Cinco detenidos y cuatro heridos al paso de la antorcha olímpica por Nagano
- La llama ha sido recibida por más de un millar de manifestantes protibetanos y prochinos
- Un templo budista ha organizado una ceremonia de recuerdo de las víctimas en el Tíbet
La antorcha olímpica ha sido recibida por más de un millar de manifestantes protibetanos y prochinos en el punto final de su recorrido por Nagano, al norte de Japón. El paso de la llama por esta ciudad se ha saldado con cinco personas detenidas y otras cuatro heridas leves.
Según la agencia local de noticias Kyodo, el símbolo olímpico, que estuvo protegido por un dispositivo de más de 3.000 agentes policiales, llegó sin mayores contratiempos al parque de Watasako en Nagano, donde fue recibido por más de mil manifestantes a favor y en contra de China. El itinerario del fuego olímpico fue de más de 18 kilómetros, que se recorrieron en cerca de cuatro horas.
Un hombre de rasgos asiáticos que portaba una bandera del Tíbet fue detenido tras intentar interrumpir el desfile durante el relevo de la jugadora japonesa de tenis de mesa Ai Fukuhara, según las autoridades policiales. La Policía detuvo además a un japonés que trató de interrumpir el paso de la antorcha cerca de la estación de trenes de Nagano, y a otro individuo que lanzó dos huevos a uno de los relevistas del desfile. Por su parte, un hombre lanzó dos bengalas a uno de los 80 portadores de la antorcha, pero escapó antes de ser detenido.
El desfile dio comienzo a las 8.30 hora local (23.30 GMT del viernes) en un terreno municipal de Nagano, la localidad japonesa que albergó los Juegos Olímpicos de Invierno en 1998.
Protesta de un templo budista
Senichi Hoshino, el entrenador del equipo de béisbol nacional de Japón de 61 años, fue el encargado de iniciar el recorrido, modificado esta semana tras la negativa del templo budista de Zenkoji de servir como punto de partida del desfile.
El templo de Zenkoji decidió retirarse del itinerario en protesta por la actitud china en el Tíbet, donde las revueltas ocurridas el pasado marzo se saldaron, según Pekín, con 19 muertos y, según los tibetanos en el exilio, a más de 140.
El citado templo, situado a cerca de 800 metros del nuevo punto de partida, jugó un papel simbólico durante la ceremonia de apertura de los Juegos de Nagano hace diez años.
Con motivo del paso de la antorcha por Nagano, un grupo de activistas protibetanos ha organizado esta mañana una ceremonia en este templo budista en recuerdo de las víctimas de las revueltas en el Tíbet.
Las autoridades de Nagano han organizado una ceremonia de clausura en el parque de Watasako, antes de que la antorcha emprenda viaje a su próximo destino: la capital surcoreana Seúl.