Las clínicas de Morín practicaron abortos a niñas de 13 años y embarazadas de más de siete meses
- El ginecólogo ha admitido haber practicado abortos a embarazadas de más de siete meses
- La práctica totalidad de los casos eran de madres que alegaba daños físicos o psíquicos
Las clínicas abortistas barcelonesas de Carlos Morín, investigadas por prácticas ilegales, realizaron abortos a adolescentes de 13 años. Así lo ha admitido el ginecólogo peruano en su declaración ante la juez instructora del caso, Elisabet Castelló. Además, se practicaron abortos pasados los siete meses de gestación.
Morín ha reconcido también haber atendido últimamente en sus centros del grupo TCB-Ginemedex a "una gran población de menores". En su declaración, que forma parte del sumario de más de 4.000 páginas al que ha tenido acceso Europa Press, el ginecólogo también ha admitido prácticas de abortos a embarazadas de siete meses y medio, 29 semanas, en sus clínicas "el último mes" previo a su comparecencia.
Sin embargo, en los informes sobre escuchas telefónicas de médicos colaboradores de Morín figuran casos de abortos a mujeres encintas de más de 30 semanas y hasta 33 semanas. El 97% de los casos, según su declaración se practicaron por el supuesto de grave perjuicio físico o psíquico para la madre que la ley del aborto permite más allá de la semana 22 de la gestación.
Respecto al método utilizado para deshacerse de los fetos después de la intervención, la investigación revela que las clínicas no utilizaban los sistemas reglamentarios a los que obliga la ley para desprenderse de los restos humanos y fetos, sino que los tiraban en los contenedores de residuos sanitarios como si se tratara de material sanitario y biológico.