La lluvia empaña el encendido del 'Alumbrao'
Se prevé que llueva en las tres primeras jornadas de la Feria de Abril
Más de 350.000 bombillas cubren el Real, que ocupa 1,2 millones de metros cuadrados
Se apagarán media hora antes de lo habitual para ahorrar energía
Apenas llevan unas horas colgados y los farolillos que cubren el Real de la Feria ya están mojados y en el suelo. La lluvia y el viento marcan las primeras horas de la Feria de Abril de 2008, que arranca oficialmente a medianoche con el encendido del Alumbrao.
De hecho, el riesgo de lluvia se extiende a los tres primeros días de la fiesta y se ha convertido en la principal amenaza para que los sevillanos puedan disfrutar de su fiesta después del acuerdo alcanzado para desconvocar la huelga en los autobuses municipales.
El agua caída será uno de los temas de conversación de la llamada cena del pescaíto, con la que se da la bienvenida a la feria en las más de mil casetas que componen el recinto ferial, que estará abierto hasta el próximo 13 de abril.
Una ciudad dentro de la ciudad
A medianoche, se encenderán las 367.000 luminarias del Real y su portada, dedicada este año al Costurero de la Reina, uno de los monumentos más señeros de la ciudad y que tiene 45 metros de altura y un peso de 180.000 kilos.
Se iluminará entonces una pequeña ciudad efímera y autónoma, con todos los servicios públicos y una demanda eléctrica equivalente a la de un municipio de más de 40.000 habitantes.
Este recinto tiene una superficie total de 1.200.000 metros cuadrados, incluidos sus aparcamientos, de los que 450.000 metros cuadrados pertenecen al Real y 200.000 a la zona de las atracciones, la conocida como calle del Infierno.
Novedades
Para ahorrar energía, las bombillas se apagarán este año a las 2:30 horas en vez de a las 3:00, como era habitual hasta ahora.
Ésta es una de las principales novedades de la edición de 2008 de la feria, junto a la apertura de un taller gratuito dedicado a pequeños arreglos de emergencia de trajes de flamenca que pondrá en marcha la empresa Molina en un módulo cedido por el Ayuntamiento y el reparto de 10.000 pulseras identificativas para niños, con la idea de facilitar la localización de sus padres en caso de pérdida.