Los periodistas independientes cubanos recuerdan a 20 compañeros encarcelados desde 2003
- Cumplen penas de entre 14 y 27 años por "actuar contra la integridad del Estado"
- La censura gubernamental se burla a través de los blogs
- Antonio Muñoz Molina califica de "escandaloso" el silencio de la izquierda intelectual
El periodismo independiente cubano "está lejos de ser disuadido", pese a las continuas amenazas y a la "atroz" situación de los 20 periodistas que siguen encarcelados cinco años después de su detención durante la llamada "Primavera Negra" de 2003.
Así se pone de manifiesto en el informe "La Larga Primavera Negra de Cuba", que el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ) ha presentado en Madrid, con motivo del quinto aniversario del encarcelamiento de 75 disidentes por el régimen castrista.
Un total de 29 de esos 75 detenidos a mediados de marzo de 2003 eran periodistas, a los que se condenó a penas de entre 14 y 27 de años de cárcel.
Nueve de los 29 detenidos hace cinco años ya han sido excarcelados por diversas razones, en una decisión que el CPJ relaciona con el uso político que hace La Habana de las excarcelaciones con el propósito de obtener "concesiones internacionales".
En este sentido, el Comité ha agradecido la labor mediadora del Gobierno español, pero ha pedido al nuevo Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero que trabaje "para que las liberaciones pasen de ser una anécdota feliz cada cierto tiempo a ser un objetivo prioritario en la estrategia de su relación con Cuba".
Acusados de desestabilizar el país
Los delitos que se les imputaron, "tras juicios sumarísimos de un día", fueron los de "actuar contra la independencia o la integridad territorial del Estado" o de colaborar con medios extranjeros con el objetivo de "desestabilizar el país", se recuerda en el informe.
"Cinco años después, 20 de esos periodistas siguen en la cárcel, junto con otros dos que fueron detenidos después de la embestida", dice el trabajo de la CPJ, que alerta de que todos ellos "viven en condiciones inhumanas que han afectado seriamente su salud".
"Sufren problemas de salud que han surgido o empeorado durante los cinco años en la cárcel, según entrevistas del CPJ con familiares y amigos", dice el informe, que enumera el "rosario de miseria individual y crueldad gubernamental" ejercida contra estos presos.
Se detalla en el informe del Comité que "los periodistas están hacinados en pabellones enormes o hacinados en diminutas celdas sin ventilación" y que "el agua potable está contaminada con materia fecal y la comida está llena de gusanos".
Periodismo disidente online
Pese a todo, "un nutrido grupo de periodistas independientes sigue funcionando de manera similar a como lo hacía en 2003". La CPJ destaca el trabajo de un centenar de profesionales de la comunicación que trabajan en Cuba al margen de los circuitos gubernamentales, la mayoría en La Habana, que trabajan sin tener siquiera acceso a Internet, a un ordenador o a un teléfono móvil.
Se destaca también "la aparición de una generación de blogueros con vastos conocimientos tecnológicos", como Yoani Sánchez, de 32 años, que creó en abril de 2007 su blog, 'Generación Y', desde el que describe sin censura sus observaciones cotidianas sobre Cuba.
Para hacerlo, acude semanalmente a un café Internet en La Habana, donde tiene que trabajar muy rápido porque una hora de conexión a la red cuesta 160 pesos (4 euros), lo que representa aproximadamente una tercera parte de un sueldo mensual medio en la isla.
El silencio de los intelectuales progresistas
El escritor y periodista español Antonio Muñoz Molina, presente en la presentación del informe, ha calificado de "escandaloso" el silencio que gran parte de los intelectuales progresistas de Occidente han guardado y siguen guardando sobre la persecución de sus iguales en Cuba.
"Una de las grandes vergüenzas de la clase intelectual, de la clase literaria y de la clase periodística europea y occidental ha sido la indiferencia, cuando no la hostilidad, hacia el sufrimiento de los perseguidos en los regímenes comunistas", ha denunciado.
El novelista español ha dicho que "ya va siendo hora de que nos quitemos los lugares comunes, las deudas, las coacciones, las justificaciones ideológicas de una dictadura". "No hay ninguna justicia, ni ningún bien, ni ninguna rebeldía que justifique la persecución de una sola persona", ha argumentado.
El informe del Comité para la Protección de los Periodistas ha contado con el respaldo de su firma y la de otros once intelectuales, entre los que destacan Noam Chomsky, Tomás Eloy Martínez, Fernando Savater, Juan Goytisolo o J. M. Coetzee.