Serbia propone a la ONU dividir Kosovo entre serbios y albaneses

• La propuesta ha sido remitida a la UNMIK en el aniversario de los bombardeos de la OTAN
• Kostunica dice que el ataque atlántico tenía como objetivo convertir Kosovo en un estado
• Putin anuncia que enviará ayuda humanitaria a los serbios que viven en la región

El Gobierno de Serbia, que rechaza la independencia de Kosovo, ha propuesto a la ONU una división administrativa de su ex provincia a lo largo de líneas étnicas, informa la prensa belgradense.

Según la propuesta, Serbia pide a la administración interina de la ONU en Kosovo (UNMIK) que los serbios asuman las competencias en la policía y la Justicia en aquel 15% de Kosovo donde constituyen una mayoría, en la parte norte y varios enclaves aislados del interior.

La propuesta coincide con el noveno aniversario del inicio de los bombardeos de la OTAN contra objetivos civiles y militares en Serbia para poner fin a las tensiones étnicas en Kosovo. UNMIK fue establecida en Kosovo en 1999, según la Resolución 1.244 de la ONU, que garantizó la integridad territorial y la soberanía de Serbia en esa provincia.

Kostunica crítica la 'expropiación' de territorio por la OTAN

Precisamente en el marco de este aniversario, el primer ministro serbio, Vojislav Kostunica, ha acusado a la OTAN de haber hecho una cínica expropiación de territorio en nombre de una intervención humanitaria.

"Ahora es más obvio que la cruel destrucción de Serbia durante los bombardeos de la OTAN tuvieron sólo un propósito: convertir la provincia de Kosovo en el primer estado mundial de la OTAN", ha dicho Kostunica.

Putin ofrece ayuda humanitaria a los serbios

Por su parte,  el presidente de Rusia, Vladímir Putin, ha anunciado que enviará ayuda humanitaria a los enclaves serbios de Kosovo.  "Si hace falta ayuda humanitaria, vamos a enviarla, pero sin matices políticos", ha dicho Putin en una reunión con miembros del Ejecutivo, según la agencia Itar-Tass.

En opinión del jefe del Kremlin, "cuando se trata de cuestiones políticas, es una cosa, pero los asuntos humanitarios son otra". Putin recalcó que a la hora de tratar los problemas humanitarios hay que "partir del hecho de que la población de (uno u otro) enclave debe sentirse bien, independientemente de su pertenencia nacional".

De esa manera Putin reaccionó al informe sobre la situación en Kosovo que presentó en la reunión del Gabinete el ministro de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov, que denunciaba el agravamiento de la situación en los enclaves serbios.