Una multitud de ciudadanos despide a Leopoldo Calvo-Sotelo en el Congreso

• El Rey ha impuesto al ex presidente el Collar de la Real y Distinguida Orden de Carlos III
• La capilla ardiente permanecerá abierta en el Congreso hasta mañana por la mañana
• El funeral de Estado se celebrará el próximo jueves en la catedral de La Almudena
• Martín Villa, vicepresidente de Calvo-Sotelo, estará mañana en Los Desayunos de TVE

TD1 - Los ciudadanos valoran la figura de Calvo-Sotelo

Numerosos ciudadanos se están acercando al Congreso para dar su último adiós a Leopoldo Calvo-Sotelo, fallecido ayer a los 82 años. La capilla ardiente, instalada en el Salón de los Pasos Perdidos, permanecerá abierta al público hasta el lunes por la mañana.

A las seis de la tarde, el cardenal arzobispo de Madrid, Antonio María Rocuo Varela ha oficiado un breve responso por el alma del ex presidente. Al acto han asistido, entre otros, Mercedes Cabrera, ministra de Educación y sobrina de Calvo-Sotelo, José Bono, presidente del Congreso, y el ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos.

Los restos mortales del ex presidente se trasladarán este lunes a Ribadeo (Galicia), cuyo Ayuntamiento instalará una capilla ardiente. Tras el cierre de la capilla ardiente del Congreso de los Diputados,  un batallón de los tres Ejércitos recibirá su ataúd en la Carrera de San Jerónimo y lo portará hasta la plaza de Neptuno.

El cadáver de Calvo-Sotelo, alcalde honorario de Ribadeo, saldrá de Madrid en un vuelo que partirá de Torrejón de Ardoz en torno a las once y media de mañana, rumbo al aeropuerto de Asturias, desde donde se desplazará en un coche fúnebre hasta Ribadeo.

Esta segunda capilla ardiente estará abierta hasta las seis de la tarde en el Ayuntamiento para que los ribadenses y amigos puedan darle su último adiós al ex presidente del Gobierno e hijo adoptivo de esta villa lucense.

A las seis de la tarde se celebrará una misa en la iglesia parroquial de Santa María del Campo en Ribadeo, en la que la Coral Polifónica de Ribadeo interpretará una pieza en homenaje a Leopoldo Calvo-Sotelo. Acto seguido tendrá lugar la conducción del cadáver hasta el cementerio municipal.

   

Por expreso deseo de la familia, todos los actos que se celebrarán mañana lunes en Ribadeo tendrán carácter público.

El jueves, a las 8 de la tarde, se celebrará el funeral de Estado en la catedral de La Almudena de Madrid. También asistirán la Familia Real y el resto de autoridades del Estado.

Homenaje de los Reyes

Esta mañana, los Reyes y los Príncipes de Asturias han acudido al Congreso de los Diputados para presidir los actos de homenaje por el que fuera jefe del Gobierno entre 1981 y 1982. El monarca, visiblemente emocionado, ha depositado sobre el féretro del ex presidente el Collar de la Real y Distinguida Orden de Carlos III.

En un comunicado, Juan Carlos I ha ensalzado la figura de Leopoldo Calvo-Sotelo: "Ha muerto un gran español, un hombre de Estado, un demócrata. Nunca olvidaré su encomiable entrega al servicio de España durante tantos años, su impagable contribución a nuestra Transición, su labor para situar a España en el lugar que le corresponde en el mundo y su probada y permanente lealtad a la Corona", ha destacado el Jefe del Estado.

Antes, José Luis Rodríguez Zapatero ha recibido los restos mortales de Leopoldo Calvo-Sotelo en el Congreso. La capilla ardiente por el ex presidente ha quedado instalada en el Salón de los Pasos Perdidos.

El presidente del Gobierno y su  esposa Sonsoles Espinosa han dado el pésame a la viuda y  los hijos de Calvo-Sotelo. Después, lo han hecho las máximas autoridades del Estado, entre las que se encontraban José Bono, presidente del Congreso de los Diputados y Javier Rojo, presidente del Senado. También se han acercado el ex presidente José María Aznar, el líder del Partido Popular, Mariano Rajoy, y el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, entre otros.

El ex presidente del Gobierno Leopoldo Calvo-Sotelo falleció repentinamente ayer a los 82 años en su casa de Pozuelo de Alarcón (Madrid). Estaba casado con Pilar Ibáñez-Martín y era padre de 8 hijos. Mañana será enterrado en Ribadeo (Lugo), el pueblo donde pasó su juventud y al que, según su hijo, "estaba más allegado".