Una explosión en un colegio en Filipinas deja al menos 15 personas heridas
- El centro escolar se encuentra a 300 metros del palacio presidencial
- Las primeras pesquisas apuntan a que podria haber estallado una granada
- Cuatro estudiantes están siendo interrogados
Al menos 15 personas, entre ellas estudiantes, han resultado heridas a causa de la explosión de una granada en la entrada del colegio La Consolación de Manila, según la investigación preliminar de la Policía.
Fuentes del Hospital Mary Chiles indicaron que 15 personas han sido internadas en el centro, mientras que la radio filipina informaba de más ciudadanos con heridas atendidos en el ambulatorio de la Universidad Santo Tomás y en el Manila Doctors Hospital.
La Policía no ha ofrecido de momento una cifra exacta de víctimas a causa de la explosión ocurrida sobre las 16.30 hora local - 9.30 hora española-.
El centro docente se encuentra a unos 300 metros del Palacio de Malacañang, residencia oficial de la presidenta de Filipinas, Gloria Macapagal Arroyo.
Artificieros de la Policía señalaron que la explosión se debió a una granada colocada debajo de un coche Honda CRV, de matrícula XDB-530, situado en la entrada del colegio privado La Consolación.
El director de la Policía de Manila, Gary Barias, indicó a la prensa que el incidente se produjo cuando los estudiantes se hallaban en clase y que testigos vieron a un hombre con una camisa roja y una gorra que corría poco antes de la detonación.
Cuatro estudiantes han sido llevados a la comisaria para ser interrogadas sobre los hechos. La Policía Nacional había elevado la alerta poco antes de la explosión para prevenir actos terroristas con motivo de la Semana Santa.
El incidente se produce después de que los cuerpos de seguridad hubieran advertido de que habían tenido lugar en Manila enfrentamientos entre bandas rivales de estudiantes.
El sábado pasado, dos jóvenes de 19 y 21 años de edad del Instituto de Tecnología Mapua murieron apuñalados en el casco antiguo de Manila, Intramuros, por otros miembros del mismo centro, según un testigos.
La Policía atribuyó sus muertes a un "ajuste de cuentas" entre pandillas rivales.