Diseñan la 'máquina del suicidio' para ayudar a morir a los enfermos terminales
- El invento permite al paciente accionar un mecanismo que le inyecta una dosis letal
Una maquinaria para ayudar a morir a los enfermos terminales que deseen acabar con su vida, la denominada 'máquina del suicidio', es el último invento del ex ministro de Justicia de Hamburgo, Roger Kusch.
Según Kusch, este invento es "el método más tolerable para aquellas personas que solicitan la eutanasia". "Hay pacientes que están sufriendo y no pueden tolerar más el dolor. Yo quiero ayudar a esa gente", ha explicado en una entrevista concedida a la CNN y recogida por Clarín.com.
La 'máquina del suicidio' es en realidad un aparato que se usa para inyectar medicinas y que el ex funcionario alemán ha modificado y le ha agregado un botón que permite al paciente accionar por sus propios medios el mecanismo. Si pulsa el botón, el paciente recibirá una dosis letal de cloruro de potasio.
De esta forma, según Kusch, el paciente técnicamente se suicida, lo que protege legalmente a los médicos que deben asistir a los enfermos proporcionándoles las drogas letales.
El ex funcionario justifica la creación de su invento por "motivos estrictamente humanitarios".
La 'máquina del suicidio' se ha presentado en pleno debate europeo sobre la eutanasia, después de que se confirmara el suicidio de la francesa Chantal Sébire, que padecía un tumor incurable que le desfiguró el rostro y a la que la Justicia de su país le negó ayuda para morir.