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El poder autonómico obliga a Evo Morales a dialogar por un acuerdo en Bolivia

  • Los analistas aseguran que el referendo de Santa Cruz ha evidenciado la división de Bolivia
  • Las regiones de la "media luna" han tomado la iniciativa y celebrarán más plebiscitos
  • Con un resultado del 85% a favor de la autonomía, Evo Morales deberá rectificar

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POSTERIORES A LA VOTACIÓN DEL REFERENDO EN SANTA CRUZ
La prensa boliviana da cuenta del rotundo triunfo del Sí del autonomismo en Santa Cruz.

El referendo de Santa Cruz ha evidenciado la división de Bolivia y la emergencia del poder autonomista frente al Gobierno de Evo Morales, que está obligado a rectificar y caminar hacia un acuerdo para no seguir debilitándose.

Así lo han advertido varios analistas que coincidieron en que la aprobación del estatuto de autonomía cruceño en la consulta del domingo abre una nueva etapa en el conflicto político del país y un nuevo escenario donde las regiones opositoras de la llamada "media luna" han tomado la iniciativa política.

"Hay una parte del país fuera de la jurisdicción gubernamental, donde el Gobierno no gobierna", advirtió el analista y ex miembro de la Asamblea Constituyente Jorge Lazarte, quien dijo creer que "no se puede hablar de unidad de Bolivia si a partir de ahora (Gobierno y regiones) no se ponen de acuerdo".

Evo Morales, obligado a negociar

Otros advierten de que el movimiento autonomista de Bolivia, liderado por Santa Cruz y secundado por otras cinco regiones de las nueve que tiene el país, puede generar una fuerte coalición de gobiernos departamentales que obligará a Morales a la negociación.

El analista Carlos Cordero ha apuntado que el referendo cruceño ha sido un plebiscito contra las políticas de Morales, y ha consolidado un nuevo proyecto de oposición en Bolivia, a pesar de que el Gobierno defiende que el suyo es el único que existe en el país.

Trasel referéndum del domingo en el departamento de Santa Cruz para ratificar su estatuto de autonomía, en el que ganó el "sí" con más del 85%, según las encuestas a pié de urna, Morales convocó a los gobernadores a un "diálogo por la verdadera autonomía" y calificó la consulta de "fracaso".

Varios expertos creen que el presidente boliviano se equivoca al minimizar y restar importancia a lo ocurrido en Santa Cruz y al convocar de nuevo al diálogo para que los estatutos se adecúen a su constitución, una estrategia que ya ha fracasado.

En este sentido, Lazarte dijo apostar por diseñar un nuevo escenario de convergencia de los textos autonómico y constitucional "sin que uno se imponga sobre el otro". Ambas partes necesitan de la concertación, según este analista, incluida Santa Cruz, cuyas autoridades "saben que el estatuto necesita base legal" para poder aplicarse.

Dos proyectos para un país

En cualquier caso, los más optimistas piensan que en "el tablero de juego del país" hay dos agendas "muy legítimas": la autonomista y la del proyecto de Evo Morales y su apuesta por la inclusión social y la lucha contra la pobreza.

Ambos proyectos no son excluyentes, en opinión del economista Gonzalo Chávez, quien opina que el 4 de mayo no ha derrotado las "causas justas" que defiende Morales, pero no se puede obviar que las autonomías son una "realidad social clara".

La oriental y próspera región de Santa Cruz proclamó ayer su estatuto autonómico en un referendo cuyos resultados -aún no oficiales- han sido un fracaso para el presidente Morales. No obstante, el mandatario ha vuelto a llamar al diálogo con los gobernadores regionales opositores para concertar una "verdadera" autonomía.

La consulta cruceña estuvo marcada por los enfrentamientos violentos en varios enclaves controlados por el oficialismo que dejaron más de 35 heridos.

Santa Cruz, el primero de la "media luna"

El de Santa Cruz es el primero de una serie de referendos que celebrarán en las próximas semanas las otras regiones de la llamada "media luna": Beni, Pando y Tarija, situadas en el oriente del país las dos primeras y en el sur la segunda.

También las regiones centrales de Cochabamba y Chuquisaca apoyan el movimiento autonomista, pero aún no han fijado fecha para ratificar sus estatutos en consulta popular.

Todas estas regiones están enfrentadas al Gobierno de Morales en una crisis política sin vías de solución por el momento a pesar de los intentos de mediadores como la Iglesia católica o la Organización de Estados Americanos (OEA).