Empieza el primer juicio contra presuntos cómplices de los atentados de Londres
- Tres jóvenes están acusados de identificar posibles objetivos para los ataques.
- El fiscal destaca su relación y objetivos comunes con los autores materiales.
- Ellos niegan su participación en los atentados, que mataron a 52 personas.
La corte de Kingston Crown, en Londres, ha iniciado este jueves el juicio contra los tres primeros acusados de participar en los atentados cometidos el 7 de julio de 2005 en la capital británica, en los que murieron 52 personas en un ataque coordinado contra tres trenes de metro y un autobús.
Mohammed Shakil, de 31 años, Sadeer Saleem, de 27, y Waheed Ali, de 24, están acusados de identificar posibles objetivos para la colocación de artefactos explosivos. Los fiscales han señalado que, siete meses antes de las explosiones, dos de ellos visitaron el Aquarium de Londres, el Museo de Historia Natural y el London Eye, la noria que se alza junto al Támesis.
Todos ellos eran amigos y compartían las mismas creencias y objetivos, según los fiscales, que Mohammad Sidique Jan, Shehzad Tanweer, Jermaine Lindsay y Hasib Hussain, los terroristas suicidas que perpetraron los atentados. Los siete vivían en Beeston, un barrio de la ciudad de Leeds.
Material yihadista
Los acusados, sentados impasibles en el banquillo, han escuchado como el fiscal Neil Flewitt argumentaba ante la corte judicial las pruebas de su vinculación con los atentados, resaltando que habían incubado un odio violento contra su país de adopción.
Así, Flewitt ha explicado que, cuando fueron arrestados, la policía descubrió en sus casas material sobre los atentados del 11 de septiembre de 2001 en Estados Unidos, cartas que revelaban sus ambiciones de desatar la yihad en Inglaterra y direcciones de sitios web que apoyan a Osama bin Laden y a su red terrorista, Al Qaeda. Dos ellos, Shakil an Ali, viajaron por separado a Pakistán en compañía de Jan, según la acusación.
Aunque la fiscalía ha reconocido que no participaron directamente en la fabricación o el traslado de los explosivos, ha señalado que compartían los objetivos de los autores materiales "y estaban dispuestos a ayudarles en un aspecto concreto e importante de la preparación de los atentados".
En este sentido, ha explicado que, en diciembre de 2004, todo el grupo viajó a Londres para lelvar a cabo "un reconocimiento hostil de potenciales objetivos". Los acusados han negado los cargos y alegan que el viaje a Londres solo consistía en visitar a la hermana de Ali, que vive en la capital.