Bush cree que el anuncio de Castro debería culminar con unas elecciones libres en la isla
El anuncio de Fidel Castro de su renuncia definitiva a la presidencia cubana ha suscitado numerosas reacciones desde todos los puntos del planeta. Entre ellas ha destacado la del presidente estadounidense, George Bush, quien espera que este anuncio signifique un primer paso hacia la democracia. En España los dos grandes partidos políticos coinciden en calificar la salida de líder cubano como una buena noticia. Mientras tanto, en la isla los cubanos viven este acontecimiento con calma.
George Bush, presidente de EEUU, ha afirmado que la renuncia de Fidel Castro "debe ser el comienzo de la transición democrática en Cuba". "La comunidad internacional debería trabajar con el pueblo cubano para comenzar a construir instituciones para la democracia", afirmó el líder estadounidense. "Eventualmente -añadió- esta transición debería culminar con unas elecciones libres y justas". El "número dos" del Departamento de Estado norteamericano, John Negroponte, ha asegurado en Washington que no se imagina que el levantamiento del embargo estadounidense a Cuba se produzca pronto. La Unión Europea (UE), a través de su Alto Representante, Javier Solana, ha expresado su deseo de que la renuncia de Castro permita a Cuba encaminarse hacia una transición "pacifica y rápida" que beneficie a todos los cubanos. La Comisión Europea ha reafirmado, tras el anuncio de Fidel Castro, su intención de entablar "un diálogo constructivo" con Cuba, con el objetivo de favorecer la transición hacia una democracia pluralista en el país. El Gobierno de Pekín ha anunciado, a través de un comunicado hecho público por su ministro de Exteriores, que desea continuar con las amistosas relaciones que siempre ha mantenido con el Gobierno cubano de Fidel Castro y se ha comprometido a trabajar por desarrollar esta cooperación bilateral. Guennadi Ziouganov, jefe del Partido Comunista ruso, ha estimado que el anuncio de Fidel es un ejemplo del político genial que es, además de que demuestra gran coraje e interés por el bien de su país."Gordon Brown, primer ministro británico, ha calificado el anuncio de Fidel Castro como "una oportunidad para conseguir progresos hacia una transición que desemboque en una democracia plural". Pascale Andréani, portavoz del ministro de exteriores francés, desea ver a "Cuba comprometerse en el camino de la democracia y del respeto de los derechos humanos". Martin Jäger, portavoz oficial del ministro alemán de Exteriores, Frank-Walter Steinmeier, ha asegurado que el Gobierno federal de Alemania espera que la anunciada retirada del líder de Cuba, Fidel Castro, tras casi 50 años en el poder abra el camino hacia la democratización de la isla. Añadió que el mensaje del enfermo líder cubano debe abrir la vía hacia la democratización de la sociedad cubana, así como a la mejora de la situación económica del país. El secretario de Estado de Exteriores de Italia para Latinoamérica, Donato Di Santo, ha calificado la decisión de Castro como un gesto "importante, noble y esperado" e instó a las autoridades a conducir a Cuba a "una transición democrática". Para el presidente del grupo parlamentario Izquierda Unitaria Europea (IUE), Francis Wurtz, la renuncia de Castro facilitará los "cambios necesarios" en Cuba y urgió a la UE a retirar sus sanciones diplomáticas y restablecer el diálogo con La Habana. "Es el fin de una era, se le ame o se le odie, Fidel Castro ha dejado su marca en los asuntos mundiales. Creo que ha llegado a la conclusión lógica dada su edad y su estado de salud", ha dicho el líder de Liberales y Demócratas en la Eurocámara, Graham Watson. El presidente del grupo parlamentario del Partido Popular Europeo (PPE), el francés Joseph Daul, ha afirmado hoy que la renuncia propicia el fin de "una página oscura de la Historia". El embajador de EEUU en España, Eduardo Aguirre, ha defendido que la renuncia de Castro es una oportunidad para que los cubanos "por fin marquen su ruta hacia un nuevo amanecer de transición democrática". El Secretario General Iberoamericano, Enrique Iglesias, ha señalado que "lo mejor que puede hacer la Comunidad Internacional es dejar que los cubanos resuelvan por sí mismos los problemas de su transición política, institucional y económica" sin "interferencias foráneas". El primer ministro peruano, Jorge del Castillo, ha afirmado que "hay que hacer votos para que el proceso de transferencia de poder sea pacífico" y que "se oriente a la vida democrática". Luiz Inácio Lula da Silva, presidente de Brasil, ha confesado que "lo que nosotros temíamos es que, en una situación adversa, eso ocurriese en un sistema turbulento en el que los cubanos de Miami intentasen creer que ya era el día de volver para Cuba y transformar al país en un territorio de conflicto". La Secretaría de Relaciones Exteriores de México ha anunciado a través de un comunicado que actuará "con pleno respeto a la autodeterminación y voluntad del pueblo cubano" y ha expresado al líder cubano "sus mejores deseos para que pueda seguir una pronta recuperación" de los problemas de salud. Oscar Arias, presidente de Costa Rica, ha considerado que consideró que "un cambio sustancial que permita establecer una democracia como la conoce el mundo occidental en Cuba no se va a dar hasta la muerte de Fidel". José Miguel Insulza, secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), espera un cambio en Cuba a partir del ¿diálogo democrático y pacífico¿ y ha expresado su deseo de que la isla regrese a la OEA.