España permite la presencia de policías brasileños en Barajas para cerrar la crisis fronteriza

• Supervisarán 'in situ' que la expulsión de sus nacionales se hace con garantías
• Exteriores se compromete a colocar cajeros automáticos en la aduana
• Ambos países mantendrán reuniones periódicas sobre política fronteriza

España y Brasil acuerdan la política migratoria

Los Gobiernos de España y Brasil han acordado que policías brasileños puedan colaborar en el aeropuerto de Barajas en el paso por la aduana de ciudadanos de este país con el objetivo de reforzar las garantías en la aplicación de las reglas de admisión en el espacio de la Unión Europea.

Además, han abierto la posibilidad de que en "un primer momento", funcionarios policiales españoles puedan trabajar in situ con sus colegas brasileños con el mismo fin.

De esta forma, ambos países pretenden solucionar el desencuentro diplomático provocado por la expulsión de varios ciudadanos brasileños por no cumplir los requisitos establecidos por el acuerdo de Schengen para la entrada en la Unión Europea.

En respuesta, las autoridades brasileñas no han permitido entrar en su país a turistas españoles que carecían de billete de vuelta.

Los representantes de Brasil y España han llegado a este acuerdo en un encuentro celebrado en la sede del Ministerio de Asuntos Exteriores, donde se ha acordado también establecer una "línea directa" para resolver con agilidad incidentes que puedan surgir en ambas fronteras.

Cajeros en la aduana

Para evitar que sean expulsadas personas que tengan efectivamente ingresos para permanecer en España durante su estancia, España ha acordado hacer gestiones con los organismos competentes para instalar en breve plazo cajeros autonómicos al alcance de los viajeros en el área de control migratorio.

Además, se ha abierto la posibilidad de que las personas rechazadas en la aduana puedan adquirir billetes de regreso a su país en la compañía aérea que prefieran.

Otras acciones para reforzar la cooperación policial y migratoria se refieren al intercambio, "con detalle", de toda la información referida a los requisitos legales de entrada de ambos paíse para procurar su "máxima difusión" a "todas las instituciones y agentes implicados", según ha detallado el ministerio en una nota.

Por último, ambos países mantendrán reuniones periódico para comprobar la aplicación de estas medidas, con el objetivo de recuperar, en el marco de las "excelentes relaciones" bilaterales, la normalidad en los puntos fronterizos de pasajeros.