Una unidad movil revisará a unos escolares de Girona que visitaron la central de Ascó

• La dirección del colegio ofrecerá a los padres la posibilidad de examinar a sus hijos 
• El CSN detecta partículas de baja intensidad en el interior de la nuclear
• El Síndic de Greuges abre una investigación de oficio para buscar responsabilidades

TD1 La Central Nuclear de Ascó dice que no hay riesgo para la población

Una unidad móvil de la central nuclear de Ascó se desplazará al Colegio Maristas de Girona para hacer análisis a los 44 escolares que visitaron la planta el pasado día 4 de abril.

El Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) quiere realizar análisis independientes a las personas que han podido verse afectadas por la fuga de la nuclear de Ascó. En total se tienen que hacer pruebas 800 personas. La central ya se las ha realizado a las 600 primeras.

La dirección del centro escolar se reunirá esta tarde con los padres de los alumnos afectados para informarles de la situación y ofrecerles la posibilidad de que sus hijos pasen esta revisión en los próximos días. Según el director, Robert Serra, la Consejería de Educación de la Generalitat les ha dicho que "no es necesario" pasar el trámite, aunque considera que "es mejor" para tranquilizar a padres y alumnos. 

Serra ha criticado que si la central de Ascó I sabía que se había producido un vertido, dejase que las escuelas visitasen la central. Ha añadido que desde que se hizo público el suceso, el Ayuntamiento de Gerona, las consejerías de Salud y Educación y el CSN se han puesto a su disposición. 

Según informa RNE, el CSN, que ha expedientado a la central, ha puesto en marcha ya la campaña de vigilancia exterior. Por ahora sólo se han detectado partículas de baja intensidad en el interior de la nuclear como las localizadas hasta ahora.

De momento, la Junta de Administración de la Asociación Nuclear de Ascó-Vandellós ha destituido al director y al jefe de seguridad de las instalaciones.

El CSN no será el único organismo que buscará responsabilidades. El Síndic de Greuges (el defensor del pueblo de Cataluña) ha abierto una actuación de oficio sobre la fuga radiactiva en la central nuclear de Ascó. El incidente se produjo el pasado mes de noviembre pero se ha conocido hace solo unos días a raíz de una denuncia de Greenpeace.

El Síndic, Rafael Ribó, se ha dirigido también al Defensor del Pueblo para ver si tiene previsto iniciar alguna actuación ya que las competencias de seguridad nuclear son de ámbito estatal. Si no es así le sugerirá que lo haga.

El objetivo del Síndic es averiguar las posibles responsabilidades en la fuga. Además, se pretende dar garantías de defensa de los derechos de los trabajadores, de las personas que visitaron la central en los días posteriores a la fuga y de las que residen cerca.

Por último, trabajará para ayudar a encontrar más vías de colaboración entre las administraciones en situaciones como ésta.

Ribó ha pedido a los departamentos de Medio Ambiente, Salud, Educación y Economía y Finanzas de la Generalitat toda la información de la que disponen sobre el incidente.

A los ayuntamientos de Ascó, Vinebre, La Torre de l'Espanyol y Garcia les ha pedido que valoren la información que han recibido sobre este suceso.

La central nuclear de Ascó registró el pasado mes de noviembre un escape de partículas radiactivas procedentes de la ventilación de la planta atómica.

Aunque al principio el incidente se clasificó provisionalmente como Nivel 1 por su "escasa significación radiológica", el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) lo elevó hace unos días a Nivel 2.