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Guantánamo al desnudo

  • Vicente Romero explora los entresijos de la cárcel estadounidense y la de Abu Ghraib
  • Baltasar Garzón es coautor del documental, que se estrena hoy en TVE-1 a las 23:45 horas

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Presentación de 'El alma de los verdugos'

"El horror y la tortura no son historia: se practican cada día en distintos lugares del mundo". Entre ellos, Guantánamo o Abu Ghraib, dos lugares que se han convertido en símbolos de la violación de los derechos humanos, en símbolos de la represión del poder sobre presos, en muchos casos, inocentes.

Detrás de este marco se encuentra El alma de los verdugos / Las tinieblas del poder , un documental que indaga en los errores y en los aciertos de la lucha contra el terrorismo internacional desatada por el 11-S y que denuncia las condiciones en las cárceles de Irak o Guantánamo.

Un equipo de TVE, dirigido por el periodista Vicente Romero, ha sido testigo del horror y de la tortura y ha conseguido testimonios de personas implicadas en Al Qaeda o en ataques a prisioneros.

Garzón, coautor del documental

Cuatro meses de trabajo y tres visitas a Estados Unidos han sido necesarios para completar un documental del que el juez Baltasar Garzón es coautor. Garzón, que ha participado también en algunas entrevistas y rodajes, define el comienzo del documental como "la reacción exacerbada de Estados Unidos contra el 11 de septiembre".

En Guántanamo, el equipo vio a un prisionero visitar la enfermería cargado de grilletes y vendado en sus ojos, pero no pudieron filmar los casos más extremos, al ser censurados por los funcionarios estadounidenses.

Además, en el documental se podrán ver imágenes robadas de centros de detención, una entrevista con un secuestrado por los servicios secretos de Egipto e, incluso, conversaciones con personas vinculadas a Al Qaeda en Jordania.

"El documental no solo se esfuerza por reflejar lo que ocurre e informar, sino también en exponer alternativas, el Estado de Derecho", ha señalado Romero, que, con este trabajo, rinde homenaje a su cámara, Jesús Mata, que pone así punto y final a su carrera.