su llegada, pero terminó rindiendo al máximo con los 'blues'. Asimismo, la rapidez no es otro de los fuertes del defensa ya que su corpulencia y altura no le permiten tener la velocidad de otros jugadores en su misma posición.


La hija de Koulibaly nació en su etapa como jugador del Nápoles. El día que vino al mundo, el cuadro napolitano disputaba un partido importante en la Serie A. El senegalés pidió permiso a Sarri para ausentarse y ver nacer a la niña que estaba en camino. El entrenador italiano le pidió casi de rodillas que no fuese y se quedara para el choque crucial, pero finalmente Koulibaly fue a ver a su mujer con la condición de que volviese para el partido.

El defensa inició el partido desde el banquillo, sin hacerle demasiada gracia, pero terminó entrando en el mismo para ganar el duelo 3-1 y conseguir así tres puntos importantes para el actual líder de la Liga italiana.