Medvédev cree que el ingreso de Ucrania y Georgia en la OTAN amenaza la seguridad
- El presidente ruso dice que las ex repúblicas soviéticas pueden ser motivo de problemas externos
- La Alianza Atlántica puede verse presionada de cara a decidir el ingreso o no de ambos países
El presidente electo de Rusia, Dmitri Medvédev, ha advertido de que el ingreso en la OTAN de las ex repúblicas soviéticas de Ucrania y Georgia puede amenazar la seguridad europea, informa el periódico Financial Times.
"No estamos contentos con la situación en torno a Georgia y Ucrania. Creemos que es motivo de problemas extremos por la actual estructura de la seguridad europea", señala el sucesor de Vladímir Putin, en una entrevista que publica el diario.
"Ningún estado puede estar satisfecho con tener representantes de un bloque militar al que no pertenece cerca de sus fronteras", añade Medvédev, cuyos comentarios pueden presionar a la Alianza Atlántica a no considerar la entrada de esos dos antiguos estados soviéticos cuando se reúna en Bucarest la próxima semana.
Según el periódico económico, Medvédev, ganador de las elecciones rusas del pasado día 2, también sugirió que los ucranianos no están a favor del ingreso en la OTAN. "Esto es (...) incluso más difícil de explicar cuando la gran mayoría de los ciudadanos de Ucrania están categóricamente en contra de unirse a la OTAN, mientras el Gobierno sigue una política diferente", puntualiza.
Relaciones diplomáticas con Londres
Por otro lado, Medvédev admite que es de interés de Rusia reconstruir las relaciones con el Reino Unido, afectadas por la muerte del antiguo espía ruso Alexander Litvinenko, asesinado en Londres con una dosis de la sustancia radiactiva polonio 210 en noviembre de 2006.
"Estamos abiertos al restablecimiento de la plena cooperación", afirma el próximo presidente ruso, quien, no obstante, señala que "el tiempo dirá" si se pueden hacer progresos una vez que se entreviste con el primer ministro británico, Gordon Brown, probablemente durante la cumbre del Grupo de los Ocho (los siete países más ricos y Rusia) en julio, en Japón.